Y aún le creen
Carlos Ramos Padilla lunes 6, Mar 2023Se comenta sólo con…
Carlos Ramos Padilla*
AMLO ha mentido y luego reconoce públicamente su actuar con sonrisas burlonas. Un caso en específico fue cuando aceptó que él dio la orden de liberar a Ovidio Guzmán y ni se trató, como se había dicho, de un acuerdo colegiado. También durante la celebración del primer Grito de Independencia de AMLO en Palacio Nacional aseguró que no habría cena ni invitados. Con una serie de fotografías lo desmintió el embajador de Estados Unidos en México y además dejó en claro la manipulación de las tomas de televisión para evitar que los asistentes aparecieran en pantalla. Lo mismo ocurrió con el tren que nunca existió en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, una burda escenografía.
Pero hay más, el tabasqueño confesó que aún siendo Presidente electo, tres colaboradores “ muy buenos profesionistas y de confianza”, le presentaron un reporte técnico para evitar la cancelación del nuevo aeropuerto en Texcoco. Despreció el dictamen y ocultó que no solamente Alfonso Romo, Carlos Urzúa y Jiménez Espriú le habían presentado sus conclusiones, sino que José María Riobóo fue una pieza fundamental para la construcción del Aeropuerto Felipe Ángeles.
Con toda intención y a micrófono abierto el Presidente señaló”: “Los tres coincidian en que había que continuar con el aeropuerto de Texcoco. Me fui a la casa de ustedes y no dormí esa noche, porque no estaba yo convencido… “Mantuve entonces una conversación con Jiménez Espriú para informarle que rechazaría el dictamen. “Bueno, vamos a dejar la última palabra a la gente. Vamos a convocar a una consulta a ver qué opina la gente”, determinó el Ejecutivo. Consultó entonces a sólo el 1.22% de la población entre el 25 y el 28 de octubre de 2018 para inyectar 450 mil millones de pesos, en la construcción del AIFA y el desmantelamiento del de Texcoco con todo y multas e indemnizaciones, sin siquiera contar con las carreteras e infraestructura para mal llegar a las nuevas instalaciones. Para darnos una idea, en cuatro meses el Felipe Ángeles transportó 157 mil pasajeros, cifra que ocurre en un día en el actual AICM. Así, el AIFA tuvo ingresos por 223 mil pesos, pero sus gastos llegaban a 1 millón 750 mil pesos diarios. Luego de un año, el AIFA presenta resultados muy por debajo de las terminales aéreas de Guadalajara, Puerto Vallarta, Cancún, Monterrey. Tijuana, San José del Cabo, Mérida y el Bajío. Revisando sus otras dos magnas obras la situación no es distinta. Dos Bocas, sin cumplir calendario, con inundaciones constantes y cifras multimillonarias adicionales al presupuesto inicial. El Tren Maya, sin estudios de impacto ambiental, con evidente ecocidio, en zona porosa muy vulnerable, con suspensiones legales en algunos tramos y de acuerdo a estudios técnicos la recuperación de la inversión difícilmente llegará.
Incluso se estima que el propio Presidente presionó a que la fábrica de autos Tesla se construyera en el sureste para incrementar la plusvalía de sus propiedades, capricho que no se le cumplió y que ganó, sin su intervención, el gobierno de Nuevo León. Con todo esto hay quienes aún le creen al Presidente que su preocupación son los salarios de los consejeros en el INE y su intención de cerrar Fonatur. El daño patrimonial y el quebranto económico serán tema central en las próximas décadas.
* Conductor del programa Va en serio, Mexiquense TV Canal 34.2, IZZI Canal 135 y Mexiquense Radio.