En vez de Vitacilina, Morena prepara una concentración para el 18 de marzo
Miguel Ángel Rivera martes 28, Feb 2023Clase Política
Miguel Ángel Rivera
Hayamos sido un millón o sólo cien mil, el hecho es que la presencia de las personas que llenamos el pasado domingo el Zócalo de la Ciudad de México y calles adyacentes —esto sin contar los otros muchos miles que se manifestaron en otras ciudades del país y del extranjero— provocamos gran ardor, escozor, comezón en las filas del oficialismo.
Esto lo demuestra el hecho de que, al igual que noviembre anterior, otra vez los incondicionales de la llamada Cuarta Transformación, ya se aprestar para “desagraviar” al presidente Andrés Manuel López Obrador con otra gran concentración.
Para esa manifestación de desagravio se eligió una fecha histórica, tal vez una de las más sentidas por los mexicanos, el 85 aniversario de la expropiación petrolera, a partir de la cual podemos presumir ser los propietarios de los hidrocarburos que abundan en nuestro subsuelo, aunque esa tenencia no se genere más que cuantiosas deudas.
El hecho es que tradicionalmente, diversas organizaciones civiles y dependencias oficiales movilizan a gran cantidad de personas por todo el país para celebrar esa nacionalización. Bastaría con que el todavía poderoso sindicato petrolero congregara a sus afiliados y a los miembros de sus familias para materializar un concurrido evento. De acuerdo con datos incluidos en la enciclopedia electrónica Wikipedia, esa organización obrera tiene más de 113 mil afiliados, suficientes para llenar el mencionado Zócalo, según los datos oficiales cuando se trata de medir las concentraciones convocadas por los opositores al gobierno de López Obrador, pero resultarían insuficientes para un mitin del oficialismo, para los cuales mágicamente aumenta la capacidad de la principal plaza capitalina, pues su aforo se hace crecer hasta un millón de personas.
Sean ciertos o “inflados” los cálculos oficiales, el hecho es que las concentraciones populares del domingo anterior incomodaron a los secuaces del oficialismo, a los cuales habría que extenderles la misma receta que recomienda el principal inquilino de Palacio Nacional. Para ese ardor, la Vitacilina es buena medicina.
Sin importar costos, se prepara una
contramanifestación para el 18 de marzo
Conforme al principio de que nada se mueve si no es con la autorización del Señor, la idea de la contramarcha surgió en la tradicional mañanera del Jefe del Ejecutivo. Ayer, como parte de su catilinaria contra sus rivales políticos, López Obrador los retó a observar lo que va a pasar el 18 de marzo, con su acto masivo para celebrar la expropiación petrolera.
Previamente, López Obrador repasó todos sus tradicionales argumentos para descalificar la concentración del domingo anterior.
Aseguró que quienes participaron en la marcha en defensa del INE buscan enfrentar a su gobierno y proteger a una clase privilegiada. “Es un asunto político, se están agrupando todos los elementos y facciones del bloque conservador. Siempre he dicho que esto es bueno para el país porque antes había mucha simulación”.
Aseguró, asimismo, que sus adversarios utilizan mentiras para señalar que desde el gobierno se quiere atentar contra la democracia. “Cuando dicen que no se toca el INE, lo que dicen en realidad es que no se toca la corrupción, los privilegios y el narco-Estado”.
Por supuesto, sacó “sus otros datos”, al estimar que el número de manifestantes osciló entre las 80 mil y las 100 mil personas, y la mayoría de quienes respondieron a la convocatoria lo hicieron en las ciudades que son gobernadas por la oposición. Tal vez tenía en mente aquella declaración de que dejaría el poder y se iría a su casa de Palenque cuando hubiera una manifestación en que participaran más de 100 mil personas en su contra.
En una más de sus manifestaciones de absoluta obediencia a los deseos de su líder y guía, el gerente de Morena, Mario Delgado se erigió en principal organizador de esa manifestación.
De inmediato, el dirigente formal de Morena convocó a una conferencia de prensa, en la que informó haberse reunido con dirigentes de Morena en los distintos estados de la República, y que les pidió transmitir la convocatoria, pues precisó que la invitación hecha por AMLO es abierta a toda la población.
“Es una convocatoria abierta. En este gobierno se ha recuperado el concepto de soberanía energética, se rescataron los huesitos de Pemex, se inició la inversión en las refinerías de nuestro país, se construye Dos Bocas; se compró una refinería en Texas y, el paso más importante que hicieron nuestros legisladores, de aprobar la nacionalización del litio”, dijo.
Delgado Carrillo informó que habrá una campaña para convocar “a la sociedad abierta de todo el país” y para aclarar que la convocatoria a la marcha del pasado domingo 26 de febrero se hizo “a base de mentiras”.
“Es falso que se busque desaparecer y matar al INE, desaparecer la credencial de elector, despedir a miles de trabajadores del INE. Esas son mentiras”, sostuvo el gerente de Morena, quien agregó que “el fenómeno de la desinformación, de las noticias falsas, de las campañas negras ha sido la estrategia de los conservadores”.
Los dirigentes de la oposición demandaron terminar con la división
Mientras el primer mandatario y el encargado de su partido llenaron de descalificaciones a quienes salimos en defensa del INE, las dirigencias nacionales del PAN, PRI y PRD les respondieron que el pueblo de México no se dejará y defenderá nuestra democracia, por lo cual exigieron dejar de dividir al país y despreciar los derechos humanos.
“El ataque sistemático de López Obrador contra millones de personas que defendemos la democracia, las libertades y al INE, revela su autoritarismo, su intención de imponer como verdad única su visión y su desprecio por los derechos humanos”, expresó el presidente nacional del PAN, Marko Cortés.
Por su parte, el dirigente del PRD, Jesús Zambrano, calificó a López Obrador de reyezuelo alejado de la realidad en México y enojado porque pensó que la gente no iba a salir al Zócalo.
La gran movilización del domingo en defensa de la democracia y en rechazo al llamado “plan B” de reforma electoral, fue “una muestra de unidad del pueblo de México”, que con ello advirtió que “no se va a dejar”, afirmó a su vez el presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas.
“Somos más los que queremos elecciones limpias y transparentes”, y una autoridad electoral sólida, que no permita abusos del poder, agregó el dirigente del tricolor, quien además destacó que con la concentración del día 26 se demostró que “podemos dejar los colores a un lado, cuando la voluntad de una nación se une en una sola expresión. En este caso, indicó, el INE y el Tribunal Electoral, no se tocan.
“Misión cumplida. Llenamos el Zócalo. Reventamos el Zócalo, y por mucho”, declaró Moreno en un video difundido a través de sus redes sociales.
Por separado, el presidente del INE, Lorenzo Córdova, al tomar protesta a dos nuevas funcionarias de juntas locales, expresó su confianza en que el servicio profesional electoral “no será desmantelado” porque prevalecerá el orden constitucional vigente.
Córdova dijo estar convencido de que el INE tiene el mejor servicio civil de carrera de nuestro país”.
Esto en contra de lo expresado en la misma sesión por los representantes de Morena ante el INE, quienes reclamaron a los consejeros electorales por incurrir en desinformación, al aumentar el número de los funcionarios de carrera que deberán ser despedidos en caso de entrar en vigor la reforma del presidente López Obrador
Eurípides Flores Pacheco, de Morena, denunció que los consejeros electorales hacen una “campaña de difamación, de mentiras falsas, de afirmaciones absolutamente infundadas sobre la intención de esta reforma electoral”.
Por si les hiciera falta, López Obrador y sus seguidores recibieron nuevos elementos para renovar sus censuras a los funcionarios del Poder Judicial Federal.
El Diario Oficial de la Federación dio a conocer que los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y los integrantes del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) tendrán un salario mensual de 206 mil 948 pesos, mientras que los repudiados magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) percibirán un sueldo mensual de 201 mil 973 pesos, todos muy por encima de lo que gana el Presidente de la República.