Soldados: más dinero, más crimen
Armando Ríos Ruiz lunes 20, Feb 2023Perfil de México
Armando Ríos Ruiz
En muchas ocasiones he señalado en diferentes medios, la ausencia total de preocupación por disminuir la criminalidad, en aumento desde hace años y acrecentada en el presente. En esta administración apremió su crecimiento, porque el gobierno se niega a su exterminio y al contrario, hace lo posible porque se multiplique, tal vez en obediencia a un plan para que, llegado el momento, actúe en su favor, si los mexicanos, cansados, deciden actuar por su cuenta.
Todo indica que ese es el propósito. Alentarla con la inoperancia de las autoridades encargadas de combatirla, para que se conviertan en coadyuvantes de las fuerzas armadas, mimadas hoy como nadie pensó jamás, para servir al patrón en caso de que la paciencia acabe por abandonar la prudencia y comiencen los brotes ciudadanos de levantamientos, en pos de hacer justicia por sí mismos. ¿Para qué otras cosas podrían servir?
AC Consultores hizo un estudio que se basa en la observación de los primeros cuatro años de gobierno, que abarca otros sexenios. Su conclusión, apenas publicada, dice textualmente: “aunque el gobierno federal ha gastado más en seguridad pública y ha incorporado a miles de policías y militares en esa tarea, hay más violencia, la mayoría de los delitos ha ido al alza y se ha expandido la presencia criminal en el país por la atomización de los cárteles”.
Hace apenas unos días apunté que ni siquiera hacen falta las estadísticas que hablan mentirosamente de la baja de los delitos. A simple vista se nota que es exactamente al revés, por más que las autoridades policiacas y de otra índole insistan en su descenso. En todos los estados, sus moradores se dan cuenta de que los crímenes no son siquiera contabilizados para los sondeos.
El homicidio se disparó 89 por ciento desde el periodo de Calderón y el crimen organizado incrementó “significativamente” las perturbaciones a la paz y el orden interno de los estados, pues pasó de tener a 11 estados catalogados “en emergencia”, a 29, destaca el análisis elaborado por un grupo de expertos en temas de seguridad pública.
El Presidente ha dado en apartar a la clase militar de sus tareas cotidianas para las cuales está entrenada, como la de salvaguardar el orden y la seguridad internos y usarla como mil usos en muchas otras, con la dotación de un presupuesto jamás soñado siquiera. Es decir, tocó las fibras más sensibles de este medio, con la entrega irrechazable de dinero en abundancia.
Se trata de estimular con numerario colosal a los uniformados, para que sin dudarlo, entren en acción a la voz del jefe. El estudio abunda: “Con el panista (Calderón), se canalizaron a la Secretaría de Defensa Nacional 50 mil millones de pesos en 2011 para esta función; el año pasado la cifra ascendió a 104 mil millones de pesos”. En 2023, el presupuesto se elevó a niveles de fantasía.
¿Y qué hemos ganado los mexicanos pese a ese incremento del 100 por ciento, tan sólo el año anterior? Contrastantemente, la multiplicación de la criminalidad y por consecuencia, de los crímenes. Esto no es más que una prueba fehaciente de que no existe en el ánimo del mandatario mexicano combatir la delincuencia, sino dejarla en santa paz para su provecho. Esta circunstancia la conocen bastante bien los delincuentes y se aprovechan de ella.
Como dice el estudio, han abarcado casi todo el territorio nacional y las fuerzas castrenses están a su servicio. Es lo que se conoce en las entrañas de sus territorios. Hay personas que cuentan que vieron a un pelotón de soldados siguiendo a un grupo de narcotraficantes en la sierra de algún estado. Añaden: “pero iban detrás para protegerlo. Para asegurar que la mercancía llegara a su destino. Para resguardarlos de otros criminales”.
Alberto Capella, ex secretario de Seguridad de Morelos dijo: “Tienes más fuerza federal en las calles, pero más homicidios, entonces, a mayor inversión, resultados más lamentables”.