Pide limosna para dar caridad
¬ Luis Ángel García lunes 13, Feb 2023Por la Derecha..!
Luis Ángel García
Más allá de la polémica condecoración de la Orden del Águila Azteca al presidente cubano Miguel Díaz-Canel, lo importante es el soterrado apoyo que da el presidente mexicano al cuestionado gobierno isleño. No sólo es darle apoyo financiero a la administración castrista, sino ser omisos ante las violaciones a los derechos humanos de los paisanos de José Martí, además de la expulsión y encarcelamiento de opositores, la pobreza extrema en que vive la mayoría de la población y las limitaciones que tienen de trabajo y de libertad de expresión.
Sin embargo, el gobierno de la 4T no sólo lo apoya económicamente, sino que pretende encabezar un movimiento latinoamericano para contrarrestar el bloqueo americano y defenderlo de la estigmatización que hacen los gobiernos del área y no pocas naciones europeas. Poco defendible es un Estado que vive bajo un régimen totalitario, una dictadura disfrazada de forzada democracia. Resulta una obsesión muy costosa de la 4T apuntalar a un gobierno antipopular que se aferra al poder dictatorial.
Mientras, aquí el presidente pide limosna para dar caridad y para cumplir el deseo, casi exigencia, de su honrado colega de que se contraten más médicos cubanos —sueldos que no ven los galenos, sino que ingresan al erario de la Isla—, la administración mexicana tiene que hacer circo, maroma y teatro. De por sí, para cubrir los gastos de los programas clientelares de las pensiones y “becas” para viejitos y “ninis”, la 4T ha acabado con fondos y fideicomisos, exprimido presupuestos, cancelado inversiones y programas, provocado el desabasto de medicamentos, lo que ha ocasionado cientos de niños muertos por cáncer —que el gobierno, con indiferencia, ve como daño colateral—, y mantiene una errática política económica que nos ha mantenido en crisis permanente y una inflación incontrolable. De ese tamaño es el boquete en nuestras finanzas.
Ante la imposibilidad de alentar el crecimiento económico, el gobierno recurre a pasar la charola, así que de vez en cuando extorsiona a los grandes empresarios, recorta los sueldos de los burócratas y cancela programas sociales. Así que pide limosna para atender las necesidades de los cubanos, cuando no puede satisfacer los requerimientos de sus gobernados.
Pronto vendrán más facultativos de La Habana, igual de explotados que muchos trabajadores mexicanos, pero también con la misión de ideologizar y adoctrinar a las poblaciones marginadas del país. Con ello, el Presidente pretende perpetuar su populista proyecto político y garantizar los votos para las próximas elecciones.
No sólo es legitimar a un régimen absolutista con la máxima presea que otorga el gobierno mexicano a un extranjero destacado, sino de cubrir sus carencias económicas, cuando existen más de seis millones de nuevos pobres aquí, donde la clase media cada día se acerca más a los parámetros de la pobreza. Dice el gobierno que el periodo neoliberal limitó la formación de médicos y por ello hoy es deficitaria la cobertura de salud, pero en más de cuatro años que lleva esta administración, poco ha hecho para matricular a más estudiantes en Medicina, ni en la Universidad de la CDMX ni en las supuestas Universidades (patito) del Bienestar, las cuales no se han edificado ni cuentan con población estudiantil ni académica, además de que no se han reconocido sus títulos y los más cercano a la carrera de médico es la herbolaria.
Por eso no se puede culpar a las administraciones anteriores de esa falta de doctores, porque la 4T no ha hecho nada. Solo las universidades públicas y las privadas han aportado profesionales de la medicina, mientras que el gobierno recurre a la importación de especialistas, bajo sospechosas condiciones de trabajo.
Si el gobierno quiere pedir limosna, que sea para atender las necesidades de los nacionales, no para solventar las urgencias de un cuestionado presidente cubano.