¿Sabotaje en el Metro o disculpa?
Armando Ríos Ruiz lunes 16, Ene 2023Perfil de México
Armando Ríos Ruiz
Parece que la muerte tiene una fijación importante en la vida de Claudia Sheinbaum, cuestionable jefa de Gobierno de la capital y criticable aspirante a la Presidencia de México: Causarle problemas en los cargos que ha ocupado con la desaparición para siempre, de personas que de una manera u otra tienen que ver con la señora. Alguien me dijo que la parca se alimenta de la ineficiencia de los servidores públicos, aunque se trate de algo nada nutritivo, pues continúa demasiado flaca.
El más reciente accidente en la Línea 3, dejó un saldo de una mujer muerta y 106 heridos, de acuerdo con las informaciones periodísticas. La señora, aspirante a la primera magistratura y preferida del gran jefe, buscó una disculpa y la encontró con la invención de un sabotaje. Muchos dudan de que tal ocurrencia pudiera habérsele ocurrido a ella o si algún empleado trasnochado la tuvo. Se la transmitió y la encontró ideal para salir de semejante embrollo que amenaza su carrera.
Robaron cable y golpearon una caja de cerrojos para cambio de vías en la Línea 12. De estos hechos, la dirección del Sistema de Transporte Colectivo presentó denuncia penal ante el Ministerio Público. Pero lo anterior, lejos de ser una disculpa que deje bien librada a la señora, la compromete. Fernando Espino, líder del sindicato de trabajadores de esta empresa, sostuvo que desde hace mucho ha denunciado la falta de mantenimiento en todas las áreas de la institución.
Presentó argumentos técnicos que se antojan irrefutables, sobre el servicio que concede la caja y por lo que dijo, nada tiene que ver con la motivación de un accidente como el que acaba de ocurrir y por el que fue despedido Alberto García Lucio, subdirector de Operaciones. Alguien tenía que pagar.
Ocurrió igual cuando se desplomó una parte del Colegio Rébsamen. La directora y dos directores de obra fueron los responsables. A uno de ellos le impusieron casi 300 años de prisión. ¿Y los que otorgaron el permiso, funcionarios de la delegación a cargo de la señora Sheinbaum? ¿Y la responsabilidad de ella?
Luego entonces, la versión después del fatídico accidente llevó al encuentro del robo de cable y lo relacionado con la caja. ¿No quiere decir acaso, que esta acción condujo apenas a conocer lo que ocurre? Es quiere decir que el accidente fatal del día 7 de enero pasado provocó que finalmente se dieran cuenta de los hechos anteriores, lo que denuncia la falta de revisión que señaló el líder del sindicato.
Existe un video que data de los días en que doña Claudia buscaba ser la jefa de gobierno de la ciudad de México. Se escucha que resueltamente se compromete a atender el Metro, a punto de cumplir 50 años de edad. Proponía más seguridad. Más mantenimiento y le llamó repotenciación, que consistía en invertirle muchos miles de millones de pesos. Lástima que a estas alturas, dicho transporte no ha recibido más que palos que derivan en contra de los usuarios. Muchos se han encontrado allí con ese costal de huesos que parece perseguir a la funcionaria.
En esa entrevista a cuadro, también se comprometía a ver por la seguridad de los capitalinos. Es hora de que nada se sabe de eso. La ciudad de México vive hoy uno de los peores momentos de su existencia, con robos por doquier y con la criminalidad desatada como jamás en su historia. Afirman algunos policías que tienen órdenes de no actuar en contra de los delincuentes.
¿Qué hacer entonces con las promesas de campaña de esta señora, que desea convertirse en Presidente del país? ¿Tendríamos que creerle, cuando ya hemos visto demasiado en torno a ella, sobre todo, sus deficiencias que la limitan a repetir al pie de la letra lo que dice su jefe y que la dibujan como una persona sin luz propia? ¿Son ejemplos sus descuidos en las instituciones que le ha tocado dirigir?
Por cierto, la presencia de la Guardia Nacional en el Metro (en lugar de ingenieros peritos en la materia) ya ha provocado inconformidad y ha sido rechazada por los usuarios. Ojalá y su presencia no derive en otros percances que tengan que lamentarse. La señora no piensa y no puede siquiera imaginarlo. Tampoco su jefe, quien no soportaría un consejo en contrario. Las medidas que se ejercen, sólo están pensadas para salvar el momento y llegar al objetivo: La Presidencia.