Un mal necesario
Alberto Vieyra G. jueves 12, Ene 2023De pe a pa
Alberto Vieyra G.
De acuerdo con la ex secretaria de Estado norteamericano, Hillary Clinton, en Estados Unidos había hace 15 años entre 35 y 40 millones de narcodependientes que en mañana, tarde y noche buscan la droga por todos los medios.
¿Cuántos millones de norteamericanos dependientes de la droga hay en este momento y qué pasaría en Estados Unidos si no la obtuviesen? ¿Estallaría una guerra civil? ¿Estamos ante un mal necesario, es decir que del otro lado del río Bravo requieren los estupefacientes y en México los hay hasta pa’ventar pa’rriba? ¿Se puede llegar a un arreglo con los cárteles de las drogas de allá y de acá para evitar que siga el baño de sangre y la barbarie que ocasiona la venta de droga? ¿Es factible legalizar las drogas como en 1929 lo hizo Estados Unidos con el alcohol para poner fin a la era de los alcapones? ¿Con la detención de “El Ratón”, Ovidio Guzmán, se acaba en México el negocio del fentanilo y demás drogas y la macabre barbarie que ello provoca en EU y México?
Vaya cantidad de preguntas que me hacen mis tres lectores y radioescuchas y comienzo por lo último.
No, qué va a terminar, al contrario, acuérdese que lo que se prohíbe se fomenta y el reacomodo en el Cártel de Sinaloa ya se produjo con alguien que seguramente será protegido por los gobiernos de México y Estados Unidos.
¿Quiénes están detrás de los grandes cárteles, además de los gobiernos de Estados Unidos y México?
Para que no nos engañen, los grandes jefes de jefes de los cárteles están incrustados en los gobiernos, en los Estados, en las grandes oligarquías económicas, políticas y militares y sin faltar en las poderosas agencias de inteligencia norteamericana.
Recuérdese que el origen del Cártel de Sinaloa fue el Cártel de Guadalajara que traficaba, en aviones de la CIA, armas, drogas y personas que iban a dar a los contras nicaragüenses y de ahí se establecía la conexión con Colombia y los aviones de la fuerza aérea norteamericana regresaban a EU cargados de droga.
El agente de la DEA, Enrique Camarena Salazar fue asesinado por el Cártel de Guadalajara, pues el Kiki Camarena había descubierto esa conexión y de ello da cuenta, la periodista Anabel Hernández en su libro Los señores del narco. Todavía en 2007, cuando cayó una avioneta de la CIA se descubriría que iba cargada de droga y de prisioneros para ser torturados en el extranjero.
Un dato por demás significativo resulta ser que durante la Segunda Guerra Mundial, México fue el proveedor oficial de drogas hacia Estados Unidos y el mafioso Charles Lucky Luciano, era quien las hacia llegar a los mismísimos frentes de batalla de la Segunda Guerra Mundial. La droga se utilizaba para dar valor a los soldados y para atenuar los espantosos dolores cuando resultaban heridos. Como usted puede ver estamos ante un mal necesario.
La narcoeconomía permite a los cárteles de México y Estados Unidos hacer un negocio redondo en empresas y bancos. En 2010, se calculó en 500 mil millones de dólares el lavado de dinero que se hacía tan sólo en el sistema bancario norteamericano y sin faltar en territorio azteca.
Así que como usted puede ver y escuchar, el negocio de las drogas parece no tener fin y tampoco la macabra estela de barbarie que deja y dejará a su paso, a pesar de los encuentros de los presidentes de México y Estados Unidos, que históricamente han estado llenos de simbolismos, pero que nunca cambian absolutamente nada, pues el combate de EU contra las drogas es un combate hipócrita que lleva a cabo fuera de sus fronteras como México, pero no ataca el problema fundamental: Acabar con tantos millones de adictos en tierras del Tío Sam.