Debates “morenos”, para más publicidad
Eleazar Flores miércoles 14, Dic 2022Espacio Electoral
Eleazar Flores
AMLO Y “CORCHOLATAS” OK-. Por conveniencia y herramienta inequívoca de ganar espacios mediáticos, que los de la oposición quisieran, pero no saben cómo hacerlo, las “corcholatas” y su destapador -quien avaló gustoso la estrategia-, están felices por iniciar los seguros debates.
Ciertamente, la propuesta la externó Marcelo Ebrard, pero añadiendo que los interesados en la candidatura presidencial renunciaran a sus cargos. Seguro que tuvo el aval presidencial, pues dudo que la idea haya salido del ronco pecho de Ebrard, sin consultarla antes.
Las dos “corcholatas” oficiales, Claudia Sheinbaum y Adán Augusto López, de inmediato aceptaron el reto del canciller, pero la jefa de Gobierno acotó, no a la renuncia, así descuide su tarea primigenia que es la de gobernar la capital del país. Si ya decidió participar, o la instruyeron para ello, seguirá adelante y sin renunciar, su superior político la apoya y hágale como quiera.
Del primo Adán Augusto, parece ser que no manifestó mayor desacuerdo, limitándose a decir que se sujetaría a las reglas legales y partidistas vigentes.
Las tres “corcholatas” oficiales externaron sus puntos de vista en entrevistas por separado concedidas al “teacher” Joaquín López-Dóriga en su noticiero estelar del mediodía en Radio Fórmula, en el transcurso de la semana pasada… pero hay otra “corcholata” no tan oficial o cuando menos no tan bien vista o no tan citada por el jefe del comando guinda en su púlpito mañanero.
MONREAL-. La cuarta “corcholata” es Ricardo Monreal, cuyo cargo es coordinador de la fracción mayoritaria del Senado de la república, ignorándose si el gerente del Movimiento de Regeneración Nacional, Morena, Mario Delgado, lo incluiría en el grupo de participantes en los debates, tan esperados por todos pero principalmente por el padre de la cuarta transformación.
Imagine un debate sin Monreal Ávila, en caso de que aún formara parte de la militancia guinda, sería el primer mensaje de su baja del cuadro titular de la aplanadora “morena”, por un lado, pero por otro, sus declaraciones con o sin cargo, con o sin partido, podrían resultar periodísticamente más interesantes y noticiosas, máxime que a nivel mediático les lleva leguas de ventaja a sus competidores.
Por ahora se trata de conjeturas, pero al ritmo que llevan las tareas electorales legislativas en la Cámara alta, tendrán un desenlace más pronto de lo que se imagina, máxime que con o sin aval de Monreal pero con la presión del superlegislador Adán Augusto, el “plan B” se aprobó, luego de un “profundo” análisis que duró menos de una hora, para un documento de unas 400 cuartillas.
Como verá, con todo y su senectud, nuestros senadores resultaron ser lectores veloces, que las hayan entendido es otra cosa.