Feminicidio, un grave problema
¬ Augusto Corro jueves 10, Nov 2022Punto por punto
Augusto Corro
La alianza Va por México padece el problema del divisionismo. Dos de sus dirigentes, Marko Cortés, del PAN; y Jesús Zambrano, del PRD, según trascendió, nada quieren saber del líder priista, Alejandro “Alito” Moreno.
Una vez efectuada la traición por parte del tricolor “Alito”, sus colegas ya no le responden a los insistentes llamados para retomar acuerdos.
El propio líder priista exhortó a Cortés y a Zambrano dejar atrás las diferencias y fortalecer la coalición. Será muy difícil que esto ocurra. Inclusive, ya se planteó que los partidos de oposición busquen la alianza con el Revolucionario Institucional, pero alejados de “Alito”.
Como se informó en este espacio, los problemas del dirigente tricolor se agudizaron cuando decidió apoyar a los diputados de Morena para aprobar que el Ejército continue en las calles hasta el 2028.
En la alianza Va por México tenían acordado no apoyar a los legisladores morenistas en la Cámara de Diputados, pero el PRI no cumplió su compromiso.
“Alito” no lo pensó mucho y traicionó a los aliancistas, quienes inmediatamente optaron por suspender la unidad partidista.
La reforma electoral
En la oposición se viven tiempos de intensa lucha política.
Recientemente, concluyó el problema de la permanencia del Ejército en las calles y ahora la pugna partidista es en relación a la reforma electoral.
La nueva ley contempla el cambio del INE por otro organismo, la reducción de diputados, salarios no tan elevados para los funcionarios y menos dinero para los partidos políticos.
En sus discursos, “Alito” manifestó que el PRI votará en contra de la citada reforma electoral.
Sin embargo, con los antecedentes negativos de la conducta de “Alito”, los otros líderes de la oposición saben que es un albur hacer convenios con el priista.
En los círculos políticos también se habla de PRI-Mor, la alianza de priistas y morenista, para, en este caso, aumentar el número de votos de legisladores en la Cámara de Diputados.
Será difícil que en los partidos de oposición se acepte alguna alianza con el líder “Alito”, pues este demostró que se le da muy bien el manejo de la traición.
Lo que viene
Para el Revolucionario Institucional vienen las elecciones estatales en Coahuila y Estado de México (Edomex).
Se trata de las dos últimas entidades con gobierno priista. De perderse, en el PRI se agudizaría su situación de sobrevivencia.
Los partidos opositores tratarán de que en las contiendas electorales mencionadas los represente un elemento de su organización política.
Sin embargo, saben que sólo con unidad podrán ofrecer un papel digno. Así es que no deberían participar separados.
En el Edomex, el Revolucionario Institucional tendrá como representante al gobierno, a Alejandra Del Moral; el PAN a Enrique Vargas del Villar; y el PRD a Omar Ortega; y de MC a Juan Zepeda Hernández.
Una verdadera fuerza competitiva se podría integrar con la unidad de los partidos citados; pero en este sentido, tienen la palabra los dirigentes de los partidos.
La unidad, en duda
Tras las acciones de “Alito” surge la duda sobre la unidad en la alianza Va por México.
Si los dirigentes del PAN y del PRD ya no quieren reunirse con “Alito”, sin duda la oposición se presentará debilitada.
Lo que ocurra en las elecciones de 2023 repercutirá directamente en el PRI que se encuentra en la lona, como sucede con los demás partidos políticos.
Luego de los mencionados comicios estatales, se presentarán la elección presidencial. En el presente, la oposición se encuentra en desventaja, pues aún no tiene aspirante para las presidenciales.
Mientras, en Morena, las “corcholatas” se encuentran en plena campaña electoral.
La unidad, factor importante para la oposición, no se ve por ningún lado.
¿Usted qué opina amable lector?