Los precandidatos presidenciales del PRI votan por preservar la unidad en la oposición
Miguel Ángel Rivera miércoles 19, Oct 2022Clase Política
Miguel Ángel Rivera
En México, durante los últimos cuatro años el número de pobres ha aumentado en 4 millones y más del 38 por ciento de la población no puede adquirir una canasta básica, destacó el ex secretario de Hacienda y de Relaciones Exteriores, José Ángel Gurría Treviño.
El ex funcionario federal y ex secretario general de la Organización para la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) dio la sorpresa al incorporarse a la relación de precandidatos del PRI a la Presidencia de la República.
Aunque recientemente reapareció en la vida pública de México hace poco más de un mes, en la comida anual organizada por la revista Los 300 (Líderes más influyentes de México), su inserción entre los aspirantes a la nominación presidencial resulta notable porque se sale de los estándares del sistema político nacional, pues su último cargo público en México lo ocupó hace más de veinte años, como titular de Hacienda, y porque actualmente tiene 72 años, edad a la que ya están retirados la mayor parte de los políticos mexicanos.
Por comparación, el presidente actual, Andrés Manuel López Obrador, cumplirá 70 años el venidero 2023 y se le consideraba entre los gobernantes mexicanos de mayor edad. Por ejemplo, Adolfo Ruiz Cortines, quien siempre cargó con el mote de “viejito” tomó posesión a los 63 años y terminó su mandato a los 69 y, por el contrario, Carlos Salinas de Gortari, quien entregó el poder hace casi tres décadas, a los 46 años, en abril pasado llegó a los 74 años. Todavía más, el que fuera su jefe, el ex presidente Ernesto Zedillo es menor que Gurría, pues nació en 1951, lo que significa que en diciembre venidero cumplirá 71 años.
Asuntos de cronos aparte, Gurría tiene una preparación académica de primer nivel. Obtuvo la licenciatura en Economía en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y tiene posgrados en la Universidad de Leeds en el Reino Unido, de la Universidad de Harvard y de la Universidad del Sur de California, en Estados Unidos. Al contrario de otros políticos que hacen gala de ser monolingües, Gurría habla seis idiomas, lo que le ha facilitado ocupar cargos en importantes organismos internacionales, como el mencionado en la OCDE y en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Sus simpatizantes recuerdan que el político y economista dejó la economía mexicana sin crisis al terminar su periodo al frente de la Secretaría de Hacienda, lo cual no lograron casi ninguno de sus antecesores ni sucesores.
Otro dato notable: Al contrario de sus muchos de sus coetáneos que se avergonzaban de militar en el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Gurría nunca ocultó su filiación, lo que ahora le vale para sustentar su aspiración a jefe del Ejecutivo.
Todos los precandidatos desean un frente unido contra Morena
Además de destacar el incremento del número de pobres en México, Gurría se sumó a los aspirantes presidenciales que desean un frente de oposición unido para superar a la alianza oficialista encabezada por Morena.
“Va por México debe reconstruirse, afirmó de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), quien precisó que es indispensable pasar a una coalición de la que resulte “una alianza parlamentaria y un gobierno apoyados por los partidos de oposición, que definan juntos la filosofía, las iniciativas legislativas y los principales actos de gobierno”.
Al participar en la primera jornada de los “Diálogos por México”, el ex secretario de Hacienda y Relaciones Exteriores reconoció que en México “no tenemos una tradición de coaliciones”, pero consideró que “los tiempos y las circunstancias cambian” y “nuestra democracia debe adaptarse”.
En materia de seguridad, señaló que los países que cuentan con mayores índices esta materia se basan en tres pilares: La fortaleza de las policías locales, la confianza entre autoridades y ciudadanos, y las autoridades civiles.
Para ello, dijo, debemos contar con esquemas de trabajo donde cada uno de los tres niveles de gobierno asuma la responsabilidad que le compete, para brindar protección a los pobladores, sus bienes y sus familias. También propuso el restablecimiento del Estado de Derecho, la modificación del marco normativo, el fortalecimiento de los órganos autónomos y una reforma fiscal progresiva.
Destacó que la debilidad del Estado de Derecho en México “ha sido un obstáculo para el crecimiento económico, porque las inversiones no llegan a donde no hay confianza y el Estado de Derecho es débil”.
En cuanto a economía, Gurría destacó que de no cambiar las condiciones, en los años venideros la economía crecerá al dos por ciento, lo que “es insuficiente y preocupante”. Al respecto, recordó que la inversión pública ha disminuido del 7 al 3 por ciento.
Acerca de los órganos autónomos, señaló que su actuación “se ha visto limitada para fungir como auténticos contrapesos del poder, porque han sido blanco de descalificaciones, sustitución de titulares, retrasos en nombramientos e insuficiencia presupuestaria”.
Relaciones Exteriores venero de aspirantes presidenciales
Para hacer frente a Morena, hace falta que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) tenga la humildad y la sensatez para recuperar la confianza ciudadana y la de los otros actores políticos, así como recuperar la honorabilidad, para traer a la mesa a antiguos y nuevos aliados, afirmó Claudia Ruiz Massieu Salinas, ahora senadora, ex dirigente nacional del tricolor y también ex titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, dependencia por la que han pasado muchos aspirantes a la Presidencia de la República.
Heredera de la inclinación por el trabajo político, tanto por la vía paterna como la materna y a sus 50 años (cumplidos en julio anterior) la ahora legisladora ha cimentado una sólida posición que la llevó a ser considerada entre los cuadros que su partido, el PRI, propondría para una eventual alianza opositora, con lo cual llegaría al mismo nivel que alcanzó su padre, José Francisco Ruiz Massieu, quien fue asesinado cuando se perfilaba para conquistar una candidatura presidencial. Por el lado materno, su tío Carlos Salinas, sí llegó a despechar en la oficina principal de Palacio Nacional.
Uno de los más recientes testimonios de su capacidad para tomar decisiones sin atender a presiones externas, fue el que Ruiz Massieu Salinas votó en contra y se mantuvo ajena a las negociaciones atribuidas al PRI-Mor(ena) para ampliar el periodo por el cual la Guardia Nacional continuará bajo control militar.
Al participar en la segunda jornada de los “Diálogos por México”, Ruiz Massieu aseguró que “Morena nos tiene divididos” y constituye un partido “depredador, asesino de la esperanza”.
Indicó que, ante esta situación, “México hoy más que nunca nos necesita a todos los que creemos que hay una alternativa a lo que vivimos, y a lo que nos ofrece Morena todos los días”.
La también ex secretaria federal de Turismo puntualizó que para ello “necesitamos hablar con la verdad, para que de esta casa podamos convocar a lo mejor de todos los partidos y de toda la sociedad, para lograr el rescate y la reconstrucción de nuestra patria”.
Lamentó que México está muy mal, porque Morena y su gobierno destruye todos los espacios de la vida cotidiana con ocurrencias e improvisaciones, por lo que “el momento de la decisión es ahora”. Hay que “reconfigurar la alianza”, así como honrar “el valor de la palabra, que en política todo significa”.
La abogada, graduada en la Universidad Iberoamericana, con estudios de posgrado en el Centro de Estudios Políticos y Constitucionales de Madrid, España y en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) recordó que los priistas crearon las instituciones que dieron forma al México moderno. “Incorporamos la paridad y los derechos humanos a la Constitución. Tomamos la decisión de evolucionar para dar paso al pluralismo y a la diversidad e incorporarlas como la base de nuestra democracia”.
En tanto, el dirigente nacional del tricolor, Alejandro Moreno Cárdenas, afirmó que “tenemos los perfiles, la plataforma, el proyecto político y la militancia más leal y comprometida”.
El PRI tiene todo para ganar esta batalla, agregó el presidente del tricolor, aseguró que “tenemos con qué hacer las cosas y hacerlas bien”, por lo que consideró que “aquí empieza la reconstrucción de México”.