Hambreadores
Alberto Vieyra G. viernes 14, Oct 2022De pe a pa
Alberto Vieyra G.
Qué lejos quedó aquél México de Salvador Flores Rivera, el siempre recordado Chava Flores, cuando en su canción La Bartola retrataba la economía de hace casi un siglo, cuando en México se amarraban con longaniza los perros. Decía Chava Flores:
“Mira Bartola, ahí te dejo esos dos pesos: Pagas la renta, el teléfono y la luz. De lo que sobre, coges de ahí para tu gasto. Guárdame el resto para echarme mi alipús”.
Claro que en su canción estaba presente el humor de mi querido Chava Flores, quien junto con Juan Záizar serían los padrinos de mi primer programa radiofónico que este átomo de la comunicación tuvo en la XEW de 1980 a 1985 “En vida”.
¿Para qué alcanzan hoy 2 pesos? Para que le mienten a uno la madre si comete la osadía de dárselos de propina a alguien.
1915, fue conocido en México como el año del hambre. Escasearon los granos, eran los tiempos de la Revolución Mexicana. De la Convención Militar de Aguascalientes en noviembre de 1914, surgiría el Presidente interino Eulalio Gutiérrez, quien metería a la cárcel a muchos acaparadores y hambreadores, entre ellos al mismísimo yerno de Porfirio Díaz, Ignacio de la Torre y Mier, casado con Amada, la hija mayor del depuesto archicondecorado general quien para entonces ya se encontraba en el exilio francés. Poco más de un siglo después, la inflación en el mundo ha desatado una espantosa y peligrosa carestía de la vida que amenaza a varias naciones con estallidos sociales.
¿Estará lejos de rugir el México bronco? Recordaré 2017, durante la Convención Bancaria en Acapulco, el actual inquilino de Palacio Nacional, AMLO, advirtió que si le hacían un fraude electoral en el 2018, él se retiraría a su rancho en Palenque ese que tiene un nombre de la guayaba y la tostada y sentenció: “a ver quién amarra al tigre”.
La frase cobra actualidad y notoriedad porque la gente que todos los días rasguña bolsillos para a completar para el camión, pagar las tortillas, comprar frijoles y unos cuantos chiles verdes porque la cosa esta que temor diera, se preguntan: ¿Estará lejos el día en que se suelte el tigre del que hablaba AMLO, quien ha sido incapaz de contener la inflación y la carestía con la que los hambreadores hacen su agosto, su septiembre y su todo el año y lo peor es que la economía azteca amenaza para 2023 con otro año más tomando chiquitolina, es decir un 2023 en recesión y con una baja expectativa de crecimiento del 1.2% anual del PIB?
Ese desastre económico que nos está heredando AMLO amenaza con soltar al tigre. AMLO no puede con el paquetazo y vaya que prometió mil veces que durante su sexenio no habría crisis económica, ni devaluación del peso, mucho menos gasolinazos y que México sería Pejelandia. Puro choro mareador. No es lo mismo que lo mesmo o decir qué hacer.
Aquí entre nos: ¿Usted amable lector y radioescucha ha acompaña usted últimamente a la ama de casa al mandado o le pasa lo que a mí que estoy como la patita de Cri-Cri que ya no va al mandado nomás de ver tan caro que está todo en el mercado?
Hace 3 años, cuando comenzó la pandemia, me gastaba mil pesos por semana en el pipirín, pero hoy con el doble solamente compro charales con papitas y nopales y mejor me quedo en casa porque me da por echarles mentadas a los hambreadores y al gobierno que no se ve como en tiempos de Eulalio Gutiérrez. ¡De ese tamaño es la inflación!
Una ama de casa me preguntaba “¿Qué es eso de la inflación?” Pues es la devaluación de nuestro peso que cada vez nos alcanza para menor y nos hace pensar en La Bartola de Chava Flores y en los bartolos gobiernos de hoy que no pueden contenerla.