En juego, militarización de la política, advirtió el ex gobernador de Querétaro
Miguel Ángel Rivera jueves 15, Sep 2022Clase Política
Miguel Ángel Rivera
El ex gobernador de Querétaro y ahora diputado federal del PAN, Ignacio Loyola Vera, puso el debate acerca de la Guardia Nacional en sus justos términos: No se trata de la militarización del país, lo que está en disputa es la militarización de la política.
Para eso es necesario tener en cuenta que la reforma constitucional para crear la Guardia Nacional estableció que ese cuerpo policíaco tendría mando militar durante un periodo de cinco años a partir de la publicación del decreto respectivo en el Diario Oficial de la Federación (DOF), lo cual ocurrió el 26 de marzo de 2019.
Esto quiere decir que el mando militar sobre la Guardia Nacional -por consiguiente, sujeta a la disciplina de las fuerzas armadas- terminará tres meses antes de las elecciones que posiblemente serán impugnadas por el partido oficial, Morena y sus satélites, en caso de que no les gusten los resultados, sobre todo si para esa fecha subsiste en tal repudiado Instituto Nacional Electoral (INE).
Loyola, quien dijo sentirse muy agradecido por la institucionalidad del Ejército nacional, que contribuyó a generar respeto a su victoria en Querétaro, primera de un partido de oposición, no entró en detalles acerca del porqué el interés del actual gobierno federal por retener el control de la Guardia Nacional bajo mando militar.
“Siempre pensé que después de la aprobación de la reforma constitucional para crear la Guardia Nacional, algún día -en esta legislatura- estaríamos aquí reunidos para derogar el Quinto transitorio, para celebrar que después de casi tres años y medio ya se pudo conformar una policía civil, profesional y preparada, para festejar que las ofertas de campaña se cumplieron, para presumir la pacificación del país, para cumplir un mandato ciudadano.
“El estar aquí en esta tribuna, da una responsabilidad enorme porque tenemos que convencer, tenemos que dejar claro el por qué no estamos de acuerdo en esta iniciativa, pero no debemos caer en el falso debate.
“Acción Nacional no está en contra del Ejército mexicano. Acción Nacional puntualiza que el debate es, no es si debe o no permanecer el Ejército en las calles. El debate está centrado en el endoso que se le quiere hacer al Ejército del fracaso de un gobierno civil en seguridad”, agregó el legislador panista, quien precisó:
“El debate debe centrarse en, precisamente, mencionar y dejar claro que el Ejército no está preparado para fungir las funciones de prevención de seguridad, pero también dejar claro que se vale cambiar de opinión, ya lo dijo (¿?), se vale cambiar de opinión, pero lo que no se vale es traicionar los principios y los ideales. Un líder puede cambiar de opinión, pero tiene que convencer, no se vale amenazar, no se vale comprar voluntades ni mucho menos guardar silencio.
“Amigos, el verdadero debate es por qué esta iniciativa entra por la puerta de atrás de esta legislatura. El verdadero debate es por qué esta iniciativa se tiene que discutir en este momento, cuando deberíamos -si fuera el caso- debatirla a finales de 2023 o a principios de 2024, cuando vence el plazo en marzo de 2024.
“El falso debate se centra en que estamos ampliando este quinto transitorio, y ojo, mucho ojo, hasta después de un proceso electoral. ¿No será que quieren controlar las elecciones? Y no estoy diciendo que se está militarizando al país, lo que afirmó es que se está militarizando la política”, añadió el ex mandatario sin levantar la voz como hicieron otros legisladores.
Remató: “Ampliar un plazo cuando se conoce claramente la intención de que no se hará nada, es peligroso. Tenemos tres años y medio con el quinto transitorio vigente y no se ha hecho nada para conformar una Guardia Civil nacional, y no se ha hecho más que desaparecer a la extinta Policía Federal. Esta es la realidad por la cual hoy hay inseguridad en México, la destrucción de una policía federal que servía, si ustedes quieren medianamente, pero no se perfeccionó, se le eliminó. Ese es el grave problema que hoy tiene México, la eliminación de la policía federal”.
Las cifras confirman que la Guardia Nacional no fue solución
“Al cumplirse 46 meses del actual gobierno federal, se han registrado 33 mil 500 homicidios dolosos en México con una tendencia a la alza, destaca este miércoles el reporte ‘MX: La Guerra en Números’, de T-ResearchMX, con base en datos del registro de homicidios dolosos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y que comprende el periodo del 1 de diciembre de 2018 al 13 de septiembre de 2022”, dice la nota informativa aparecida ayer en el portal del diario Crónica, la cual agrega:
“De acuerdo con el reporte, la violencia no se ha controlado como señalan dependencias de la 4T y el mes con el mayor registro de homicidios dolosos es octubre de 2020, que registró 3 mil 347 casos, mientras que el mes con menor registro de homicidios dolosos fue febrero de 2022 con 2 mil 264 casos”.
Además, T-ResearchMX destaca en su análisis que en relación con gobiernos federales anteriores, la administración de la 4T ya rebasó las cifras de las tres últimas administraciones en el mismo periodo. En la administración de López Obrador dicho delito tiene 133 mil 500 casos, cifra superior al del gobierno del ex presidente Enrique Peña Nieto, que registró 81 mil 299; al del exmandatario Felipe Calderón con 60 mil 319 asesinatos y al del expresidente Vicente Fox, con 37 mil 649 reportes.
El estudio de T-ResearchMX incluye también un cuadro acerca de los homicidios dolosos durante los primeros 34 meses de gobierno, periodo en donde también es superior la cantidad de crímenes cometidos en el actual gobierno federal.
Por ejemplo, en el tan criticado periodo de Felipe Calderón, en esos 34 meses se registraron 37,906 asesinatos, mientras que con Enrique Peña llegaron a 60,343, cifra que representa un gran aumento, pero nada comparado con lo ocurrido durante la administración de López Obrador, en la cual se acumularon 97,724 homicidios dolosos.
El estudio de T-Research concede, por el contrario, la confirmación de una cifra que mucho ha presumido el actual gobierno federal y que, seguramente, volverá a ser exhibido por el primer mandatario en su anunciado discurso de mañana, sobre todo que ya decidió dejar de lado el tema de la soberanía enrgética: en efecto, se registró un descenso en el número de homicidios dolosos del periodo enero-septiembre 2020 a igual plazo de 2021. En el primer año fueron 24,126 los asesinatos y en el segundo disminuyeron a 21,393. Algo es algo.
¿Por qué hasta ahora la denuncia?
Es un hecho que la iniciativa de reforma respecto a la Guardia Nacional será aprobada por las bancadas oficialistas de Morena, PT y PVEM, además de la fracción del PRI que presentó la propuesta bajo el supuesto de velar por la seguridad de la sociedad mexicana, pero que se ajusta a los deseos de la llamada Cuarta Transformación.
En este marco, sorprende la denuncia a destiempo del coordinador de la bancada del PRI en la Cámara de Diputados, Rubén Moreira, acerca de presiones indebidas del ex presidente Felipe Calderón, con el que le tocó coincidir como mandatario de Coahuila.
Moreira reveló que, durante su gestión como gobernador, el presidente Felipe Calderón lo obligó a firmar un contrato y en caso de no hacerlo el Ejército no los apoyaría con la seguridad en el Estado.
“Felipe Calderón nos hacía a los gobernadores firmar contratos, si no, no nos mandaba al Ejército, de ese tamaño era el chantaje que había”.
Esas declaraciones las hizo antes de empezar la sesión en la Cámara de Diputados donde se discutirá la ponencia presentada por su bancada para prolongar el mandato de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) sobre la Guardia Nacional.
Como era obligado, pues se supone que es una iniciativa propia, Moreira anticipó que los integrantes de su fracción parlamentaria votarían a favor, sobre el supuesto de “que es lo que necesita la patria”.
En cuanto al eventual rompimiento de la coalición Va Por México, dijo esperar que no suceda, pues todavía tienen muchas batallas por delante.
“Yo hago votos porque no se rompa la Alianza, hay muchas batallas que dar, pero tampoco se vale que si nosotros estamos convencidos de algo, se nos quiera forzar”, dijo el legislador, antes de empezar el proceso para prolongar el mando militar sobre la Guardia Nacional.
Aviso: Mañana, por ser día feriado, no aparecerá esta columna.