Imparable, el incremento de embarcaciones “pirata”
José Luis Montañez Aguilar, Nacional* miércoles 31, Ago 2022Derecho de réplica
José Luis Montañez
- Falta de vigilancia representa un riesgo para la seguridad de los turistas
En las aguas de Quintana Roo es imparable el incremento de embarcaciones “pirata” que ponen en riesgo la vida de los turistas; tan sólo en Cancún son más de 500 embarcaciones irregulares, ante la falta de vigilancia, personal y presupuesto de la Capitanía de Puerto en el estado.
Uno de los atractivos del paraíso quintanarroense, que engancha cada año a los turistas, son las actividades acuáticas, recreativas y pesca que realizan, que si bien generan una importante derrama económica, implica una serie de gastos y permisos previos, que se tiene que efectuar para poder ofrecer dichos servicios.
Empero cada año, tanto los hombres de mar, pero en particular, los náuticos que se enfocan a brindar servicios de tour, denuncian una descarada competencia desleal de parte de embarcaciones ilegales, que carecen de una cooperativa o de una libreta de mar, que los avale.
Dicen que esas embarcaciones privadas son de empresarios que ya no les alcanza para mantener su propio negocio y le dan ese proceso en el cual le dicen al marinero y al capitán que consigan gente, saquen los viajes, paguen su sueldo, su combustible con tal, que no le cueste al dueño, que de manera arbitraria fomenta el pirataje en embarcaciones y la operación de navieras ficticias.
Ningún sistema de seguridad
Las consecuencias para quienes sí operan en la legalidad, se tornan complicadas, porque esas empresas navieras ficticias y embarcaciones “pirata”, no generan impuestos, no cuentan con sistemas de seguridad, no tienen resguardos, y no tienen certificados de seguridad marítima.
El incremento de embarcaciones “pirata” cerca de áreas de protección, es un tema preocupante para el Parque Nacional Costa Occidental Isla Mujeres, Punta Cancún y Punta Nizuc y del área de protección de flora, fauna y manglares de Nichupté, que preside José Arturo González González.
Tan sólo el parque marino tiene 613 embarcaciones autorizadas para realizar actividades náutico-recreativas, y aproximadamente 100 motorizadas, empero en cada temporada vacacional suelen detectar más de 300 embarcaciones piratas que prestan dichos servicios sin permiso.
La preocupación real son los graves daños que pueden realizar esas lanchas por el desconocimiento de la zona, ya que pueden encallar o generar fragmentación o desprendimiento en colonias de corales.
Además de poner en riesgo a la población o turistas, al trabajar con un aforo mayor al permitido, de acuerdo con el semáforo epidemiológico, que todavía está vigente en la presente pandemia de Covid-19.
Náuticos enfrentan publicidad negativa
La inversión que realizan los Asociados Náuticos de Quintana Roo, de acuerdo a Francisco Fernández Millán, es onerosa con tal de brindar servicios de calidad y seguridad a sus usuarios en tanto reciben un servicio avalado por las autoridades vigentes a diferencia de los operadores de embarcaciones “pirata”.
Los navíos ilegales operan en todo el estado ante la nula actuación de las autoridades ya que según los propios náuticos, la Capitanía de Puerto, carece de presupuesto y de personal para realizar la vigilancia.
Cada año, se dan casos lamentables en consecuencia de las irregularidades con la que operan las embarcaciones ilegales como la muerte de turistas, que lleva al caño el trabajo de promoción e inversión.
De acuerdo a los náuticos, no sólo se daña a la industria, sino a la imagen del destino, por ello la importancia que las autoridades apliquen la ley, de ahí que el eterno reclamo que hacen a Capitanía de Puerto.
Las embarcaciones “pirata” operan sin permisos, seguros, no usan chalecos, ni tienen protocolos de seguridad marítima poniendo en riesgo a los usuarios, reclamo generalizado que surge cuando se presenta un accidente o la muerte de algún turista.
Dichas embarcaciones no forman parte de ninguna asociación, operan en la legalidad y aunque no se tienen contabilizadas cuantas hay en el estado, solo en Cancún han detectado 500 y el argumento de las autoridades para ponerles un freno, es que no hay personal, ni recursos.
La falta de personal de Capitanía de Puerto, aseguran los náuticos provoca de manera constante no sólo la falta de vigilancia, sino que tampoco pueden hacer trámites de libretas de mar, permisos, darles seguimiento a las embarcaciones ilegales y mucho menos para garantizar la seguridad.
Trata de personas se dispara durante pandemia
Lamentablemente, uno de los problemas que se agudizó durante la contingencia sanitaria por Covid-19 fue la trata de personas, pues si bien, es un problema que ha venido en creciente desde el 2015, no fue sino hasta 2019 que se disparó el número de víctimas, que principalmente corresponden a mujeres y niñas que son explotadas sexualmente; lo cual debería encender las alertas de las autoridades a fin de que se tomen cartas en el asunto y se erradique el problema.
Actualmente, Quintana Roo acumula oficialmente 135 víctimas e igual número de carpetas de investigación abiertas por trata de personas desde el año 2015, de ese total de casos, el 59 por ciento, que corresponde a 79 víctimas, fueron registradas entre el 2020 y mayo de 2022, es decir, que el periodo de pandemia, sirvió para empeorar este tipo de delito en el estado.
Es decir, que de acuerdo con un estudio elaborado por la maestra Irma Kánter Coronel, investigadora del Instituto Belisario Domínguez (IBD) del Senado de la República, el confinamiento obligado por la emergencia sanitaria volvió a incrementar las cifras de este delito en la entidad
El reporte lleva por título “Trata de Personas en México. Algunas Cifras” y en este se detalla que en 2015 se identificaron 10 víctimas de trata de personas: un hombre, cinco mujeres y cuatro personas de las que no se identificó su sexo, más tarde en el 2016 se registró el menor número de casos, con solo tres, de los cuales, las víctimas fueron un hombre, una mujer y una persona de sexo no identificado.
Comenzó a elevarse incidencia de este delito
Más tarde, en 2017, comenzó a elevarse la incidencia de este delito, con ochos casos, cuyas víctimas fueron dos hombres y seis mujeres. Esa tendencia al alza continúo para el 2018, cuando se reportaron 13 casos, de los cuales fueron un hombre, 10 mujeres y dos personas de sexo no identificado.
Pero no fue sino hasta el 2019, año previo a los efectos de la pandemia de Covid-19 cuando la incidencia de este delito se disparó con mayor alarma, pues en el estado se refirieron 21 víctimas, de estas 8 fueron hombres, 12 mujeres y una persona de sexo no identificado. Luego en el 2020, aun con los confinamientos y políticas de distanciamiento social, los casos registrados llegaron hasta los 45, de los cuales siete eran hombres y 38 mujeres, una inmensa mayoría en cuanto a las féminas.
Finalmente, en 2021 se abrieron otras 20 carpetas de investigación por este delito, con 19 mujeres y otra persona de sexo no identificado, mientras que las cifras de este año aún no se pueden dar a conocer en su totalidad, dado que aún faltan algunos meses, pero, al menos entre enero y mayo se habían documentado judicialmente 15 casos, de los cuales cuatro son hombres, 10 mujeres y una persona de sexo no identificado.
El estudio del Instituto Belisario Domínguez detalla: “Durante los dos años de contingencia sanitaria a causa del Covid-19 la trata de personas no disminuyó. Por el contrario, el número de víctimas incrementó en todas las entidades del país, haciendo evidente la urgencia de establecer acciones más decisivas y efectivas para impedir que este delito siga victimizando a la población, en especial a las niñas, niños y adolescentes, que durante este tiempo rebasaron, en conjunto, a las víctimas de trata de 18 años de edad y más grandes”.
Asimismo, se advierte que en la “nueva normalidad, miles de estudiantes abandonaron la escuela y, seguramente, ya no regresarán a las aulas, incrementando su vulnerabilidad y los riegos de ser víctimas de trata de personas, lo que implica perder una de las redes de protección y apoyo más seguras que tienen muchos estudiantes en México”.
Escríbame a mi mail: montanezaguilar@gmail.com