Octavo mes y noveno periodista asesinado
Eleazar Flores jueves 4, Ago 2022Espacio Electoral
Eleazar Flores
¿CHORREA SANGRE O NO?-. Mientras el padre de la Cuarta Transformación anunció jubiloso la presencia de los Tigres del Norte en los festejos patrios, los reporteros de a pie amanecimos con otra lamentable noticia, la muerte del noveno periodista, el guanajuatense Ernesto Méndez.
Lo peor que nos pudiera pasar a quienes el destino nos estacionó para ejercer la segunda profesión más antigua del mundo, sería acostumbrarnos a estas malas noticias por la frecuencia en que suceden, eso quisiera el poder público pero no será, pues el menor apoyo solidario es fijar en nuestra memoria y la de más gente, a quienes escogieron esta noble y ahora riesgosa tarea.
Apenas en el segundo día de este octavo mes de 2022, ya han perdido la vida nueve periodistas de distintas formas, pero un denominador común, la violencia con armas de fuego de por medio, como para asegurarse el, la o los delincuentes que culminaron con “éxito” su o sus propósitos delincuenciales, sabedores además que escaparon al castigo de la justicia, como ha sucedido en la mayoría de los casos.
Los hechos violentos en contra de compañeras-os periodistas, en este 2022, iniciaron muy temprano, de hecho con el inicio del año, el 15 y 17 de enero, y de entonces a la fecha no paran, como tampoco avanzan la mayor parte de las investigaciones para esclarecerlos.
¿QUIÉNES SON?-. Sólo en enero fueron asesinados José Luis Gamboa Arenas en Veracruz y los días 17 y 23, en Tijuana, Margarito Ezquivel y Lourdes Maldonado, respectivamente, ésta última habiéndole ganado días antes una demanda millonaria al entonces gobernador de Baja California, de apellido Bonilla, pero algo más importante, ser amigo de ya sabe quién.
Todavía el 31 de enero fue asesinado Rodolfo Toledo en su natal Michoacán. El diez de febrero pierde la vida en Oaxaca Héctor López Vázquez y el 24 del mismo mes cae otro reportero, Jorge Castro en su natal Sonora. El cuatro de marzo pierde la vida en el violento Fresnillo, Zacatecas el periodista Juan Carlo Muñiz y el 25 del mismo mes, en Zitácuaro, fallece Armando Linares López.
Además, hay víctimas colaterales no consignadas como la hija del periodista que acompañando a su papá a bordo de su vehículo fue herida de bala y a los pocos días falleció.
Me niego aceptar, como muchas-os colegas con quienes he platicado, ver casi normal y dejar de considerar como noticia la caída de un periodista más y menos a causa de la violencia, si de por sí se no adelantaron muchos a causa de la pandemia y nada efectivas e inmediatas medidas de atención médica, pero esto es otra historia.
¿Parará la violencia contra periodistas?