La oposición, sin líder
¬ Augusto Corro jueves 4, Ago 2022Punto por punto
Augusto Corro
El tiempo corre y la oposición política continúa sumida en una tranquilidad inquietante. Mientras en Morena sobran los aspirantes a la candidatura presidencial, en otros partidos no se cuenta con el candidato que pueda enfrentar al partido guinda y a su líder moral, López Obrador.
En los partidos opositores se encuentra desvanecida la lucha política. Lo más que la oposición logró fue la alianza Va por México, en la que participan PAN, PRI y PRD. Esta coalición ya participó en las elecciones recientes con resultados pobres.
Sin embargo, parece ser que, por el momento, es el único camino que tienen los adversarios de los morenistas en las próximas elecciones estatales del próximo año y las presidenciales de 2024.
En la vida interna de los partidos políticos opositores no se ve entusiasmo alguno en la búsqueda del candidato presidencial que convenza a los aliancistas de que es el mejor y que podría hacer un buen papel en la competencia electoral.
Este último paso tendrá que ser analizado con el propósito de evitar un rompimiento de la posible unidad que integrarían panistas, priistas y perredistas. Es decir, no hacer caso a las ideologías de derecha, izquierda o centro.
Con tal de fortalecer la alianza mencionada no importaría olvidarse de la línea política del partido al que pertenecen. Se trataría, otra vez, de una revoltura de pensamientos y principios con beneficios prácticos para la oposición.
Aunque esa multicitada unidad terminaría si el PRI decide participar con un candidato propio, como parece que lo piensa más de uno de los militantes tricolores.
Con el Partido de la Revolución Democrática no habría ningún problema, su condición de instituto político en vías de extinción, se alinearía con el mejor postor.
En el presente, la oposición política tiene que remar con timoneles paralizados. Ahí tenemos a Marko Cortés, el dirigente panista que nada ha hecho para sacar a su partido del hoyo en que se encuentra. El manejo político no es su fuerte. En Acción Nacional no se tiene aún al candidato carismático que lo salve.
En el Revolucionario Institucional tienen como líder al ex gobernador de Campeche, Alejandro Moreno (a) “Alito”, como máxima figura del tricolor con el problema que el priista está lleno de conflictos. Además, ya se “autodestapó” como aspirante a la candidatura presidencial.
Hace varios días, el campechano realizó una gira internacional para denunciar que es perseguido político. La misma escuela que el ex candidato panista, Ricardo Anaya, quien se encuentra en Estados Unidos.
En la dirigencia del PRD, los militantes de lo que queda del sol azteca tienen al “Chucho” Jesús Zambrano que se aferra a la unidad. Hace muy bien, el encontrarse que su partido lucha por evitar la desaparición, no tiene otro camino que aceptar lo que le ofrezcan.
En sexenios anteriores, a estas alturas de la recta final hacia 2024, los diferentes partidos políticos ya contaban con su aspirante presidencial. En el 2000, Vicente Fox Quesada llegó a la Presidencia con una imagen para la que trabajó por años.
Lo mismo ocurrió con el presidente Enrique Peña. No importó que lo criticaran por la manera en que forjó su precandidatura y candidatura.
Pero eso fue del pasado. Hoy la oposición no tiene líderes que puedan enfrentar a los candidatos que presente Morena.
Una de las organizaciones políticas que desataron tormentas políticas, el llamado Movimiento Ciudadano (MC) ganó dos gubernaturas: Jalisco y Nuevo León. En el primero, Enrique Alfaro resultó una nulidad; basta con informarse de la violencia incontrolable en la entidad. En fechas recientes, el gobernador Samuel García no encuentra la salida a un sinnúmero de problemas. O sea que el MC está muy lejos de representar una opción política.
Así pues, en el escenario político, por ahora, no aparece la oposición.
¿Usted qué opina amable lector?