Un proyecto con promesas atractivas
¬ Francisco Reynoso martes 26, Jul 2022Triple Erre
Francisco Reynoso
El senador Ricardo Monreal, ex amigo de López Obrador, asume un compromiso que, si pudiera cumplirlo, haría la felicidad de la inmensa mayoría de los mexicanos.
Y es que convertiría a México en un país más justo, productivo y con posibilidades de acelerar su desarrollo económico y social.
México sería un “Monrislandya”.
Y como prometer no empobrece…
En el documento Proyecto de Nación que Monreal presentó como plataforma de su aspiración a ser el candidato de Morena a la Presidencia de la República en 2024, el zacatecano propone reducir el Impuesto Sobre la Renta. El odiado ISR. Esa contribución que desangra a los trabajadores formales: Obreros, burócratas, profesionistas y todo aquel que se jode de sol a sol y cobra por nómina o debe presentar su declaración de impuestos como persona física con actividad empresarial.
Monreal habla de una tasa pareja, de monto muy menor al que ahora impone la Secretaría de Hacienda y que ronda entre 33 y 40 por ciento -según el sapo es la pedrada- y exenta a millones de informales, ambulantes, listillos y mañosos a los que la Secretaría de Hacienda no ha podido o no ha querido meter al aro.
Fracasó la política hacendaria
En su campaña por la candidatura de Morena a la Presidencia, Monreal busca congratularse con el pueblo sabio, ese que pone y quita, según su maestro.
Y más que nada busca la simpatía de la clase media aspiracionista, a la que el caudillo López ha insultado y menospreciado.
También de los empresarios y de los líderes sindicales.
Pero Monreal sabe que la tiene muy difícil. Porque la decisión depende única y exclusivamente de un hombre: Andrés Manuel López Obrador.
Y Ricardo ya no entra en sus afectos.
¿A qué le tira?
No está muy claro. Pero de que le tira a alguien, ni dudarlo.
Por lo pronto abrió otro frente con López Obrador.
Vuelve a presentarse como un político sensato, congruente, racional.
Los planteamientos que hace respecto al desempeño de la Secretaría de Hacienda son muy severos.
Otorga razón a Carlos Urzúa, el primer titular de esa dependencia y pone barrido y regado al actual, Rogelio Ramírez de la O.
Advierte Monreal que el terrorismo fiscal —en este país se le tiene más terror a la Secretaría de Hacienda que la policía o a los capos del crimen organizado— es consecuencia de las leyes tortuosas que deben observarse para cumplir con las obligaciones tributarias.
Y destaca que esa maraña legal también provoca atropellos y arbitrariedades de las autoridades contra el contribuyente.
Freno al terrorismo fiscal de la SHCP
En su Proyecto de Nación, Ricardo Monreal plantea: “Hay un problema serio en materia fiscal. Más allá de las misceláneas fiscales anuales, no ha habido una modificación fiscal de fondo (…) Por ello, se requiere desarrollar un plan fiscal profundo. El marco fiscal mexicano hoy tiene muchos parches, tiene muchas inequidades, tiene muchas lagunas que provocan elusión fiscal y evasión fiscal…(y) favorecen la arbitrariedad de las autoridades (…) No debemos caer en el terrorismo fiscal (…) consecuencia de leyes fiscales desequilibradas que impiden una adecuada fiscalización y aplicación de la norma”.
Ofrece pagar menos impuestos
En el párrafo siguiente, el hijo predilecto del Niño de Atocha de Fresnillo, ofrece el paraíso prometido a los contribuyentes secuestrados: “La propuesta es reducir el conjunto de tasas impositivas que conforman el ISR. Y formar un esquema más “plano” y sencillo (…) Lo anterior permitiría aumentar la base gravable de la economía, reduciendo el tamaño de la economía informal y fortaleciendo la estructura recaudatoria. Esta medida transformaría el sistema fiscal de México en uno más justo y equitativo. Los países que han implementado este tipo de medidas en los impuestos al ingreso (conocidos como impuestos directos) han tenido éxito en aumentar la recaudación, ya que un diseño apropiado permite ampliar la base gravable en tal proporción que ello supera la baja en las de tasas impositivas”.
Nuevo choque Monreal vs el caudillo
Estos conceptos que ponen a la SHCP como una panda de trogloditas traerán a Monreal una nueva confrontación con ya saben quién.
Hace 20 días, el caudillo López llevó a su mañanera a Raquel Buenrostro, titular del SAT y le echó muchas flores, tanto a ella como a su equipo recaudador de rentas.
Presumieron juntos la llegada a México de la justicia tributaria, sin condonaciones, el aumento de la recaudación y el que los grandes contribuyentes cumplan sus obligaciones en un escenario de quien gana más, paga más.
Omitieron que el universo de contribuyentes es muy pequeño y se conforma con obreros, oficinistas y burócratas secuestrados por el ISR.
Y que la tortuosa maraña de las leyes fiscales, indescifrables para un mortal común y corriente, provocan evasión, elusión, corrupción oficial y terrorismo fiscal.
Con este documento, que contiene otros muchos capítulos que ya desmenuzaremos, Ricardo Monreal recorrerá todo el país, estado por estado, municipio por municipio.
Lo interesante sería saber si lo hace convencido de que puede ser candidato presidencial de Morena. O si sus afanes tienen otro propósito. Juntarle canicas a otro candidato y negociar. Y negociar para ganar perdiendo.
En eso, Monreal es especialista. Es quizá el único político que en la oposición o en el poder, nunca pierde. Siempre gana. Quizá poco, pero gana.
La verdad es la verdad
y no admite otros datos