Coincidencias y sospechosismo
Ramón Zurita Sahagún lunes 6, Jun 2011De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Una carambola de varias bandas es la ejecutada por el gobierno federal, que golpea por igual al partido que pretende regresar a Los Pinos, al candidato por este partido en territorio mexiquense, a los dos personajes que buscan la candidatura presidencial del tricolor, al principal empresario de México y despeja el camino a una de las principales empresas del país.
Las diversas filtraciones y versiones que corrían con singular alegría en las últimas semanas guardaban veracidad en algunos aspectos, ya que hablaban de golpear al partido tricolor.
Sin embargo, no resultó (hasta el momento) del todo real que la acción se emprendería en contra de uno de los tantos ex gobernadores priístas que dejaron sus cargos en los últimos dos años.
La detención de Jorge Hank Rhon abarca diversas aristas, desde su relación con Manlio Fabio Beltrones y Enrique Peña, su pertenencia como militante distinguido al partido tricolor y su herencia del Grupo Atlacomulco, pasando por su vinculación con Carlos Slim y la competencia que hace su empresa vinculada al negocio del juego a la empresa que encabeza Emilio Azcárraga.
Y en una serie de recientes acciones decididas por el gobierno federal, llaman poderosamente la atención, por encontrarse vinculadas por ¿coincidencias? con poderosos empresarios y empresas.
Lo llamativo de esto, es que da margen a sospechas de que desde las altas esferas gubernamentales se tienden cortinas tenebrosas por el giro de los acontecimientos.
Una de las principales especulaciones es sobre el golpeteo que priva sobre el principal empresario del país (Carlos Slim) y, principalmente, de sus empresas.
También sobre el accionar de esas mismas acciones que, curiosamente, tienden a beneficiar a la empresa con la que Slim se encuentra enfrentado en diversos diferendos.
La reciente acción judicial emprendida contra Jorge Hank Rhon tiende a reforzar la hipótesis de que se trata de despejar los caminos para la empresa que encabeza Emilio Azcárraga Jean en todos los que terrenos que abarca.
Y es que las dos principales empresas dedicadas al juego y regenteo de casinos en México son las encabezadas por el susodicho Hank Rhon y la de Azcárraga Jean.
Es sabido, por obvio y por no representar un secreto para nadie, que Jorge Hank Rhon cuenta con un gran número de guardaespaldas y que el giro de sus negocios le hace necesario contar con personal de seguridad armado, especialmente en estos tiempos, por lo que no resultaba sorpresivo que tuviera un arsenal disponible.
Lo que sí resulta sorpresivo es la forma en que se ejecutó el operativo, recurriendo al sobado tema que una denuncia ciudadana alertó sobre el sitio en que se encontraban las armas.
Eso es lo que resulta sumamente raro, ya que los cuerpos policíacos o militares podían constatar sin necesidad de esas sospechosas denuncias la clase de armamento que usaban y ¿usan? los guardias de seguridad al servicio del empresario mexiquense, avecindado en Tijuana.
La repercusión del golpe de mano ejecutado contra Hank Rhon llega hasta el Estado de México, de cuya rama política proviene la fortuna del empresario que intentó gobernar Baja California y que tiene en su haber la recuperación del principal ayuntamiento (Tijuana) para su partido después de predominancia panista por 15 años.
Es cierto que el hermano mayor de Jorge, Carlos, no resultó candidato en territorio mexiquense, pero también lo es que tejieron una alianza política con el actual gobernador Enrique Peña Nieto y que su detención golpeará la campaña del abanderado tricolor.
También es verdad de la cercanía que mantiene Jorge Hank Rhon con Manlio Fabio Beltrones, presidente del Senado y que el principal operador político de Jorge es el senador Fernando Castro Tentri, personaje crucial dentro del equipo de Beltrones.
Jorge fue durante mucho tiempo uno de los principales respaldos económicos y políticos de Roberto Madrazo Pintado y hasta la fecha mantiene (¿mantenía?) esperanzas de contender nuevamente por el gobierno de Baja California en los comicios del 2013.
Y con esta acción llena de sospechosismo, la pregunta es si continuará la ofensiva contra el partido tricolor para tratar de reducir la diferencia que se mantiene en las preferencias hacia el 2012 y se inicia el despeje del camino del que está considerado como “delfín” presidencial.
Por lo pronto, dentro del tricolor se prendieron las luces de alarma, se convocó al cierre de filas y los políticos que han sido cuestionados se mantienen alerta ante la eventualidad de que el segundo golpe les sea proporcionado a través de uno de estos tan cuestionados personajes.
Y es que con esta acción ejecutada por el Ejército, ya se sabe que desde cualquier sitio se puede operar en su contra y no precisamente por los delitos que se mencionaban y que se relacionaban con protección u omisión a la delincuencia organizada, malversación de fondos, desvío de recursos, etc.
La puerta ya fue abierta y habrá que esperar para saber hasta dónde llegarán las autoridades federales para ratificar que van con todo y contra todos, sin importar los métodos o si solamente se trata de ser selectivos, golpear a unos y beneficiar a otros.
Es el propio gobierno el que deberá justificar estas acciones llenas de sospechosismo y de coincidencias que apuntan hacia una bien desarrollada campaña de reposicionamiento del partido en el poder.
¿QUIÉN SIGUE?
Hay signos que apuntan hacia la posibilidad de que el siguiente en la lista sea otro empresario vinculado estrechamente con Carlos Slim desde hace años y de perfil bajo que opera en forma silenciosa, especialmente en los estados del sureste del país.