Bartlett, sombra de la justicia
¬ Arturo Ríos Ruiz jueves 21, Jul 2022Centro..!
Arturo Ríos Ruiz
- El caso Caro lo puede jalar
- Su inquietud tiene 5 décadas
Manuel Bartlett Díaz, nacido en Puebla de Zaragoza el 23 de febrero de 1936, iniciado en el PRI, hoy en Morena. Fue secretario de Gobernación, de Educación Pública, gobernador de Puebla y senador en dos ocasiones. Desde diciembre de 2018 es director general de la Comisión Federal de Electricidad. Sin duda el político más astuto que se conoce en la era actual.
Su imagen inspira soberbia, suficiencia y displicencia y su mirada es amenazante, pero su habilidad lo ha llevado a ocupar en cargos públicos desde 1962, cuando fue secretario auxiliar de Javier Rojo Gómez, dirigente de la Confederación Nacional Campesina.
Cobró notoriedad insana en 1985, cuando explotó el caso Quintero, donde se le señaló que supuestamente tuvo reuniones con el capo y sus séquitos antes del secuestro y asesinato del agente de la DEA y su piloto Armando Avelar en 1985.
En 1984, figuraban Miguel Ángel Félix Gallardo, el “Jefe de jefes”; Rafael Caro Quintero, “el narco de narcos”, y Ernesto Fonseca, “Don Neto”. En ese año, Bartlett fungía como secretario de Gobernación de la administración de Miguel de la Madrid.
La investigación fijó que tres policías mexicanos, testigos protegidos, informaron que Bartlett y Juan Arévalo Gardoqui, de la Sedena, estuvieron en el interrogatorio a Camarena. Uno de los Indagados dijo que Bartlett recibió 4 mil millones de dólares en 1984 de parte de los tres narcotraficantes y Manuel Salcido, ya que el funcionario buscaba la candidatura a la presidencia. Ahí se quedó.
A partir de entonces y hasta la fecha, el actual encargado de CFE, no va por ningún motivo a los Estados Unidos y siempre se ha publicado que la razón es porque teme ser detenido por el asunto de Caro Quintero.
En las elecciones de 1988, el sistema de cómputo para la contabilidad de los votos se “cayó”. Las votaciones las organizó la Secretaría de Gobernación, que representaba Manuel Bartlett. La maledicencia corrió la voz que fue para impedir el triunfo de Cuauhtémoc Cárdenas sobre Carlos Salinas de Gortari.
En una entrevista le preguntaron que si aún era del PRI. La respuesta de Manuel Bartlett fue la siguiente: “Del PRI hasta la muerte, pero, desde 2006 se unió al Partido del Trabajo y luego se unió a las filas de la 4T. Actualmente, es uno de los funcionarios más protegidos por AMLO.
Con la renovación de caso “Kiki” Camarena, el multicitado Bartlett no debe estar muy tranquilo, es un “pez gordo” para los norteamericanos y podrían darle un susto severo si insisten en llevarlo a declarar a su país, del que es posible ya no regresará al suyo.
La justicia navega como una sombra sobre el alto funcionario que fue acusado con pruebas de su impresionante capital inmobiliario que con argucias simples como el que no estaba casado y eran de su pareja de años, que no quita la complicidad, se pasó por alto y salió airoso y arrogante, otra faceta de su personalidad.