Valor civil
Ramón Zurita Sahagún martes 31, May 2011De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Pocos son los servidores públicos que se atreven a revelar las amenazas que reciben por parte del crimen organizado durante el ejercicio de sus funciones. Hay, sí, quienes lo cuentan a toro pasado, como parte del anecdotario y en aras de un simple protagonismo.
Por eso, es importante tomar en cuenta la denuncia realizada por el gobernador de Tabasco, Andrés Rafael Granier Melo, pocos días después de que solicitara una mayor presencia militar en la entidad que gobierna.
Tabasco es la puerta de ingreso al sur-sureste del país, ya que para ir a Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, por vía terrestre, se tiene que tocar suelo tabasqueño y además cuenta con una buena porción de costa.
De ahí que se hubiese convertido en una zona importante para la delincuencia organizada.
Es cierto que Tabasco no mantiene los reflectores de Chihuahua, Tamaulipas, Nuevo León, Michoacán, Guerrero, Sinaloa o Durango, por los delitos que en ellos se cometen, pero en ese estado se atentó contra un secretario de seguridad Pública, se asesinó a un alcalde en funciones y otros más han sufrido atentados.
También en esa entidad se asesinó a la familia de uno de los marinos que participó en la operación que culminó con la muerte de Arturo Beltrán Leyva “El Barbas”.
La delincuencia deja constancia de su presencia en forma constante, con enfrentamientos con los cuerpos de seguridad locales y con los militares.
Varios personajes de la delincuencia han sido atrapados en Tabasco y se han decomisado toneladas de droga.
Sin embargo, parece ser que, para las autoridades federales, Tabasco no es más que una entidad productora de petróleo, con algo de ganadería y poco de agricultura, sin industrias, al que hay solamente se le proporciona ayuda en casos de extrema urgencia.
Y es que hace unas cuantas semanas, el gobierno federal decidió reforzar la vigilancia en entidades infestadas del crimen organizado como Tamaulipas y Nuevo León, dejando desprotegido al estado del sureste.
Fue entonces cuando Granier Melo levantó la voz y exigió mayor presencia de los cuerpos militares, para garantizar la seguridad de la población.
Tal vez fue el llamamiento del gobernador de Tabasco lo que denotó la violencia y aumentaron las amenazas en contra del gobernador, las que, por cierto, no son las primeras que recibe.
Desde su llegada al gobierno de Tabasco, el gobernador y varios de sus familiares recibieron amenazas constantes, lo que motivó que su hijo decidiera cambiar de residencia, para evitar que las amenazas fuesen cumplidas.
Eso no melló el ánimo del gobernador que continuó con su labor y lo único que hizo fue reforzar su seguridad y tomar medidas precautorias.
Las amenazas cesaron, pero una nueva ofensiva de la autoridad local en contra de la delincuencia desató nuevamente una serie de amenazas que el propio gobernador da a conocer.
Granier Melo previene sobre esas amenazas que no incidirán en su gobierno y reitera que su gestión continuará por la misma ruta que se trazó al tomar posesión.
Mencionábamos que pocos son los servidores públicos en funciones que asumen una actitud como la del gobernador de Tabasco, mostrando en forma pública que no les arredran amenazas, ya que su compromiso es con la ciudadanía.
Caso contrario es el del ex secretario de Gobierno, Humberto Mayans Canabal, de quien se presupone fue también víctima de amenazas y él si prefirió dejar el gobierno y buscar nuevos aires.
Poseedor de una amplia carrera dentro del servicio público, donde ha fungido en un par de ocasiones como secretario de Gobierno, dos veces diputado federal, una más senador y cubierto otras carteras del gobierno estatal, federal y partidista, se hizo raro que tirara tan intempestivamente la segunda posición política en el estado.
Se argumentó que Mayans Canabal dejaba la posición para ir en busca de la candidatura del PRI al gobierno estatal, el partido al que regresó recientemente luego de una ausencia de diez años.
El ex secretario de Gobierno manifestó que caminaría el estado, para conocer de viva voz de los ciudadanos sus posibilidades para competir por la candidatura de su partido, aunque hasta la fecha no lo inició.
Se sabe que tomó unas vacaciones y que lejos está de principiar con un largo recorrido que lo llevaría hasta marzo o abril del año próximo, fecha en que su partido definirá el nombre de su abanderado.
Por eso contrastan las dos posiciones, la del gobernador Granier Melo, quien con valor, sale a denunciar las amenazas recibidas, advirtiendo que lo único que hará será reforzar su seguridad y mostrando su compromiso con la sociedad y la de Mayans Canabal quien prefirió hacer mutis y dejar el cargo de gobierno.
LECTURAS
Un buen ejercicio fue el realizado el domingo por la Secretaría de Educación Pública del Distrito Federal, donde 8 mil personas se dieron a la lectura en forma masiva.
La convocatoria realizada por el titular de la dependencia capitalina, Mario Delgado, dejó en claro que hay interés en la lectura y que cuando se promueve el gusto por ella, deja dividendos.
Delgado propuso que cada colonia y barrio capitalino cuente con su propio club de lectura, en una amplia campaña sobre el tema.
AMALIA Y ZAMBRANO
De urgencia era el tema que tenían que tratar el presidente nacional del PRD, Jesús Zambrano y la ex gobernadora de Zacatecas, Amalia García, el pasado jueves.
Ambos dirigentes de sus respectivas corrientes (Los Chuchos, del primero y Foro Nuevo Sol, de la segunda), hablaron rápidamente en un restaurante japonés, antes de que el “Chucho” segundo pasara a la mesa de sus anfitriones y ella saliera del local.
Y es que las cosas se presentan difíciles para la ex gobernadora por una serie de supuestas anomalías detectadas en su administración.