La “grilla”, sin cambios
¬ Augusto Corro martes 31, May 2022Punto por punto
Augusto Corro
Casi todos los personajes de la política a la mexicana actúan inspirados en el gatopardismo.
El gatopardismo es la filosofía de quienes piensan que es preciso que algo cambie para que todo siga igual.
Supuestamente, con Movimiento Regeneración Nacional (Morena), la política se desempeñaría en un ambiente fresco, renovado; pero no, siguen vigentes esos vicios.
Así lo vemos en diferentes hechos que van desde el llamado “dedazo presidencial” hasta las agresiones a los promotores del voto.
Los mismos actos políticos como el “destape” de candidatos presidenciales continúan como en el pasado. Siguen los saltos de los “chapulines” ambiciosos. Ahí nada cambió. Morena les abrió el camino para hacerlos sus candidatos.
Uno de los ejemplos lo representa, Julio Ramón Menchaca Salazar, el candidato morenista a la gubernatura de Hidalgo.
Menchaca Salazar vio la oportunidad abierta en el partido guinda y no lo pensó dos veces para renunciar al PRI y sumarse a Morena.
Esta vez, la suerte le favorece al ex priista, pues en las encuestas lo señalan como el futuro ganador.
De ocurrir lo anterior, la derrota será para la opositora priista, Carolina Viggiano Austria.
Por otra parte, aunque las “pasarelas” de los precandidatos cambiaron, el fin que persiguen es el mismo. O sea que sigue más de lo mismo.
En tiempos pasados, no se criticaba tanto a los aspirantes presidenciales a promoverse en todas partes y por cualquier motivo.
En el presente, los precandidatos hacen lo mismo, pero según ellos dentro las normas legales.
Van a las reuniones con la autorización laboral aprobada que significa que no se les pagará el día, que es lo que menos interesa.
Lo importante sería que esos aspirantes, que son funcionarios públicos renunciaran a sus cargos, para servir sólo a un amo.
No ocurre así. La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, se fue a las asambleas de su partido Morena, como si la capital no padeciera tantos problemas.
En la misma situación están el secretario de Relaciones Exteriores y el de Gobernación, Marcelo Ebrard y Adán Augusto López, respectivamente.
¿Es tan sencillo el trabajo de “canciller” para darse un tiempo en la práctica de la “grilla”?
O en el caso del tabasqueño Adán Augusto López que estuvo en los cierres de campaña, sin importarle dejar cerradas las oficinas.
En otros niveles de la actividad política, el perredista Jesús Zambrano, en una asamblea en Durango, denunció que es evidente y descarado el uso de recursos públicos para el pago de centenares brigadista con chalecos guindas de Morena por las seis entidades (donde habrá elecciones el próximo domingo); así como el desplazamiento de los miembros del gabinete el presidente López Obrador.
Jesús Zambrano es el líder del PRD que junto con Acción Nacional y PRI forman la alianza Va por México.
Por otra parte, desde Aguascalientes, el dirigente de Acción Nacional, Marko Cortés, reclamó lo siguiente a la Federación:
“Exigimos que ya saque las manos de los procesos electorales, que deje de intervenir amenazando a la ciudadanía y amedrentando a nuestros candidatos, y que se garantice que no se involucre la delincuencia organizada”.
En Quinta Roo, el controvertido líder priista, Alejandro Moreno Cárdenas, pidió al gobierno federal “dejar que los ciudadanos decidan libremente el 5 de junio por quién votar en los seis estados.
En la política a la mexicana no se ven cambios en la forma de practicar la grilla. Irregularidades y vicios en la contienda electoral rumbo al 5 de junio por un lado, y por el otro quejas y denuncias.
El PRI acusó, ante las autoridades electorales, a Claudia Sheinbaum, a Marcelo Ebrard y a Adán Augusto López, por presunta participación de tales personajes en actos proselitista a favor de candidatos de Morena, para las elecciones de 2022.
Las dirigencias del PAN y PRD informaron que denunciarán también a los funcionarios mencionados, así como a diversos gobernadores de Morena, por desviar recursos y tiempo para apoyar a sus candidatos.
¿Le parece que ya cambió la manera de hacer “grilla” a la mexicana?
¿Usted qué opina amable lector?