¿Espaldarazo a Díaz-Canel?
Armando Ríos Ruiz miércoles 18, May 2022Perfil de México
Armando Ríos Ruiz
Antes de que Trump tomara posesión como presidente, hice un viaje a Cuba, la isla que cambió su historia al triunfo de la revolución iniciada por Fidel Castro y que oficialmente culminó el primero de enero de 1959. En medio de la sierra nombró presidente de la isla a Manuel Urrutia, un político gris antes y después del movimiento. Éste había dado cargos a Fidel, quien finalmente fue convertido en primer ministro.
El nuevo amo y señor de Cuba reformó la Constitución de 1940, que lo convertía precisamente en eso. Conocedor de que para industrializar a su patria era necesario del concurso de Estados Unidos, repitió hasta el cansancio que su régimen no era comunista. En una visita a este país organizó mítines y ganó la simpatía de muchos, incluidos altos funcionarios del gobierno.
Había convencido inclusive a miembros de la CIA, de ser lo mejor que había podido pasarle a Cuba. Gozaba de la confianza de los norteamericanos, que veían su arribo al máximo poder con trazos de esperanza para los cubanos y para la relación entre estos y la nación más poderosa del mundo.
El presidente Eisenhower se negó a negociar con el líder cubano y a reducir las cuotas de azúcar. Suspendió la asistencia técnica y de exportaciones. Entonces, Cuba nacionalizó las empresas extranjeras. Luego, con el fracaso del desembarco en Bahía de Cochinos, quedaron rotas las relaciones entre los dos países, hasta la fecha.
Barack Obama había dado muestras de reiniciarlas y de dar un viraje de 180 grados. En Cuba, la gente se mostraba contagiada con la esperanza. Los habitantes delataban ansias de volver a vivir en circunstancias completamente diferentes. Con más libertades. De manera más desahogada. Inclusive, se notaba en las calles a personas que en otro momento no hubieran dado un paso a los gritos de rebeldía en contra del régimen, aún en manos de Raúl Castro.
Vi a un par de jóvenes, uno de los cuales gritaba a los cuatro vientos: “¡Somos 11 millones de cubanos viviendo en la miseria, gracias a un desgraciado que nos mata de hambre…! Lo comenté a un taxista y se mostró incrédulo y preocupado. Me dijo: “Pobre hombre. Lo van a detener y a meter a la cárcel”. En las tiendas, en los restaurantes, se vendían artículos gringos, como la Coca-Cola, pero no comprados a Estados Unidos, sino a México.
A su llegada a la Presidencia, Trump dio totalmente marcha atrás y se acabaron los ánimos de un cambio radical en la vida de los isleños. Hoy, el Presidente Joe Biden vuelve a retomar lo que su antecesor truncó. Aunque a los ojos de muchos políticos, inclusive con excesos. Parece convencido de que hay que abrirse para ayudar al pueblo de Cuba.
Sin embargo, todo lo que haga su gobierno para proporcionarle ayuda, debe forzosamente que pasar por las manos del de la isla del Caribe, en manos hoy de un dictador o de un vividor, como muchos lo han bautizado, quien, ante el anuncio hecho por Estados Unidos, se mostró inconforme, porque para su gusto, debe levantarse de inmediato, también el embargo. Exige. No piensa que por algo se comienza.
En la Unión Americana, el anuncio de Biden no cayó muy bien. De inmediato se levantaron voces que condenan su actitud. Dijo el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, en un comunicado: “Con estas medidas pretendemos apoyar las aspiraciones de libertad y mayores oportunidades económicas de los cubanos para que puedan llevar una vida exitosa en su hogar”.
Al respecto, manifestó el republicano Ted Cruz: “una de las piezas clave de la administración Biden ha sido calmar a los regímenes criminales en el mundo” y en Cuba está haciendo “concesiones catastróficas e injustificables.
Además de lo anterior, Biden anunció una serie de concesiones que en realidad parecen excesivas para un país gobernado por un dictador.
¿Cómo caerá esta actitud al pueblo de Estados Unidos, que manifestará su sentir en el momento en que el demócrata Joe Biden decida reelegirse? ¿Cómo caerá su decisión en otros países inconformes con las dictaduras que se han incrustado en varios países de América Latina?