Rescatan a civiles que tenían meses refugiados en Mariúpol
Mundo martes 3, May 2022
Acciones de ONU y Cruz Roja en Ucrania
- En la primera fase de la operación se permitió la salida de más de 100 civiles
Las Naciones Unidas y el Comité Internacional de la Cruz Roja pusieron en marcha una operación para evacuar a los civiles desesperados que llevan semanas atrapados en la planta siderúrgica de Azovstal, en la ciudad portuaria de Mariúpol, en el sur de Ucrania, según confirmó el portavoz de la oficina de asuntos humanitarios en el país.
“Una operación de paso seguro… está en curso hoy”, dijo Saviano Abreu, de la OCHA en Ucrania, añadiendo que está siendo “coordinada” por la ONU y el Comité Internacional de la Cruz Roja, “en coordinación con las partes del conflicto”.
Según informes de prensa, en la primera fase de la operación se permitió la salida de más de 100 civiles.
Abreu dijo que las autoridades rusas y ucranianas acordaron que “mujeres, niños y ancianos” que llevan casi dos meses en la planta siderúrgica gravemente dañada serán evacuados a Zaporizhzhia, que está bajo control ucraniano al norte de Mariúpol.
Allí “recibirán apoyo humanitario inmediato, incluyendo servicios psicológicos”, dijo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) en Ucrania, tuiteó que ellos y otras agencias asociadas, estaban “listos para recibir a los evacuados”, y esperando que “se produzcan más evacuaciones”.
La semana pasada, el secretario general de la ONU, António Guterres, viajó a Moscú y se reunió con el presidente Vladimir Putin, consiguiendo un acuerdo del primer ministro ruso “en principio” para permitir que se lleve a cabo la operación de salvamento, después de semanas de intentos fallidos de proporcionar un corredor humanitario seguro para una evacuación masiva.
Posteriormente abordó con el presidente de Ucrania, Volodímyr Zelenski, el imperativo de poner fin a lo que Guterres denominó la “crisis dentro de la crisis” y permitir por fin que los civiles abandonen la destrozada ciudad costera tras semanas de bombardeos rusos
La seguridad de los civiles, primordial
En la declaración a los corresponsales emitida el domingo, Abreu dijo que la operación había comenzado con un convoy de la Cruz Roja de la ONU que partió hacia Mariúpol el viernes, desde Zaporizhzhia, un viaje de unos 230 kilómetros.
“Como las operaciones están todavía en curso, no vamos a dar más detalles en este momento”, dijo, “para garantizar la seguridad de los civiles y los trabajadores humanitarios en el convoy”.
La ONU, añadió, “seguirá presionando para que todos los civiles que deseen salir de la ciudad de Mariúpol lo hagan de forma segura”. La ONU se está comprometiendo activamente con las partes para avanzar en estos esfuerzos”.
Si logran salir, sería la primera vez que un convoy organizado por las agencias humanitarias consigue asegurar el paso de los civiles, que viven bajo el fuego de las armas pesadas y los bombardeos aéreos rusos, desde los primeros días de la invasión rusa.
Se desconoce el número de muertos dentro de Mariúpol, pero el alcalde de la ciudad ha informado de que han muerto más de 20,000 civiles.
Los últimos soldados ucranianos que quedaban defendiendo la ciudad se han refugiado, junto con cientos de civiles, en el interior de la vasta fábrica de acero de la era soviética, que cuenta con una serie de búnkeres y túneles laberínticos, lo que ha impedido a las fuerzas rusas acabar con los últimos focos de resistencia.
Las condiciones de vida en la red de túneles bajo la planta de acero, donde se cree que aún permanecen cientos de civiles junto a combatientes ucranianos, fueron descritas como brutales. Hasta el sábado, los esfuerzos de evacuación anteriores habían fracasado.
Imágenes de satélite de la firma estadounidense Maxar, tomadas el viernes, muestran la devastación de Mariúpol, con casi toda Azovstal destruida.
La conquista total de Mariúpol permitiría a Moscú unir los territorios conquistados en el sur, en particular la península de Crimea anexionada en 2014, con las repúblicas separatistas prorrusas de Donetsk y Lugansk en el este.
“Aumentar la presión”
Precisamente en este flanco oriental el ejército ruso, numéricamente superior a su adversario ucraniano y mejor dotado de artillería, está buscando el control, desde el norte y el sur, para completar su dominio sobre el Donbás.
Zelenski advirtió el sábado que los rusos “han acumulado refuerzos en la región de Járkov, tratando de aumentar la presión en el Donbás”.
Se trata de la “segunda fase” de lo que Rusia llama “operación militar especial” lanzada el 24 de febrero por el presidente ruso, Vladimir Putin, tras la retirada de las fuerzas rusas del norte de Ucrania y de la región de Kiev.
“Apoyo adicional en camino”
Por su parte, el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, sostiene que la operación militar se desarrolla conforme a lo planeado por Rusia y advirtió a los países occidentales que dejen de enviar ayuda militar a Ucrania.
El apoyo de Occidente es una cuestión importante, con Estados Unidos a la cabeza.
“Un apoyo adicional estadounidense está en camino”, subrayaron los legisladores estadounidenses que visitaron Kiev, quienes aseguraron que “convertirán la fuerte demanda de financiamiento del presidente Biden en un paquete legislativo”.
También el presidente francés, Emmanuel Macron, anunció el sábado que su país “intensificará” el apoyo militar y humanitario.
“El Reino Unido seguirá proporcionando ayuda militar y humanitaria para dar a los ucranianos el equipo que necesitan para defenderse. Estoy más decidido que nunca a fortalecer a Ucrania y asegurarme de que Putin fracase”, tuiteó el primer ministro británico, Boris Johnson.
Por su parte, Suecia y Dinamarca informaron que un avión ruso de reconocimiento violó brevemente su espacio aéreo. Tras ello, el gobierno danés convocó al embajador ruso en Copenhague.
Miles de personas murieron y millones se vieron forzadas a huir de sus hogares desde que Rusia invadió Ucrania, una exrepública soviética que busca actualmente reforzar su alianza con los países occidentales.
Nancy Pelosi expresa la solidaridad “inequívoca” de EU
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, expresó este domingo la solidaridad “inequívoca” de Estados Unidos con Ucrania, un día después de una visita sorpresa a Kiev, donde se reunió con el presidente Volodimir Zelenski.
La visita a Kiev permitió comprender mejor lo que “se debe hacer” para ayudar a Ucrania, aseguró este domingo Pelosi en una conferencia de prensa en Rzeszow, en el sureste de Polonia, a donde viajó después la delegación del Congreso estadounidense que encabeza.
“Estados Unidos es un líder en el sólido apoyo a Ucrania en la lucha contra la agresión rusa”, tuiteó Zelenski para acompañar un video donde se le ve recibiendo a Pelosi y a la delegación del Congreso a las puertas de la presidencia en Kiev.