Putin corta suministro de gas a Polonia y a Bulgaria
Mundo jueves 28, Abr 2022
En el marco de un nuevo capítulo de la guerra del gas en Europa, Moscú cortó el suministro de sus gasoductos a Polonia y a Bulgaria por la negativa de estos países, miembros de la UE y de la OTAN, a cambiar las condiciones de sus contratos y a acatar la conversión obligatoria de sus pagos en rublos, como exige el Kremlin para proteger la cotización de su divisa ante las sanciones.
La gasera estatal polaca PGNiG informó este martes de que el monopolio ruso Gazprom Export detuvo totalmente el flujo de gas desde el miércoles. Por su parte, la compañía pública rusa, la única con permiso para vender en el exterior, respondió que Varsovia debía pagar desde este martes sus futuras entregas ateniéndose a la nueva legislación rusa. Poco después de este anuncio, la compañía energética rusa informó a Bulgaria de que el suministro también se interrumpiría con este país a partir del miércoles, según confirmó el Ministerio de Energía búlgaro.
La compañía polaca considera que este decreto no es vinculante y no hay motivos para detener las entregas a través del gasoducto Yamal. Además, recordó que siempre ha cumplido sus obligaciones de pago y no tiene deudas con Gazprom. “Se trata de un incumplimiento de contrato y la empresa tomará las medidas adecuadas”, advirtió.
Horas después, Gazprom anunció a la empresa búlgara Bulgargaz, que también cortará el suministro gasístico a Bulgaria a partir del 27 de abril. Como en el caso de Varsovia, el corte se produce tras el rechazo de ambas empresas a pagar por el gas ruso en rublos, como pide Moscú. El presidente ruso, Vladímir Putin, decretó el 31 de marzo que a partir de abril todos los importadores extranjeros debían pagar exclusivamente en rublos a través de un nuevo mecanismo. Polonia es uno de los países de la Unión Europea que más aboga por poner fin a la dependencia de Rusia, país del que hasta ahora adquiría algo menos de la mitad del gas importado y que esperaba reducir a cero a partir de octubre. Bulgaria también recibe de Rusia la mayoría de sus suministros de gas, aunque la dependencia en este caso es mayor: hasta un 90% del hidrocarburo que consumen procede de Rusia.
Como en el caso polaco, el contrato de Bulgargaz con Gazprom concluía este año y Sofía ya había anunciado su intención de no renovarlo. El ministro de Energía, Alexander Nikolov, anunció que Bulgaria está tomando medidas para garantizar el suministro y que por el momento no hará falta restringir el consumo de gas.
Los dos gobiernos piden “calma”
El gobierno polaco ha querido calmar a su población al asegurar que cuenta con las reservas de gas necesarias para “proteger la seguridad” del país, como ha explicado su ministra de Clima y Medio Ambiente, Anna Moskwa. “Habrá gas en los hogares polacos”, ha añadido.
También pide tranquilidad el Ejecutivo búlgaro a su población, pese a la muy alta dependencia que tiene este país del flujo gasístico ruso.
“La parte búlgara ha cumplido plenamente con sus obligaciones y ha realizado todos los pagos requeridos en virtud de este acuerdo, de manera oportuna, estricta y de conformidad con sus cláusulas”, ha señalada la empresa pública Bulgargaz en el comunicado en el que anunció el corte del suministro.