Soldados ucranianos resisten asedio ruso de casi dos meses
Mundo jueves 21, Abr 2022
Mariúpol, controlada casi por completo
- La última resistencia de la ciudad portuaria asegura que luchará hasta el final
La ciudad de Mariúpol, en el sudeste de Ucrania, resiste todavía, tras un asedio ruso de 55 días. Al comienzo de la invasión, Mariupol tenía cerca de 430,000 habitantes. Hoy se calcula que apenas quedan 100,000 viviendo entre las ruinas de una urbe que un día fue el puerto más próspero del mar de Azov.
Tras semanas de bombardeos que han arrasado la localidad, Mariúpol está controlada casi al completo por las fuerzas rusas, pero un pequeño reducto de la última resistencia ucrania aguanta en la enorme fábrica siderúrgica Azovstal, situada en el puerto.
El gobierno ucranio no da cifras oficiales de la cantidad de soldados ucranios que resisten en la fábrica y dentro de sus túneles, pero el Ministerio de Defensa ruso calcula que son unos 2,500 hombres. Un reducto que se ha convertido en un quebradero de cabeza para Rusia y, a la vez, en la última línea de defensa de Ucrania para evitar que el Kremlin consiga unificar su corredor entre Crimea y el este ucranio, una línea por la costa de todo el mar de Azov que permitiría a Moscú tener acceso terrestre a la península.
Para el presidente ucranio, Volodímir Zelenski, la caída de Mariúpol y la muerte de los hombres atrincherados en Azovstal supondría el fin de las negociaciones de paz con Rusia. Según ha explicado Zelenski en el medio Ukrainska Pravda, los soldados ucranios están rodeados. “Los heridos están bloqueados. Hay una crisis humana (…) sin embargo, los muchachos se están defendiendo”, dijo.
El ministro de Exteriores ucranio, Dmitro Kuleba, coincide con su presidente y también considera que lo que suceda a partir de ahora en Mariúpol “puede ser una línea roja” que entierre las negociaciones de paz.
Fue el propio Kuleba quien afirmó que Mariúpol “ya no existe”, tras los enormes daños materiales causados por los ataques rusos. “La ciudad ya no existe. Lo que queda del Ejército ucranio y un gran grupo de civiles están básicamente rodeados por las fuerzas rusas. Continúan su lucha, pero parece, por la forma en la que se comportan los ejércitos rusos en Mariupol, que han decidido arrasar la ciudad hasta los cimientos a cualquier precio”, manifestó el ministro.
Rusia dio el domingo a Ucrania un ultimátum para que la resistencia que lucha en Mariupol depusiera las armas. De no hacerlo, serían “eliminados”. Sin embargo, los soldados ucranios ignoraron el plazo y avisaron de que aguantarían hasta el final. “La ciudad aún no ha caído”, dijo el domingo Denis Shmihal, primer ministro de Ucrania, a ABC News. “Todavía están nuestras fuerzas militares. Lucharán hasta el final, y por ahora, todavía están en Mariúpol”.
A finales de marzo, después de más de tres semanas de asedio, Zelenski comunicó que el 90% de la ciudad había sido destruida. Bajo constantes bombardeos, Mariupol lleva desde principios de marzo sin luz, sin agua, sin comunicaciones, sin gas y sin comida. Ninguno de los servicios han sido restablecidos a día de hoy y ningún convoy con alimentos y medicinas ha logrado llegar a la ciudad porque todos han sido bloqueados por las fuerzas rusas.
Según Liudmila Denisova, la defensora del pueblo de Ucrania, los rusos estaban dando a los residentes una hogaza de pan y una botella de agua como única ayuda y a partir del lunes comenzaron a exigirles permisos especiales para salir de la ciudad.
Tras 55 días de guerra, la toma de Mariúpol supondría para Rusia su primera victoria militar relevante. En 2014 ya hubo un intento de tomar la ciudad, pero el Ejército ucranio consiguió repeler el ataque de los prorrusos, que no consiguieron ampliar el territorio de la autodenominada República Popular de Donetsk. Sin embargo ahora, con la ciudad reducida a cenizas y escombros, su caída en manos rusas parece inevitable y Rusia se está dando prisa para llegar con al menos una conquista importante al 9 de mayo, la fecha en la que cada año se celebra el Desfile de la Victoria en la Plaza Roja de Moscú en conmemoración del triunfo soviético sobre los nazis en la II Guerra Mundial.
Al mismo tiempo, la caída de Mariupol, ciudad en la que están las tres principales fábricas siderúrgicas del este de Ucrania (Ilichovskaya, Azovstal y Azovmash), supondría una pérdida económica considerable para Ucrania. La localidad, con su industria y su puerto, supone el 5% del PIB total del país.
Rusia intensifica la ofensiva para tomar la región de Donbás
Rusia ha intensificado el ataque con misiles a las posiciones ucranianas del frente oriental y sur. Járkov, en el noreste del país, Mikolaiv, al sur, en la costa del mar Negro, y los pocos municipios todavía no ocupados por Rusia en la región de Donbás están sufriendo un incremento en los niveles de destrucción. Este martes, el presidente ha confirmado en un vídeo colgado en su canal de Telegram que la intensidad de los ataques en Járkov, las regiones de Donbás y en Dnipropetrovsk “ha aumentado significativamente”.
El recrudecimiento de las operaciones con misiles balísticos y lanzaderas de cohetes Grad está provocando decenas de muertos civiles en las regiones orientales y en el sur de Ucrania. Las autoridades locales de Kreminna, de 18,000 habitantes, a 100 kilómetros al sur de Kiev, han confirmado que las tropas rusas se han hecho con el control de esta localidad.
La noche del lunes fue particularmente violenta en dos enclaves donde se espera que Rusia ponga toda la carne en el asador para ocuparlos: en la provincia de Mikolaiv, a las puertas de Odesa, y en Donbás, donde ya ocupa la mayor parte de la región.
La prioridad de la potencia invasora es tomar el pleno control de esta zona para finalizar con la operación bélica que inició en 2014 dando apoyo a los separatistas prorrusos de las provincias de Donetsk y Lugansk. El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, ha informado este martes de que la nueva fase de la invasión ha comenzado para lograr la “liberación completa” de Donbás.
El principal negociador de la parte ucrania, Mijaíl Podoliak, ha asegurado que el continuo asedio de Mariupol y el repetido fracaso de los corredores “han complicado aún más” el avance de las negociaciones con Rusia, que se encuentran suspendidas en estos momentos. El Estado Mayor ucranio ha precisado también que la ofensiva terrestre todavía no ha comenzado y que los bombardeos que están sufriendo en su territorio son de carácter “táctico”.
El Estado Mayor ucranio ha indicado en su parte diario que todavía está en marcha el traslado de unidades terrestres rusas hacia las fronteras orientales, las de las provincias de Járkov, Donetsk y Lugansk. Las Fuerzas Armadas ucranias especificaron que su enemigo está transfiriendo divisiones adicionales de baterías antiaéreas de corto y largo alcance hacia las posiciones que mantienen el asedio sobre Járkov, la segunda ciudad de Ucrania. Zelenski comentó en su mensaje a la población del lunes por la noche que “en el este y sur del país, el enemigo está actuando de una manera un poco más planificada” para evitar pérdidas entre sus tropas y blindados.
Rusia abre corredor humanitario en Mariúpol
Mientras tanto, el ejército ruso afirmó haber abierto este martes un corredor humanitario para evacuar a los soldados ucranianos presentes en la zona industrial de Azovstal, en el puerto estratégico de Mariúpol, horas después de haber exigido su rendición.
Las fuerzas rusas han abierto un corredor para permitir la salida de militares del ejército ucraniano y de los combatientes de formaciones nacionalistas que hayan depuesto las armas voluntariamente”, informó el Ministerio de Defensa, precisando que el dispositivo empezó a las 14H00 (11H00 GMT).
Con este fin, las fuerzas rusas y las tropas de la autoproclamada república prorrusa de Donetsk, en el este de Ucrania, “suspendieron cualquier actividad militar” alrededor de esta zona industrial, dijo en un comunicado Mijail Mizintsev, responsable del centro de control de la defensa nacional rusa. El ministerio ruso aseguró que esta decisión se tomó teniendo en cuenta la “catastrófica situación” en la zona y por razones “puramente humanitarias”.
Autobuses y ambulancias para transportar y tratar a las personas fueron enviados en convoyes hacia la zona. Anteriormente, las autoridades rusas instaron a las ucranianas a “mostrar sentido común y dar la orden a los combatientes de poner fin a su insensata resistencia” en Mariúpol.
Ucrania y Rusia llevan a cabo un nuevo intercambio de prisioneros
Según informó la vice primera ministra ucraniana, Irina Vereshchuk, Ucrania y Rusia llevaron a cabo este martes un nuevo intercambio de prisioneros, el quinto desde que comenzó la invasión el 24 de febrero. A través de Telegram, detalló que, en total, han regresado a Ucrania 76 personas. Se trata de 60 militares, diez oficiales incluidos, y 16 civiles.
El último intercambio de prisioneros tuvo lugar hace cinco días, cuando 22 militares y ocho civiles regresaron a suelo ucraniano. Se produjo por orden del presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, que hace unos días también propuso a las autoridades rusas intercambiar al líder del partido ucraniano prorruso Plataforma Opositora por la Vida, Viktor Medvedchuk, por niños prisioneros de guerra en cautiverio ruso.