Ex gobernadores en conflicto
¬ Augusto Corro lunes 21, Mar 2022Punto por punto
Augusto Corro
En México continúan los escándalos de los ex gobernadores acusados de corruptos. De las camadas sexenales de mandatarios estatales, sólo unos cuantos son llevados ante la justicia para que respondan de los delitos que son acusados, como el saqueo al erario, el enriquecimiento ilícito, etcétera.
En esta ocasión se trata del ex gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco”, quien está en la cárcel por presuntamente utilizar recursos públicos durante su campaña presidencial.
El controvertido político neoleonés participó en la contienda electoral presidencial del 2018. Entre los candidatos figuraron Andrés Manuel López Obrador (Morena); José Meade (PRI), Ricardo Anaya (PAN) y Jaime Rodríguez Calderón (Partido Independiente).
El martes pasado, “El Bronco” fue detenido por presuntos delitos electorales, que involucraron la utilización de recursos electorales para recolectar las firmas necesarias con el fin de respaldar su candidatura presidencial. La denuncia fue presentada por el actual gobernador de Nuevo León, Samuel García, del partido Movimiento Ciudadano (MC).
Así, el ex gobernador Rodríguez Calderón espera en prisión lo que determine el juez. “El Bronco” se distinguió por su singularidad política al romper con los modos tradicionales de hacer política en Nuevo León. Se alejó de los partidos políticos y triunfó.
Envalentonado, pensó que la suerte lo protegería en las elecciones presidenciales, pero le fue mal. Quedó en último lugar. En su participación, “El Bronco” soltaba frases que llamaban la atención, como aquella de que “hay que mochar la mano al robe en el servicio público”.
La gente pensó que el mandatario neoleonés podría cumplir su palabra, porque cuando asumió el poder como gobernador, entre sus principales acciones fue la de encarcelar a su antecesor en el gobierno estatal, el priista, Rodrigo Medina de la Cruz, por, presuntamente, entregar estímulos fiscales fuera de la ley a la armadora Kia Motors.
Otro de los ex gobernadores que enfrentan a la justicia es César Duarte, de Chihuahua, quien se encuentra en una prisión en Estados Unidos, en espera de que se defina su extradición. Sin embargo, el caso se pasmó y el asunto podría archivarse. También se le acusó de desviar recursos públicos para campañas electorales, en la llamada “Operación Zafiro”.
César Duarte fue criticado por su enriquecimiento ilícito. Llegó a la política cuando era vendedor de coches seminuevos y terminó su mandato como socio de un banco, con una colección de ranchos.
Las autoridades federales acusaron al ex gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval, priista, por los delitos de lavado de dinero con los que presuntamente adquirió bienes raíces por más de 222 millones de pesos. La Fiscalía General de la República pidió una condena de quince años de cárcel para Sandoval.
En prisión también está el ex mandatario de Veracruz, Javier Duarte, quien involucró a su esposa en delitos del fuero federal. Karine Macías fue detenida por el gobierno del Reino Unido y dio luz verde para su extradición. Por cierto, colectivos que buscan a personas desaparecidas, presionan para evitar que el ex gobernador sea liberado, pues lleva en la cárcel más de la mitad de su condena de nueve años.
Entre los estados con ex mandatarios conflictivos está el de Tamaulipas. Tenemos, por ejemplo, a Tomás Yarrington, priista, quien se declaró culpable por el delito de lavado de dinero y aceptar sobornos por más de tres millones de dólares. El ex gobernador fue detenido en Italia y enviado a Estados Unidos que lo buscaba.
Otro caso es el de Guillermo Padrés, panista, gobernador de Sonora, pues la Fiscalía General de la República abrió procesos penales en su contra por delincuencia organizada y lavado de dinero y por defraudación fiscal.
Unos ex gobernadores están en la cárcel, otros enfrentan denuncias penales, pero andan libres. La lista de esos funcionarios corruptos es larga. A unos, las autoridades ya les pisan los talones.
¿Usted qué opina amable lector?