Un enemigo
Alberto Vieyra G. miércoles 16, Mar 2022De pe a pa
Alberto Vieyra G.
El Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, tiene un enemigo muy peligroso y se llama AMLO.
El inquilino de Palacio Nacional es necio. No se deja ayudar y en su pleito con los diputados del Parlamento Europeo a los que llamó “planfeteros”, “injerencistas” y “borregos” ha quedado en claro que el canciller Marcelo Ebrard, pareciera estar pintado en mochila de indio; este lunes AMLO revelaría que el mamotreto que la Presidencia difundió como comunicado en respuesta a los parlamentarios del viejo mundo, fue consultado en todas sus partes con el canciller Ebrard, quien estuvo totalmente de acuerdo en la forma tan rupestre y arcaica con que AMLO y sus achichincles lo escribieron sobre las rodillas, “pues no se trata de un asunto diplomático, sino político”, aclararía AMLO.
Pero aún hay más. El desaguisado con los parlamentarios de Europa ha sido aprovechado espléndidamente por AMLO para sacarle al bulto a problemas torales como las encarnizadas masacres que están ocurriendo en México, el desastre económico y educativo con la cancelación de 24 mil escuelas de tiempo completo, el alza en las gasolinas que le está quemando las manos, la desenfrenada inflación que ha desatado el encarecimiento de la vida en México en prejuicio de los que menos ganan, asuntos que le pegan directamente a la popularidad y también al populismo demagógico del presidente.
Por ello, este lunes volvería a acusar a los parlamentarios de “politiqueros”, “injerencistas”, “irresponsables”, “entrometidos” y de “tener una mentalidad metichona y colonialista” y sólo por exigir el respeto a los derechos humanos en México, que se consagran en Tratados Internacionales que México ha suscrito y que ninguno de los firmantes puede pretextar “soberanía” o “autodeterminación” como coartada para negarse a opinar o manifestar lo que quiera sobre violaciones a los universales derechos humanos.
Pero qué chistoso, al término “borregos”, usado por AMLO contra los parlamentarios europeos, les quedó como anillo al dedo a los arrastrados morenistas que se sumaron de manera abyecta y vergonzosa a la bajeza presidencial.
“¡Borregos!”, diría el dizque jerarca nacional morenista Mario Delgado, el mismo que en 2024 aplaudió el resolutivo del mismo Parlamento Europeo que condenaba la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa. ¿Puede haber congruencia en un politicastro lambebotas como Mario Delgado o como los diputados, senadores y gobernadores morenistas que se sumaron al atajo de “borregos” del Presidente, arremetiendo contra sus similares europeos?
Al grupo político que está en el poder le quita el sueño, sobre todo a AMLO la catástrofe económica mundial que podría provocar peligrosos estallidos sociales en el mundo y consecuentemente en México, a razón de la guerra entre Rusia y Ucrania. Si las 27 naciones europeas, de las que son originarios los parlamentarios europeos que fustigaron a AMLO por su odio contra la prensa y defensores de los derechos humanos dejan de comprarle petróleo a Rusia, como parte de las sanciones económicas impuestas por Occidente, seguramente que los precios del petróleo alcanzaran los 200 dólares por barril en el plano internacional y para mantener los actuales precios de los energéticos en México, el régimen amlista tendrá que aplicar multimillonarios subsidios para evitar estallidos sociales del “México bronco” porque de otro modo, pasará a la historia como un mentiroso que prometió que no habría “gasolinazos” en México durante su sexenio, durante el cual será imposible recomponer la imagen de México ante el mundo y sólo porque el peor enemigo de AMLO es él mismo.