AMLO denuncia campaña de desprestigio contra Tren Maya
José Luis Montañez Aguilar, Nacional* martes 8, Mar 2022Derecho de réplica
José Luis Montañez
- Pseudoambientalistas se oponen a su construcción, acusa
En medio de una larga lista de quejas y denuncias por parte de asociaciones civiles y ambientalistas, las obras del Tren Maya siguen su curso, sus obras no se detienen para ser inaugurado en diciembre del próximo año; incluso, el pasado fin de semana, el presidente Andrés Manuel López Obrador realizó un nuevo recorrido de supervisión, en el que reiteró que el proyecto será terminado en tiempo y forma.
Asimismo, una vez que terminó su recorrido vía aérea por Yucatán y Quintana Roo, se dio a la tarea de defender la construcción de la megaobra insignia de su mandato, pues acusó que sus adversarios han creado una campaña en contra del proyecto. “Nuestros adversarios, con el apoyo de “pseudoambientalistas” y sus voceros han montado una campaña en contra del Tren Maya.
El mandatario federal sostuvo que en los 1,500 kilómetros que recorrerá el ferrocarril entre Tabasco, Campeche, Yucatán, Quintana Roo y Chiapas, sólo habrá impacto en 100 hectáreas, mismas que ya son repuestas con la reforestación de 200 mil hectáreas.
El Presidente acusó que intereses creados en el sureste mexicano buscan detener el avance de obra debido a que tienen terrenos y buscan sacar algún tipo de beneficio contrario a la prioridad general.
“Empezaron hace como dos semanas a mostrar imágenes donde se están abriendo brechas del tren de Cancún a Tulum, porque ni siquiera se está trabajando en todos lados porque se cambió el trazo. Nosotros estamos cuidando el medio ambiente, esto lo están utilizando porque hay una empresa que le autorizaron extraer material y nosotros les propusimos cambiar de giro.
Se trata de la firma Vulcan Materials Company y su filial en México Sac-Tun, a quien el pasado 3 de febrero, el jefe del Ejecutivo federal acusó que extraer sin permiso de materiales pétreos de la selva en Playa del Carmen e indicó que buscaría cambiar su giro a fin de que desarrollara un complejo turístico.
“Hay mucha gente también que no quiere el Tren Maya porque además tienen terrenos, quieren sacar raja y eso ya se terminó, ya no van a hacer jugosos negocios al amparo del poder”, sostuvo López Obrador.
Asimismo, López Obrador aclaró que además del programa de reforestación, en la zona se crearán tres grandes parques naturales con una dimensión total de 18 mil hectáreas, mientras que en las orillas de las vías del Tren Maya se sembrarán árboles florales, entre ellos, especies como el guayacán, maculí y flamboyán.
Hay que recordar que el Tren Maya conectará a los estados de Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, donde se promete una creación muy importante de empleos para estimular la economía de la región sureste del país, donde el Presidente se ha comprometido a estimular su desarrollo en todos los sentidos.
Varias ONG se oponen rotundamente
No olvidemos que en repetidas ocasiones, varias Organizaciones No Gubernamentales (ONG) denunciaron que el nuevo tramo de la megaobra no sólo tendrá impactos en la tala de ejemplares selváticos, sino también en ríos subterráneos, cuevas y cenotes, por lo que hicieron un llamado a frenar las obras, incluso, solicitaron la participación ciudadana para sumarse firmando una petición en internet
Integrantes del Comité Regional de Espeleobuceo, de la Asociación de Prestadores de Servicios Acuáticos de la Riviera Maya y múltiples organizaciones civiles de Quintana Roo, denunciaron que “el nuevo tramo generará múltiples impactos ambientales, solicitamos a las autoridades que realicen los estudios y cumplan con los requisitos para no dañar al medio ambiente”, no obstante, hasta ahora la respuesta del Presidente es que no hay tales afectaciones y por el contrario, calificó como “pseudoambientalistas” a los quejosos.
Cabe mencionar que algunas denuncias de los ambientalistas están disponibles en paginas de internet como , donde con el hashtag NoAlTrenMaya invitan a la población a sumarse a su petición de frenar las obras del que califican como un proyecto desordenado y devastador.
De igual manera, López Obrador fue a Quintana Roo para supervisar los avances de la construcción del Tren Maya luego de las modificaciones que se realizaron y porque algunos grupos de activistas denunciaron que se habían talado alrededor de 20 mil árboles del camellón de la carretera Cancún-Tulum. “De Tulum a Cancún, todavía estamos viendo lo de los trazos porque no queremos imponer nada, como decía Benito Juárez nada por la fuerza todo por la razón y el derecho y tenemos que convencer”, manifestó.
De acuerdo con información del Fondo Nacional de Turismo (Fonatur), el Tren Maya controlará el impacto de las obras de infraestructura, incluso, “algunos de sus principales objetivos son restaurar la conectividad biológica de áreas naturales para cuidar a los animales y la vegetación; favorecer la conservación de los ecosistemas y los servicios ambientales y generar una economía basada en el aprovechamiento responsable de recursos naturales”, según han argumentado.
Asimismo, el proyecto destaca que cerca de mil 500 kilómetros del tren conectarán a las principales regiones de la península de Yucatán, situación que generará oportunidades de comercio y desarrollo social en beneficio de la población.
Solicita AMLO reducir peaje en autopista Mérida-Cancún
Durante su conferencia mañanera, López Obrador confirmó que ha emitido una petición a la empresa de Ingenieros Civiles y Asociados (ICA) para reducir los costos de la carretera Cancún-Mérida.
Aseguró que durante su viaje de supervisión de los avances del Tren Maya en Tabasco, Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, se tomó un tiempo para preguntar sobre la posibilidad que los costos en las casetas de peaje de la mencionada carretera puedan disminuir para beneficio de la población en esta etapa de recuperación económica. “Aseguraron que se van a comprometer a abrir los cuatro carriles”, aseveró.
Explicó que habló sobre esta situación con Guadalupe Phillips, Directora General de ICA México, quien presuntamente, le aseguró “que la empresa no está aumentado las cuotas “. No obstante, López Obrador mencionó que no se les va a permitir modificar los costos del peaje en caso de que así quieran hacerlo.
Recordemos que el pasado 1 de marzo, López Obrador, fue cuestionado sobre el aumento de las cuotas en las casetas de Quintana Roo, y es que, a razón de las obras del tren maya, muchos habitantes optan por evadir el tramo de la carretera libre, a lo que el mandatario respondió “el aumento en peaje no está autorizado”.
Reiteró que durante su viaje de supervisión de las megaobras, para hablar con las concesionarias de las carreteras del país y analizar el alza en las tarifas de peaje, se les aclaró que esa posibilidad se abrirá hasta una vez que concluya la pandemia por Covid-19, no obstante, hasta ahora no ha sido autorizado ningún aumento.
“Hay algo que tienen que saber todos, que no hemos autorizado aumentos en el pago de peaje, o sea que ya habían dado la orden, porque lo solicitaban los concesionarios y dijimos que hasta que pase la pandemia vamos a ver lo de los aumentos en pagos de carreteras”, aclaró López Obrador.
En este contexto, los habitantes de Cancún han denunciado que las casetas cobran hasta 363 pesos, lo que consideran un precio exagerado. Y de acuerdo con publicaciones de algunos medios de comunicación locales, la primera estación de cobro “Tintal”, en dirección a Cancún-Mérida, hasta diciembre del 2021 tenia un costo del peaje de 338 pesos, pero ahora llega hasta los 363.00, lo que representa un incremento de 25 pesos, en apenas unos meses.
Por su parte, la segunda estación de cobro “Chichen-Itza”, en Valladolid, en diciembre del año pasado cobraba 196 pesos de peaje y actualmente, se presume que el costo ronda en los 210 pesos, lo que significa un aumento de 14 pesos.
De igual manera, las redes sociales han servido para difundir quejas en este sentido, pues usuarios aseguran que en la Mérida a Cancún, el costo de acceso a la autopista estaba en unos 553 pesos hasta finales del 2021, sin embargo, ahora los precios rondan los 610 pesos, un aumento de 57 pesos para el año en curso.
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