Bonilla, premiado que no dio premio
Eleazar Flores viernes 17, Dic 2021Espacio Electoral
Eleazar Flores
CHEQUE SIN FONDOS-. Jaime Bonilla Valdez, ex gobernador de Baja California, el de doble nacionalidad y discutida renuncia a la yanqui, el que “premió” con cheque de hule a una medallista olímpica, será premiado con una subsecretaría de Gobernación, al reunir el requisito indispensable de 90% de lealtad y de eficiencia, lo que resta.
El anuncio lo hizo el propio padre de la Cuarta Transformación desde su púlpito mañanero y de ir las cosas como van, Bonilla ocupará la misma subsecretaría que en 2020 dejó Ricardo Peralta, luego de hablar de más con productores norteños y sobre todo, con retórica anti-morenista.
En ese entonces se dijo que la cancelación de la subsecretaría era por razones de austeridad, que por lo visto ya no la hay desde el momento en que un año después se habilita a Bonilla Valdez como su sucesor.
CHEQUE DE HULE-. Al obtener medalla de bronce en halterofilia en los juegos olímpicos de Tokio 2020, Aremi Fuentes llegó a su estado de Baja California, donde el gobernador Bonilla Valdez ya la esperaba para entregarle un chequesote -literal- por 50 mil pesos, pero sólo fue para la foto.
Aremi Fuentes, admiradora de la mexiquense Soraya Jiménez medallista de oro también en halterofilia en Sidney 2000, acudió a un banco de su natal Baja California sin poder cambiarlo, pues le informaron que “no hay fondos”.
El gobernador Jaime Bonilla Valdez aceptó la inexistencia de fondos y sobrado de sinceridad aceptó que se le dio el cheque a la medallista “sólo para la foto” pero que buscarían la forma de que la deportista lo pudiera cobrar. Lo cobró, pero ya por acciones de la nueva gobernadora.
En efecto, una de las primeras acciones de la gobernadora María del Pilar Ávila Olmeda fue saldar la deuda con la ganadora olímpica Aremi Fuentes. Como se trata de un gobierno del mismo partido del que terminó, no se hizo tanto ruido, pues de lo contrario, se hablaría de un cochinero, por lo menos.
Jaime Bonilla Valdez es un empresario tijuanense que hasta cuando salió electo gobernador dicen que renunció a su nacionalidad norteamericana, no obstante que ya antes había sido candidato a diputado federal y senador. Se supone que entonces tenía doble nacionalidad.
Pero seguramente la mayor afinidad entre Bonilla Valdez y el padre de la Cuarta Transformación sea su afición al beisbol, pues el norteño practicó, fue dueño y hasta campeón en la Liga del Pacífico con el equipo Potros de Tijuana.
Con esa afición, AMLO hasta olvidó que su amigo es dueño de radiodifusoras y medios, sector un poco mal visto por ya saben quién.