El festín populista
¬ Vladimir Galeana Solórzano viernes 3, Dic 2021A tiempo..!
Vladimir Galeana Solórzano*
Si alguna especialidad tiene el Presidente de la República es la comunicación. Es un hombre que no deja que se le escape la oportunidad de mantener contacto con sus seguidores. Lo hace como ejercicio diario con sus conferencias mañaneras, porque lo reseñan las estaciones de radio, los canales de televisión, la prensa escrita y hablada, los portales especializados en el fenómeno político y las redes sociales, que siempre ha mostrado y demostrado conocer profundamente.
En lo personal, tengo la percepción de que hasta ahora se ha distinguido por ser el más avezado en la comunicación de masas, porque mientras otros populistas del continente utilizan a los medios masivos de comunicación por la fuerza del Estado, en México los medios lo reseñan incluso en vivo, porque la audiencia es amplia, diversa, pero sobre todo, interesada en los mensajes que todos los días le hace a esa franja que recibe beneficios económicos de su gobierno, aunque habrá que señalar que es dinero de los mexicanos.
El problema de Andrés Manuel López Obrador, y que preocupa a la mayor parte de los mexicanos, es el utilizamiento de un discurso divisionista, encaminado a reforzar las simpatías de esos hombres y mujeres que reciben beneficios de los caudales públicos que debieran ser utilizados en el desarrollo de fuentes de empleo permanentes, buscando con ello la compra de simpatías a un gobierno extraviado que ha pauperizado a millones de mexicanos que por desgracia no encuentran trabajo por la baja en las inversiones públicas y privadas.
Para decirlo más claro, algunos empresarios no están invirtiendo porque no existe la seguridad y la estabilidad para instrumentar proyectos de alta envergadura, y tampoco están llegando inversiones extranjeras porque han visto lo que ha ocurrido en las dictaduras populistas del Continente. México no es el otrora destino de las grandes inversiones, por el contrario, la disminución de las fuentes de trabajo es consecuencia de un gobierno que tiene por estrategia las ocurrencias de un mandatario carente de visión, porque lo único que le interesa es seguir incrementando su popularidad.
López Obrador inicia su tercer año de gobierno con la confianza de la recuperación económica del país, pero habrá que señalar que un gobierno que no invierte provoca que tampoco la iniciativa privada lo haga y esa circunstancia pudiera agravarse en los siguientes meses, porque con la cercanía del término del ejercicio gubernamental del tabasqueño, los dueños del dinero preferirán esperar a conocer quién o quienes contenderán en la siguiente elección para determinar si arriesgan su capital o lo llevan a otras latitudes.
Lo previsible es que el Presidente de la República siga haciendo lo suyo para mantener esa amplia base de adeptos, con la mira puesta si en el corto plazo podrían presentarse las condiciones de realizar una reforma constitucional para impulsar una posible enmienda constitucional para permitir la reelección. Todo es posible en la mente de un hombre que toda su vida ha mostrado y demostrado su vocación por el poder. Al tiempo.
* Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50 años de experiencia en diversos medios de comunicación.