Padrinos
Alberto Vieyra G. miércoles 1, Dic 2021De pe a pa
Alberto Vieyra G.
“Me dejo de llamar Andrés Manuel, si no se distribuyen medicinas con el nuevo sistema”. ¡Órale!
¿No le parece a usted que es hora de buscar padrinos para bautizar o rebautizar al falso mesías tropical?
Este átomo de la comunicación y más de dos de mis 3 lectores y radioescuchas apostamos doble contra sencillo a que estamos ante una nueva expresión política de jarabe de pico del Ppresidente y tendremos que proveernos de una buena cantidad de morralla para que el rebautizo de AMLO vaya acompañado con una buena dosis de bolo, como suelen hacerlo los buenos padrinos.
¿Qué nombre le pondría a AMLO? ¿Un nombre pueblerino y con mucho coco como don Modesto, don Cuilmas, don Pinpilurando, don Caralampio, don Toribio, Pascasio, Torcuato, Juan Garabato, etcétera, etcétera o bien nombres graciosos y de pura chunga de personas de carne y hueso como Aitor Tilla, Alba Sura, Alex Cremento, Andrés Trozado, Armando Bronca Segura, Elton Tito, Helen Chufe, Juanjo Sefina, Rubén D. Moniado y tal y tal? ¿O le pondría usted algún nombre de prosapia mundial como Gael: de origen latino, que significa “hombre dotado de gran generosidad”. Gian: de origen italiano, que significa “Dios es misericordioso”. Joel: de origen hebreo, actualmente es un nombre cada vez más popular en España. Kilian: de origen irlandés, que hace referencia a un hombre guerrero?
La cuestión es que difícilmente AMLO cumplirá su nueva promesa electoral de distribuir medicamentos hasta los rincones más apartados de la República Mexicana, utilizando para ello al Ejército, la Armada, la Guardia Nacional y todo el aparato de la milicia en lo que se antoja una nueva faramalla escenográfica, como hoy ocurre desplazando miles de militares a los estados macabros, donde el crimen organizado ha sentado sus reales y pareciera que los soldados solamente llevan la consigna de “dar abrazos y no balazos”.
No, mire usted. La distribución de medicamentos es un asunto mucho más complejo. Antes de la llegada de AMLO a la Presidencia, la estructura que había era perfecta para la distribución y hasta los hospitales más modestos y pinchurrentos del Seguro Popular en la República Mexicana tenían cuando menos mejoralitos, pomadas para caídas y raspones, curitas, aceite de ricino y todo el esquema de vacunación completo. Pero se produjo el accidente político en México y AMLO, pretextando que había corrupción desmanteló esa estructura de distribución que permitía no sólo que las más de mil 200 fórmulas de medicamentos estuviesen en los estantes, como hoy están en las tienditas de la esquina los chetos, las chatas, los refrescos y todo género de chucherías chatarra.
Ahora, AMLO nos sale con que distraerá la atención de nuestros juanes, es decir la militarización del país para llevar medicamentos a todos los rincones del país. Eso está perfecto porque la verdad es que nuestros soldados han sido muy eficientes en el traslado de las vacunas, pero de eso a que distribuyan más de mil 200 fórmulas médicas, eso sencillamente parece estar en chino y en ruso. Ya son demasiadas ocupaciones de nuestras fuerzas armadas; AMLO las usa como macuarros en las obras emblemáticas de este sexenio, ya son empresarios, ya son guardabosques en Chapultepec, son guardianes de la seguridad presidencial y ahora serán distribuidores de medicamentos, pero ¿habrán olvidado su función primordial que les confiere la Constitución General de la República que es la de ser “garantes de la soberanía nacional”?
Lo cierto es que en México con AMLO vivimos un desastre de salud pública tan patético y macabro que se siente en la mortandad por la pandemia del coronavirus, los más de 2 mil niños que reclamaban medicamentos contra el cáncer y los que lo siguen reclamando, amén de millones de compatriotas que padecen enfermedades crónico degenerativas. Aquí entre nos: ¿usted con qué nombre bautizaría o rebautizaría a AMLO?