México, en el concierto internacional
¬ Luis Ángel García miércoles 17, Nov 2021Por la Derecha..!
Luis Ángel García
Después del papelazo que hizo México durante la instalación del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y a pesar de que el canciller se desvivió por magnificar la intervención del mandatario, nadie tomó en serio la propuesta de que las naciones ricas y los empresarios más poderosos destinen recursos multimillonarios para acabar con la pobreza en el mundo. Pero ahí vamos de nuevo a evidenciar la falta de una política internacionalista de este gobierno y ahora toca exhibirse en Washington.
Durante tres días, la delegación mexicana, encabezada por el Presidente y un puñado de secretarios de su administración, se enfrentarán con los tiburones de la Casa Blanca y del gobierno canadiense. Los temas: Economía, T-MEC, pandemia y migración, entre otros. Difícilmente sorprenderá México a sus pares con los programas como Sembrando Vida para acabar con la migración centroamericana y caribeña, convencerlos de que es mejor el carbón para generar electricidad y que respetamos las inversiones extranjeras en energías limpias, que se cumple con las condiciones laborales impuestas por el tratado de comercio trilateral.
La narrativa oficial hablará del éxito en las reuniones y que México marcó agenda y estableció sus condiciones, que los mandatarios estadounidense y canadiense escucharon atentos la postura nacionalista de nuestro país; pero en realidad, nada podrá aportar la delegación mexicana. Le exigirán que cierre más la frontera a los migrantes, que acepte a los ilegales que deporten los americanos, que endurezca su posición y aplique más restricciones a las caravanas que buscan cruzar el territorio rumbo a la Unión Americana.
En defensa de los inversionistas extranjeros, los otros dos gobiernos del T-MEC impondrán sus reglas para que se respete la generación de energías limpias, so pena de enfrentar juicios que impondrán sanciones e indemnizaciones millonarias difíciles de cubrir. Además de arrancarle al gobierno un mayor compromiso con el medio ambiente y el calentamiento global.
No quedarán exentas las observaciones que se hagan a las relaciones obrero-patronales en industrias como la automotriz y minera, donde siempre está como espada de Damocles la amenaza de cerrar empresas o retirar la inversión extranjera directa.
Llama la atención que no asiste el titular de la Secretaría de Salud, pero sí irá el controvertido subsecretario Hugo López-Gatell, quien a pesar de ya no tener una sobreexposición mediática, todavía no puede justificar su errónea estrategia para combatir la pandemia. La soberbia e ignorancia de las autoridades sanitarias provocó la muerte de casi medio millón de mexicanos, tardía fue la aplicación de la vacuna entre la población, se retrasó la implementación de una cultura de la prevención, se minimizó el uso del cubrebocas, no se respetó la sana distancia ni se concientizó en las medidas de higiene personal como el lavado constante de manos o el uso de gel. La ausencia de una política pública de salud llevó a los extremos ridículos de hacer creer que las estampitas religiosas protegían del virus y se acuñó la desafortunada y ridícula frase de que el Presidente no contagia ni se contagia por su fuerza moral.
Tampoco los gringos querrán seguir con la donación del antígeno, ni aceptarán el argumento de que la industria farmacéutica mundial no tiene llenadera y que como son neoliberales y conservadores roban a los enfermos.
Pide el Presidente que el gobierno americano no maltrate a los paisanos, pero no pone remedio a los excesos de los agentes de Migración y de la propia Guardia Nacional, la cual tiene más quejas de violación a los derechos humanos que cualquier otra institución castrense. No se puede soslayar la muerte de migrantes haitianos y cubanos.
No esperemos mucho de la reunión trilateral en Washington, ni creamos en el discurso de Relaciones Exteriores; poco sabremos de lo que se dijo en La Casa Blanca.