Mujeres gobernantes
Ramón Zurita Sahagún martes 16, Nov 2021De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
De acuerdo a la legislación vigente, todos los partidos contendientes en disputa por la renovación de las seis gubernaturas del año próximo, tendrán que adecuar sus nominaciones a tres hombres y tres mujeres, por la equidad de género.
Ya en los comicios del año pasado se operó para que los partidos no incumplieran con ese propósito contenido en las leyes y de esa manera se consiguió la postulación de mujeres y hombres por igual.
Existió alguna resistencia de parte de los partidos, pero finalmente todos cumplieron con las nominaciones de hombres y mujeres a la par.
Ahora la República puede jactarse de tener un grupo comprometido de mujeres gobernadoras en estados donde jamás había gobernado una fémina y en otros donde ya lo habían hecho.
Colima fue el primer estado gobernado por una mujer (Griselda Álvarez) y ahora lo está por segunda ocasión, después de que Indira Vizcaíno fuese votada en las urnas el pasado seis de junio.
Tlaxcala se convirtió en la segunda entidad gobernada por una mujer, Beatriz Paredes y ahora lo es por Lorena Cuéllar, que, al igual que Indira Vizcaíno, proceden de Morena.
En Baja California, los ciudadanos decidieron que Marina del Pilar Ávila se convirtiera en la primera mujer que gobernara el estado.
Chihuahua es otra entidad en la que una mujer superó en las urnas a sus adversarios varones y ahora Maru Campos, postulada por el PAN, se convirtió en la primera del género femenino en administrar la entidad.
Guerrero decidió que ya era tiempo que el sexo femenino gobernara el estado y Evelyn Salgado es la primera gobernadora.
Layda Sansores en su cuarto intento, recibió el apoyo de los electores y ahora es la primera mandataria en Campeche. Ella también es de Morena.
A ellas se les suma Claudia Sheinbaum, quien ya gobernaba la CDMX, desde el cinco de diciembre de 2018.
En total, en la actualidad 7 mujeres gobiernan igual número de entidades del país y 25 varones lo hacen en el resto del país. De ellas 6 son militantes de Morena y una postulada por Acción Nacional.
Y es que las mujeres siempre habían sido marginadas dentro de las nominaciones a los gobiernos de los estados y las que lo habían sido habían sufrido reveses en las urnas.
Además de ellas, Ivonne Ortega había llegado por la vía de las urnas al gobierno de Yucatán y Amalia García en Zacatecas. Otras más fueron enviadas como sustitutas o interinas en otras entidades como fueron los casos de Dulce María Sauri, Yucatán y Rosario Robles en el desaparecido Distrito Federal.
La mayor parte de las mujeres gobernantes lo han hecho mejor que sus colegas varones que las antecedieron o sustituyeron y el recuerdo de ellas es más agradable que el de los hombres.
Regularmente a las mujeres se les ven mayores cualidades que a los hombres en el ejercicio del poder y escasas damas gobernantes han sido cuestionadas durante sus administraciones o a su salida, aunque un par de ellas produjeron envidias y rencores por parte de algunos de los grupos de poder de sus entidades.
Las mujeres recibieron marginación y relegamiento en las distintas postulaciones, hasta que por ley se determinó que en posiciones de elección popular fueran a la par, tanto en los gobiernos estatales, como en los municipales y diputaciones locales.
El Congreso de la Unión fue la primera escala de la equidad de género, ya que diputados y senadores son postulados en el mismo número por los distintos partidos políticos en competencia y en el reparto de las plurinominales se equilibra la balanza, si es que las mujeres quedan en menor proporción.
En 2022, habrá un nuevo paquete de seis gubernaturas en juego y los partidos participantes deberán nominar a tres mujeres en igual número de entidades de las seis en que habrán de competir.