El PAN, en problemas
¬ Augusto Corro martes 16, Nov 2021Punto por punto
Augusto Corro
Representantes de la jerarquía del Partido Acción Nacional (PAN) se encuentran inconformes con Marko Cortés, recién reelecto presidente de esa organización política.
El líder panista no goza de las simpatías en sus dirigentes y militantes debido a los nulos resultados de su gestión al frente del blanquiazul.
Además, designó a los delegados de su partido a los estados donde habrá elecciones el próximo año, sin consultarlos.
Por supuesto, los panistas rechazaron el cargo y mostraron su repudio al liderazgo de Marko Cortés, que ya mostró su manera derrotista de pensar.
Dijo que de las seis gubernaturas en disputa el próximo año, solo Aguascalientes será para Acción Nacional. Como informamos, se votará por seis nuevos gobernadores en las siguientes entidades: Aguascalientes, Oaxaca, Hidalgo, Durango, Tamaulipas y Quintana Roo.
Los panistas molestos, por decir lo menos, con su líder son: Damián Zepeda, ex dirigente nacional blanquiazul; Francisco Domínguez, ex gobernador de Querétaro; Adriana Dávila, ex diputada; y ex senador Roberto Gil Zuarth.
¿Y la alianza?
La actitud de Marko Cortés refleja un divisionismo total en el interior del PAN. Las reacciones políticas en el exterior están por verse.
Como se sabe, varios partidos políticos se unieron para formar un frente común contra el gobierno del presidente López Obrador.
La alianza denominada “Va por México” (PAN-PRI-PRD) participó en las elecciones intermedias y lograron unas cuantas victorias.
También participan aliados en la Cámara de Diputados; pero sin lograr sus objetivos.
La oposición política en México está debilitada. Los otros institutos políticos se encuentran casi en las mismas condiciones que los panistas.
Y si Acción Nacional se presentaba como el partido base para la lucha contra la Cuarta Transformación (4T), ahora se ve debilitado, dividido.
Y la pregunta es la siguiente: ¿cuál será el camino del PRI y el PRD ante estas circunstancias políticas?
En el Revolucionario Institucional las luchas internas también son intensas y su futuro está lleno de incertidumbre.
El Partido de la Revolución Democrática (PRD) es el que se encuentra en peores condiciones. Tiene un liderazgo anacrónico, que es difícil de calificar de izquierda. Los perredistas en su alianza política tienen que aceptar las directrices del sector empresarial que mueve los hilos de “Va por México”, así como las ideologías (¿cuáles?) panista y priista.
Los dirigentes
Al partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) sólo tiene que agradecerles a los partidos de oposición el pésimo manejo de la lucha contra la 4T.
En la organización política guinda también las pugnas internas son constantes y lo único que salva a Morena es que se trata del partido en el poder.
En los próximos días, cuando se empiecen a revelar los nombres de los aspirantes a las candidaturas mencionadas, los conflictos se agudizarán.
En Acción Nacional los errores de su dirigencia no le permiten salir del pantano al que cayeron tras las elecciones presidenciales del 2018.
En las elecciones intermedias, los triunfos de “Va por México” fueron más relevantes en la Ciudad de México.
Lo importante es saber que promete Marko Cortés para sacar a su partido del hoyo en que está con el fin de que continúe como principal apoyo de la oposición política.
¿Qué determinarán los líderes del PAN, PRI Y PRD para enfrentar a Morena y a López Obrador en la Cámara de Diputados?
Está pendiente de aprobación la reforma eléctrica y la realización de la encuesta relacionada con la Revocación del Mandato. Con la oposición política debilitada Morena no tendrá problemas difíciles que atender.
En Acción Nacional tienen que ponerse las pilas y cambiar a su dirigente Marko Cortés. En el Revolucionario Institucional se espera una actitud firme y de rechazo total a la nueva Ley Eléctrica.
En el PRD, solamente sus dueños “Los Chuchos”, Jesús Zambrano y Jesús Ortega, decidirán para dónde jalar. ¿Izquierda, derecha o centro?
¿Usted qué opina amable lector?