Dinero y política
¬ Augusto Corro viernes 12, Nov 2021Punto por punto
Augusto Corro
Cada año, en la Cámara de Diputados se lleva a cabo una lucha compleja debido al Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).
Son miles de millones de pesos los que se destinan para mantener la democracia mexicana, una de las más caras del mundo.
El presupuesto para 2022 no iba a ser la excepción. Se destinaron millones de pesos para el funcionamiento del Instituto Nacional Electoral (INE), que a su vez repartirá una parte a los diferentes partidos políticos.
El próximo año, el citado instituto coordinará las elecciones en seis estados y se encargará además de la encuesta sobre la Revocación del Mandato.
Desde luego, esas actividades políticas tienen un costo que se incrementa con el subsidio a las organizaciones políticas.
Las instituciones políticas reciben el dinero para mantener la vida de sus partidos. Esta acción siempre fue criticada por aquellos que se inclinan porque sean los propios partidos los que se encarguen de conseguir los recursos económicos necesarios para su subsistencia.
Por otra parte, se anunció que el próximo año se analizará una reforma a las leyes electorales. Ojalá y se analice profundamente la idea de restringir los recursos económicos a esa élite de funcionarios que controlan actualmente al INE.
Además, que se busque cancelar esos subsidios generosos a los partidos políticos que solo estiran la mano para recibir cuantiosas cantidades de dinero.
Hoy se definirá la cantidad exacta de dinero que recibirá el INE, que no será cualquier cosa.
Cabe señalar que para 2021, el presupuesto para los partidos políticos fue de alrededor de 7 mil millones de pesos.
Elecciones en el sindicato petrolero
El próximo mes de enero se efectuarán elecciones en el sindicato petrolero que padece la influencia de Carlos Romero Deschamps, el tradicional cacique que sobrevivió al paso de diferentes gobiernos.
Los propios panistas prefirieron entenderse con el secretario general petrolero que elegir a un nuevo líder. En la presente administración de López Obrador, parece que hay resistencia, o por lo menos incertidumbre, por el futuro de esa organización sindical.
Con nuevas reglas los trabajadores petroleros podrán elegir sin presiones a sus dirigentes, algo que no ocurrió en décadas. El dueño de ese sindicato, por lo menos así lo presumía Romero Deschamps, se convirtió en un hombre muy rico.
El ex líder fue acusado de cometer delitos relacionados con la delincuencia organizada, desvío de recursos, huachicoleo, nepotismo y corrupción. Sus familiares presumen sus viajes por todo el mundo, así como coches de lujo.
Veremos, pues, en que termina la elección de la nueva dirigencia del sindicato petrolero que se efectuará de acuerdo a la reforma laboral de mayo de 2019, con el voto “personal, libre, directo y secreto”.
Además, se utilizará un método de votación electrónica, “una garantía para evitar abusos”.
El sindicato petrolero siempre estuvo controlado por caciques que se distinguieron por tener sometidos a los trabajadores. Será interesante conocer los resultados de esta nueva elección.
Principalmente para medir el poder de Romero Deschamps que es posible que cuente con incondicionales, cuyo mayor anhelo, es seguir como dueños del Sindicato Petrolero. ¿Llegó la democracia sindical?
¿Usted qué opina amable lector?
Desabasto de medicamentos
La insensibilidad política echa a perder grandes proyectos. ¿De qué sirve ilusionarse con grandes metas, si los problemas básicos no se resuelven?
La escasez de medicinas es un asunto que pesa sobre los gobiernos municipal, estatal y federal.
La atención a la salud pública nunca fue el fuerte de las administraciones priistas o panistas. Por supuesto que ese problema podría estar más grave, pero como se ve seguirá como amenaza sobre sobre la ciudadanía.
Claro que faltan medicamentos y hospitales. Con la invasión del nuevo coronavirus se evidenció el desabasto de medicinas y hospitales.
El gobierno actual, muy a su estilo, culpó de ese problema a los gobiernos corruptos que le precedieron en el cargo. Se trató de una excusa pueril, que a nadie convenció.
Quizá al inicio del sexenio era válida esa queja; pero ya son tres años, en los que se necesita una respuesta real, efectiva, enérgica, al desabasto de medicinas, como sucede con los medicamentos contra el cáncer que ataca a los niños.
La crisis del desabasto de medicamentos llegó hasta una reunión del gabinete del presidente López Obrador, quien emplazó a los titulares de Salud, Jorge Alcocer, y del Insabi, Juan Ferrer, a que sin excusa ni pretexto, garanticen el abasto de todos los medicamentos en todo el país.
“Ya no quiero escuchar de que faltan medicamentos y no quiero excusas de ningún tipo, no podemos dormir tranquilos si no hay medicamentos para atender enfermos”, reclamó López Obrador.