Con revocación o sin ella, AMLO seguirá gobernando
Jorge Luis Galicia Palacios lunes 8, Nov 2021Como veo, doy
Jorge Luis Galicia Palacios
- Innecesaria la consulta, además de dispendiosa
Para quienes una y otra vez han escuchado decir al Presidente que aunque la consulta de Revocación de Mandato no supere el 40 por ciento de participación necesaria para que sea vinculatoria, si el pueblo vota para que deje su mandato se va, ante esa postura la gente empieza a vislumbrar posibles escenarios y opiniones diversas a las que hemos puesto oído nos indican que Andrés Manuel seguirá siendo jefe del Ejecutivo.
Suenan increíbles y hasta surrealistas esas versiones, pero nada descabelladas. Todo mundo sabe que lo mejor que le sale y le sabe, al primer mandatario es estar en campaña, porque así estuvo durante 18 años y porque así ganó la Presidencia, hablando de los problemas del país, aunque nunca nos haya dicho con certeza cómo enfrentaría esos retos. Pero para efectos de los votos aplica el dicho de conocido refrán: “El prometer no empobrece”.
Ante hipótesis que de manera popular se empiezan a manejar por doquier, no se equivocan quienes creen que López Obrador se ha constituido en ferviente promotor de lo que establece el artículo 35 de la Carta Magna que habla sobre derechos civiles y políticos, el cual hace referencia a la consulta popular y a la figura de la Revocación de Mandato y en el que artículos transitorios de la ley secundaria respectiva especifican que, en caso de solicitarse el proceso revocatorio del mandato presidencial durante el periodo 2018-2024, la solicitud de firmas deberá realizarse antes del 15 de diciembre del año en curso.
Lo hace porque sabe lo popular que es a raíz de los programas sociales que se han implementado durante su gobierno y también sabe que los suyo, lo suyo, es andar en campaña, lo sabe, y por eso no le teme ir a un proceso de consulta en el que se ponga en juego su continuidad como primer mandatario del país, sabe que en cualquiera de los dos posibles resultados gana. Si el voto le es favorable, llegaría fuerte y firme a la madre de todas las elecciones de 2024 con un o una candidata a modo para seguir detrás de la silla presidencial.
Y en el hipotético caso de que llegara a perder la consulta de Revocación de Mandato, aunque no fuera con los 37 millones de sufragios que se requirieren para la revocación de su mandato, también gana. Porque, sin más argumento, dejaría el cargo para erigirse como jefe de campaña y desde esa posición hacer el llamado al respetable, nada más ni nada menos que ofreciendo la consolidación de lo que desde un inicio ha llamado “La Cuarta Transformación”
Bueno eso de dejar el cargo es un decir, porque la reforma constitucional de 2019, señala que, en caso de haberse revocado el mandado del Presidente de la República, quien suma provisionalmente la titularidad del poder Ejecutivo será quien en ese momento ocupe la presidencia del Congreso de la Unión, y en ese escenario el partido del presidente, o sea Morena, todo lo previó y uno de los suyos es quien ocupa ese cargo para el primer año de la LXV Legislatura, en otras palabras AMLO se constituiría en algo así como el poder tras el trono.
Viendo así el panorama, es hasta entendible la insistencia del Presidente de la República en tocar el tema de la revocación en las “mañaneras” y lo hace no obstante que el primer día del mes en curso el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación determinó que el jefe del Ejecutivo federal tiene prohibido hablar u opinar respecto a este proceso consultivo durante cualquier acto público, determinación que por lo visto tiene sin cuidado a López Obrador, pues una sanción a estas alturas sería tal vez una destitución o el retiro de sus derechos políticos, cosa que nada le impediría estar en la siguiente campaña electoral, tal como su movimiento ya experimentó en Iztapalapa con el llamado “Juanito” y más recientemente en Guerrero con “Juanita”, perdón con Evelyn Salgado. ¿Ven por qué se empieza a hablar del poder tras el trono?
LAS CARTAS HABLAN.- Nuestra Constitución señala que en caso de que mediante la consulta popular se aprobara la Revocación del Mandato sería, como ya lo comentamos, el presidente en turno del Congreso de la Unión quien asumiría de manera provisional el cargo de titular del Ejecutivo federal y en los siguientes 30 días, el poder Legislativo deberá nombrar a la cabeza del poder Ejecutivo, que habrá de concluir el sexenio de gobierno, que en este caso ha iniciado Andrés Manuel López Obrador.
Pero aquí entre nos, creo se debe suponer quien gobernaría de facto. Digo.
VA MI RESTO.- Ejercicios de democracia directa, como la consulta popular, sin duda con el tiempo se irán afinando en su aplicación y en sus alcances, pero por muy atractivas que nos las hayan presentado a la hora de legislar, tanto en 2014 cuando se crea la figura de la Consulta Popular y en 2019 con la Revocación del Mandato, según se observa el tema ha despertado poco interés entre la ciudadanía y en contrario se dice que una consulta representa todo un dispendio de recursos en tiempos postcovid, donde lo prioritario es la reactivación de nuestra economía y la creación de empleos.
Queda claro, la gente opina que no es el mejor momento para llevar a cabo este proceso consultivo y tampoco las condiciones políticas y sociales del país están como para experimentar u explorar sobre el impacto de la revocación, y hasta ahí porque como veo doy.