Fuga de cerebros
Luis Muñoz martes 14, Sep 2021Segunda vuelta
Luis Muñoz
Quienes se gradúan en universidades del país o del extranjero tienen dos opciones: quedarse en México y trabajar como choferes o dedicarse al comercio informal con pírricos salarios o buscar mejores oportunidades fuera del país, como Estados Unidos, Japón o Alemania, por ejemplo.
Ese fenómeno, al que se le presta poca atención, es de una importancia vital para el gobierno.
En 2015, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología daba a conocer el siguiente dato: Alrededor de 1.5 millones de mexicanos con títulos universitarios y de posgrado salieron en busca de mejores oportunidades entre 1990 y 2015, altísimo si se considera que prácticamente el 80% de la población, no cuenta con estudios superiores.
Jacques Rogozinski decía en diciembre del año pasado en El Financiero que uno de los activos más importantes de un país es su capital humano. Y ejemplificaba: Países como Israel y Japón crecieron principalmente gracias a eso, sobre todo porque los recursos naturales con los que cuentan son muy escasos.
En Israel, por citar un caso, lograron transformar, primero un desierto en tierras fértiles, y luego llegar a ser uno de los países que más tecnología genera per cápita.
Alemania también figura como punto de destino de muchos mexicanos que buscan el reconocimiento que en su país no se les da.
Rogozinski sostiene que México enfrenta un “déficit de empleo calificado”, pues cada año crece la cantidad de jóvenes que se gradúan de universidades destacadas y el país no genera suficientes empleos calificados, bien remunerados y satisfactorios para esta población.
Los graduados universitarios, de maestría y doctorado se encuentran con mayor frecuencia sobre calificados para las pocas vacantes que encuentran.
En 2009 el entonces subsecretario de Educación Superior, Rodolfo Tuirán, declaraba que el éxodo de talentos mexicanos le ha costado al país más de 100 mil millones de pesos. ¿A cuánto ascenderá ahora con el gobierno de la Cuarta Transformación?
Ante la falta de oportunidades aquí, en México, cada año salen unos 20 mil paisanos con alta escolaridad. Son los otros migrantes (como los indocumentados) que cruzan fronteras hacia las naciones más industrializadas para lograr sus metas.
El año antepasado, en marzo, el éxodo de talentos mexicanos -el cual asciende a 575 mil profesionistas- ha costado al país más de 100 mil millones de pesos, cantidad cuatro veces mayor al presupuesto de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), apuntaba el subsecretario Tuirán (La Jornada).
La cifra, observaba, representa 25% de los recursos que ejerce la Secretaría de Educación Pública (SEP) hoy día, afirmó.
La fuga de cerebros, fuga de talentos o migración altamente calificada es la emigración de profesionales y científicos con formación académica universitaria en su país de origen a otras naciones.
Ocurre, como ya hemos dicho, principalmente por la falta de oportunidades de desarrollo en sus áreas de investigación, por motivos económicos o por conflictos políticos en su país natal.
Generalmente, esta fuga de cerebros se produce sin regreso. Si bien el fenómeno se acentúa en países en desarrollo, esto no es excluyente, y en muchas ocasiones se da también en países industrialmente desarrollados, debido a diferencias salariales o impositivas.
La fuga de cerebros hace que el país de origen pierda la inversión en educación superior de esos profesionales y, de la misma forma, el capital social del que formaba parte el individuo se reduce por su partida. En pocas palabras, las personas que alcanzaron su meta quieren seguir triunfando, pero como su país no ofrece posibilidades de desarrollo profesional, emigran.
Quizá la clave de este fenómeno esté en la siguiente apreciación:
Una consecuencia importante de este fenómeno es que la inversión en educación en un país en desarrollo tal vez no conduzca a una aceleración del crecimiento económico si un gran número de personas con alto nivel de educación emigra a otro país.
Denuncias contra Pérez Góngora
En los días previos a la elección del nuevo presidente de Concanaco-Servytur, donde fue electo el ingeniero Héctor Tejada, la dirección general del organismo procedió a interponer denuncias penales en contra del entonces candidato Juan Carlos Pérez Góngora, levantadas ante la Fiscalía Territorial de Investigación en la alcaldía Cuauhtémoc, y en la Fiscalía General de la República, dándose inicio a las carpetas de investigación: CI-FICUH/ CUH-6/UI-2 S/D/01280/09-21 del 6 de septiembre 2021, CI-FICUH/CUH-6/UI-2 S/D/01291/09-21 y CI-FICUH/CUH-6/UI-2 S/D/01292/09-21 ambas del 8 de septiembre 2021.
Se le ordenó a Pérez Góngora no asista o se acerque al domicilio del organismo y se abstenga de realizar actos intimidatorios. Se le acusa de amenazas, uso de documentos falsos, tentativa de despojo y perjuicio patrimonial.