Eso ni se pregunta
Freddy Sánchez jueves 29, Jul 2021Precios y desprecios
Freddy Sánchez
Cuántos le dirían “no” a un picosito caldo ofrecido en medio de una tremenda “cruda”.
Casi seguro, nadie.
Y lo mismo se podría decir de la actitud que asumirán los que acudan a la consulta de este domingo uno de agosto.
La mayoría pues, si no es que todos los consultados, (sabedores a lo que van como los que se ponen una buena guarapeta nocturna), es de imaginarse a lo que irán: a votar por el “sí”.
Y es que si no todos, al menos un par de los ex presidentes, hace que “les hierva en buche de piedritas”. Todo aquello que mucha gente piensa que los “presuntos sinvergüenzas” hicieron y lo que se ha dicho hasta la saciedad durante el actual mandato presidencial, en relación con actos de corrupción del pasado, evidentemente, son motivos de sobra para que los interesados en la consulta se empeñen en exigir que los “pillos sexenales” encargados de la Presidencia en los anteriores sexenios, enfrenten a los fiscales de la ley y terminen con su “triste humanidad” en la cárcel.
Así que, bajo estos supuestos, resulta más que inverosímil creer que habrá alguien el día de la consulta abogando porque a los ex presidentes “no se les toque ni con el pétalo de una rosa”.
Cómo podrían entonces, los que tanto repudian a los “ex” presidentes, “sacarse del hígado” toda esa rabia acumulada tras muchos meses de escuchar “un día sí y otro también” que en los gobiernos previos al de Andrés Manuel arruinaron a México, propiciando los más deleznables actos de corrupción y de saqueo.
La suma de señalamientos contra los antecesores del AMLO (los que han surgido desde el Palacio Nacional y los que se han multiplicado en los partidarios de la Cuarta Transformación) podrías justificar condenas carcelarias de por vida para los sujetos a la sospecha popular de que fueron unos corruptos inmorales que no tienen perdón.
Y justamente, con eso en la mente es de suponer que irán a la consulta del domingo, quienes decidan estar ahí, absolutamente confiados en que ese paso es indispensable para que se concrete la persecución judicial de los ex presidentes.
Salinas, Zedillo, Fox, Calderón, Peña, (incluso Echeverría de avanzada vejez), parecen estar en “la mira” de quienes influenciados por lo que se dice de los antecesores del Andrés Manuel (incluso entre los que no habían nacido en este país no idea tienen de lo que fueron esos gobiernos), es evidente el clamor de que, tácitamente, “se les queme en leña verde”.
Así las cosas, la voluntad mayoritaria para proceder al juicio de los ex presidentes podría considerarse a estas horas como una “crónica anunciada”.
Sólo que hay un detalle: mientras que unos quieren ir a la consulta, otros la ven con suspicacia e incluso la reprueban. Estos últimos piensan que se trata de una farsa del gobierno para distraer a la opinión pública, cada que hay algo que se hace mal, haciendo que todos volteen al pasado para criticar a los ex presidentes.
En ese tenor, los que le dan un ínfimo valor a la consulta, apoyan su aserto diciendo que si en verdad se quisiera poner tras las rejas a los ex jefes del ejecutivo eso ya se habría hecho en lugar de estar “espantando con el petate del muerto”.
De ahí la duda acerca de qué cantidad de personas acudirán a la consulta del domingo, si serán o no los que como mínimo establece la ley para hacer vinculatorio su resultado o sea que sirva para dar paso a las indagatorias y en su caso los juicios a los ex presidentes.
En torno a lo que, el presidente ha expresado que no es partidario de que se los juzgue, pero si la gente lo pide, lo hará. La cuestión es si será realmente necesario saber si la gente así lo quiere o de plano: eso ni se pregunta.