Tercera ola de Covid golpea fuerte a Cancún; se cuadruplica la ocupación en los hospitales

José Luis Montañez Aguilar, Nacional* lunes 26, Jul 2021

Derecho de réplica

José Luis Montañez

 

• La variante Delta es la que predomina en las últimas semanas

 

 

Si bien, se presume que Cancún es uno de los destinos turísticos más seguros para viajar en medio de la contingencia sanitaria, las cifras de contagios diarias apuntan a lo contrario, pues desde hace más de tres meses no han dejado de crecer los números en cuanto a enfermos y fallecimientos, y si bien, al principio la ocupación hospitalaria no se había visto tan afectada, durante el último mes los pacientes internados se cuadruplicaron, lo cual es alarmante.

Así, la tercera ola de coronavirus donde la variante Delta prepondera, está azotando a dos de los destinos turísticos más populares de México aunque están ubicados en costas completamente opuestas, hablamos de Los Cabos, en el Pacífico, y Cancún, en el Caribe.

En Cancún, los casos se han disparado hasta el punto en que el hotel Hard Rock ha reservado dos pisos para huéspedes con síntomas, mientras que otros hoteles también ofrecen descuentos para quienes están en cuarentena durante su estancia en este polo turístico, al menos hasta que dejen de ser contagiosos.

México no ha restringido los viajes durante la pandemia, por lo que turistas, tanto nacionales como extranjeros, han acudido en masa a las zonas turísticas. En junio, Cancún recibió poco más de 2 millones de turistas, ligeramente por debajo de los niveles previos a la pandemia, pero mucho más que los apenas 175 mil visitantes del año pasado.

Mientras que a Baja California Sur, llegaron 557.400 pasajeros, lo que significa un aumento del 15% con respecto a junio de 2019. En este lugar, las autoridades nuevamente se apresuran a agregar camas a los hospitales sobrecargados de pacientes, que la semana pasada llegaron al 75% de capacidad antes de disminuir al 62%, el jueves.

Alejandro Macías, quien supervisó la epidemia de H1N1 en México en 2009, declaró: “La variante Delta tiene una fuerte presencia en la península de Yucatán, particularmente en Quintana Roo y Baja California Sur, donde alrededor del 80% de las nuevas pruebas ahora son de esta cepa”.

Lo que ocurre en las costas también se refleja en la Ciudad de México, donde la secretaria de Salud, Oliva López, dijo que ahora predomina la variante Delta. “Las muertes siguen siendo relativamente bajas, ya que alrededor del 69% de la población adulta de la ciudad ha recibido al menos una vacuna” dijo y reconoció que la ocupación aumentó del 7% al 28% en sólo un mes.

A pesar del aumento de los contagios en Cancún, 270 hoteles fueron eximidos de un límite de ocupación del 50%, lo que les permite operar al 70% de su capacidad, según Roberto Cintrón, director de la asociación hotelera de la región.

“La economía de Quintana Roo depende casi por completo del turismo, por lo que los hoteles han implementado estrictos protocolos sanitarios. Es importante destacar que las infecciones están ocurriendo entre los jóvenes locales y que tenemos suficientes camas de hospital para ellos, si es necesario. Pero los contagios no están ocurriendo entre los turistas”, aseguró.

Quintana Roo sigue evadiendo semáforo rojo

Sinaloa reportó más de 500 contagios de Covid-19 en un sólo día la semana pasada, por lo que el gobierno federal decidió colocarlo en color rojo del Semáforo Epidemiológico Nacional, siendo hasta ahora la única entidad en la máxima fase de la alerta de riesgo. Esto es importante de recalcar, porque el viernes pasado, Quintana Roo, registró más de cinco centenares de nuevos enfermos en 24 horas y sin embargo, las autoridades lo mantienen en naranja.

Un día más tarde, el récord roto en Quintana Roo con 530 nuevos casos, fue con 549 personas declaradas con el SARS-CoV-2 activo en un día, según el informe técnico diario de la Secretaría de Salud Estatal, es decir, que durante dos días consecutivos se derribó la barrera de los quinientos.

Sinaloa, a principios de mes tenía menos de 200 casos en 24 horas, sin embargo en Quintana Roo desde el 1 de julio ya había más de 400.

Como ya lo advirtió el propio gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, volver a rojo significa “cierre total” de negocios, turismo y toda la actividad económica, por lo que el gobierno local insiste en no decretar un retroceso tan radical.

Datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) indican que la pérdida de puestos laborales de Quintana Roo significó el 15.03 por ciento del total del país el año pasado, con 97 mil 381 puestos caídos, su primer desplome después de 11 años de incrementos

Refuerzan medidas sanitarias en centros comerciales de Cancún

Durante uno de sus informes para dar a conocer el comportamiento de la contingencia sanitaria por Covid-19 en Quintana Roo, el gobernador Carlos Joaquín declaró que ahora los establecimientos comerciales debían solicitar a sus clientes una prueba Covid-19 negativa para dejarlos ingresar,y si bien, la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) aclara que no todas lo están haciendo, indicaron que sí es una obligación reforzar las medidas de prevención.

El pasado fin de semana se detectaron los primeros establecimientos en solicitar la prueba de Covid-19 a sus clientes y se presume que el actuar de los vigilantes de estas plazas se debe, precisamente a la nueva norma restrictiva impuesta por el gobernador. “Es necesario que todos los establecimientos, soliciten un comprobante de prueba negativa de antígeno ‘PCR’ o comprobante de vacunación”, dijo el mandatario en su momento.

Y es que, este sábado, ciudadanos de Cancún se llevaron la sorpresa de que al asistir a Plaza Las Tiendas, se les negó el acceso si no presentaban una prueba con resultado “negativo”, lo cual inmediatamente trascendió en redes sociales, lo mismo que la molestia generalizada de las personas que no cumplían con los requisitos para acceder en el lugar.

Los guardias de la empresa de seguridad privada llamada “SEICSA” exigieron a todas las personas que querían ingresar al establecimiento una prueba Covid-19 que no tuviera más de tres días de antigüedad desde su aplicación, no obstante, ante el descontento de la gente, horas mas tarde decidieron permitir el libre acceso a la Plaza Las Tiendas de Cancún, con las medidas de sanitarias básicas, como es el uso de cubrebocas y tomar la temperatura de las personas, así como exhortarlos a mantener la sana distancia.

Después de este tipo de altercados en diferentes puntos de Benito Juárez (Cancún) y otros municipios, autoridades sanitarias de Quintana Roo salieron a aclarar que lo dicho por el gobernador es sólo una recomendación y que es decisión de cada uno de los establecimientos comerciales como plazas o restaurantes, solicitar o no la prueba negativa de la enfermedad o en su defecto el comprobante de vacunación a sus clientes a fin de permitirles la entrada y evitar la propagación del virus.

El director de la Cofepris en el estado, Miguel Pino Murillo, declaró que esta decisión no le compete a las autoridades sanitarias, sino que corresponde a las políticas de cada establecimiento. “Es una decisión personal de cada establecimiento el pedir las pruebas negativas de Covi-19. Por parte de nosotros no es obligatorio hacia el público, sólo a sus empleados”.

De tal manera que Cofepris sólo realiza revisiones en los establecimientos para verificar que cuenten con los filtros sanitarios requeridos en el marco del semáforo naranja de riesgo epidemiológico, tales como que se realice la medición de temperatura a clientes y trabajadores; brindar gel antibacterial para las manos, desinfección constante del lugar, respeto de los aforos y sana distancia.

Asimismo, ahora, se exigirá que los trabajadores tengan certificado de vacunación o prueba de antígeno negativo de Covid-19, no mayor a 72 horas”.

Centros nocturnos se hacen pasar por restaurantes

Por otro lado la Cofepris informó que lamentablemente siguen detectando muchos establecimientos que se quieren pasar de listos buscando la manera de evadir los protocolos y las restricciones en el marco del semáforo naranja de riesgo epidemiológico, pues incluso, algunos centros nocturnos se hacen pasar por restaurantes para seguir operando.

La Cofepris dio a conocer que han sancionado y clausurado a 17 de estos negocios durante los últimos dos meses en toda la geografía estatal, principalmente en Cancún, Chetumal y Playa del Carmen, ciudades de mayor tránsito turístico y donde generalmente buscan diversión nocturna.

Asimismo, aclaran que se han detectado otros tantos casos en Tulum y Mahahual, donde los centros nocturnos “clandestinos” también han sido suspendidos. La forma de operar de estas personas es que en su publicidad publicada en redes sociales y permisos de funcionamiento cambiaron su giro al de “restaurantes” y fingen trabajar en este marco, sin embargo, cuando se realizan las inspecciones se detecta que no es así y que siguen siendo centros nocturnos, con bebidas alcohólicas hasta altas horas de la noche y lo que es pero, con alta concentración de personas.

Pino Murillo explicó que tan sólo el fin de semana fueron clausurados dos de estos negocios: uno en Chetumal y otro en Playa del Carmen, hasta donde llegaron después de haber sido alertados a través de denuncias anónimas y advertencias de vecinos, quienes se quejaron de la gran afluencia de personas a altas horas de la noche en las zonas aledañas a estos lugares, que todos saben a que se dedican.

“De hecho, la razón de la clausura o suspensión proviene precisamente de rebasar el límite de aforo permitido, del 60%, así como laborar fuera del horario permitido, a la una de la mañana. Se han detectado centros nocturnos que operan hasta las cuatro o cinco de la madrugada, lo cual es una clara violación a las medidas sanitarias”, explicó.

Hay que recalcar que en el interior de los bares no se respeta ni la sana distancia ni el uso de cubrebocas, por lo que es común ver a las meseras y edecanes sin mascarilla, conviviendo con los clientes, es decir, que muchos de estos lugares también ofrecen lo que se conoce como entretenimiento y servicio para “caballeros”.

Por otro lado, han detectado que cuando Cofepris suspende un negocio, éste suele ser reabierto en otro lugar, a fin de burlar la sanción y seguir operando, lo anterior auspiciado por los turistas que tal parece ser no pueden prescindir de la fiesta, el alcohol y de este tipo de lugares ni en medio de una emergencia sanitaria, lo cual deja ver no sólo su falta de amor propio, sino de respeto por lo demás.

De acuerdo al semáforo epidemiológico en color naranja, los centros nocturnos no tienen permiso de operar sino hasta que avance al verde, debido a que son considerados un riesgo de contagio masivo de Covid-19, no obstante, las redes sociales son claro testigo de que jamás ha parado la fiesta en el Caribe mexicano ni en la Riviera Maya, pues siempre existen los empresarios, dueños de negocios y demás prestadores de servicios que estarán dispuestos a burlar la ley y satisfacer la demanda irresponsable de sus consumidores aun por encima de la salud de la población. Lamentable.

Escríbame a mi mail: montanezaguilar@gmail.com