El PRI, ¿invencible en el Estado de México?
Luis Muñoz jueves 22, Jul 2021Segunda vuelta
Luis Muñoz
Aunque dicen que las elecciones intermedias del 6 de junio fue el banderazo de salida para la sucesión en el Estado de México en 2023, los suspirantes se la llevan con calma.
¿Estarán, acaso, esperando los tiempos electorales para no verse tan ansiosos o violar la Ley como dice Nora Arias, dirigente del PRD en la Ciudad de México?
Si para el presidente López Obrador no es prematuro hablar de la sucesión presidencial cuando aún falta mucho para 2024, para algunos dirigentes de Morena en el caso del Edomex, tampoco.
Alfonso Ramírez Cuellar, cuando aún era dirigente nacional de Morena, decía a legisladores mexiquenses de su partido: “Tenemos que ganar la gubernatura del Estado en 2023”.
Hoy el apremio es mayor después de los resultados adversos en la Ciudad de México. Perder pondrá en serios aprietos a Morena en la presidencial del 2024 y con ello marcaría el fin del proyecto de la cuarta transformación (4T).
Pero prematuro o no, ya hay por lo menos once aspirantes al gobierno del Estado de México de los partidos más importantes, como el PRI, MORENA, PAN y PRD.
Después del trago amargo por la derrota en la CDMX hace 46 días, a manos de la “santa alianza” (PRI-PRD-PAN), que dolió hasta la médula, Morena se prepara para enfrentar otro reto mayúsculo: Ganar en el Estado de México a como dé lugar. Saben que no será fácil, pero no pueden darse el lujo de perder una plaza tan importante o más que la primera.
El 2017 Morena perdió en el Edomex ante el priista Alfredo Del Mazo. Y la historia podría repetirse en 2023 porque enfrentará nuevamente al adversario político en su terruño, el terruño del poderoso grupo Atlacomulco que ha gobernado la entidad, al menos, desde la época Isidro Fabela.
Para el PRI, perder no es opción.
Para Morena, menos. El presidente Andrés Manuel López Obrador sabe que si no gana en la entidad mexiquense, la permanencia de su partido en el Poder estará en serio riesgo.
Por eso mismo nadie se sorprendería si utiliza todo el poder del Estado para que su “delfín” gane en la entidad mexiquense, considerado como el bastión priista y que para los partidos representa “la joya de la corona” y su puerta de acceso a las elecciones presidenciales de 2024.
¿Quiénes son los aspirantes a la gubernatura?
La mayoría son “viejos conocidos”, es decir, pocas cara nuevas en los partidos PRI, PAN, PRD, Morena y aliados. Políticos conocidos que los ciudadanos identifican por sus acciones buenas, regulares o simplemente mediocres. Se sabe que por el PRI son varios los aspirantes, entre ellos Ana Lilia Herrera Anzaldo, quien ha sido legisladora local, presidenta municipal, senadora y actualmente diputada federal, además de titular de las secretarias de Educación y Desarrollo Social del gobierno mexiquense.
Alejandra del Moral Vela, ex presidenta municipal en Cuautitlán Izcalli, secretaria del Trabajo, presidenta del PRI en el estado, directora del Bansefi y diputada federal.
Ernesto Nemer Álvarez ha sido funcionario del gobierno estatal, Procurador Federal del Consumidor y diputado federal. Elías Rescala Jiménez fue designado el 28 de abril de este año, secretario general adjunto del PRI en la entidad. Ricardo Aguilar Castillo, político priista desde sus años mozos, fue presidente municipal de Jilotepec y actual diputado federal, entre otros cargos.
Y aún podría sumarse a la lista Francisco Javier Fernández Clamont, recién nombrado secretario de Saludo del Estado de México y muy cercano al gobernador Alfredo Del Mazo.
Como puede verse, el PRI también tiene aspirantes para dar y prestar, como dice López Obrador cuando habla de su partido Morena.
Por el PAN, los mencionados son: Enrique Vargas del Villar, presidente municipal de Huixquilucan y Fernando Flores Fernández, designado como uno de los 300 líderes más influyentes.
Morena tiene en la profesora Delfina Gómez a su principal aspirante (ella es la actual titular de la SEP). En 2017 perdió ante el priista Alfredo del Mazo, pero…quizá ahora sea otro quien lo enfrente. Otro suspirante es Alejandro Encinas Rodríguez, a quien consideran ya pasadito de moda. El ha tenido diversos cargos, uno de ellos es el de jefe de Gobierno del entonces Distrito Federal.
Y Citlali Ibáñez Camacho, quien por motivos muy personales (y de sobra conocidos) debió cambiar su nombre por el de Yeidckol Polevnsky. Por el PRD se menciona a Héctor Miguel Bautista López, que se ha desempeñado como alcalde y diputado federal.