De fichas y corcholatas
¬ Sócrates A. Campos Lemus lunes 19, Jul 2021¡Que conste,.. son reflexiones!
Sócrates A. Campos Lemus
EN LOS MERCADOS ES MUY CLARO CUANDO UN RATERO SE ROBA UNA BOLSA QUE DE INMEDIATO VA GRITANDO SEÑALANDO HACIA ADELANTE : “¡Agarren al ladrón!” y el chiste es que con ello todos volteaban buscando al ladrón, pero no veían al que llevaba la bolsa y esto es lo que hicieron en muchos años los políticos, empresarios, banqueros y funcionarios mientras hacían el robo nacional para privatizar o robar los bienes nacionales y darlos a los privados para que hicieran sus negocios privados.
En mi niñez vivimos en la zona de La Lagunilla, en República de Chile, entre Perú y Belisario Domínguez, frente a una calle que daba a la ESIME, Mariana del Toro y ahí estaban siempre muchos “teporochitos” que pedían dinero para comprar refresco Lulú al que revolvían alcohol del más corriente. Y así morían poco a poco. Han pasado más de setenta años y todo sigue igual, no hay cambios más que en los personajes y en las formas de extorsión y “cobro de piso”. Las drogas aumentan en su consumo, las mafias se fortalecen en las calles, los consumos se dan con mucho más brutalidad y la violencia es lo que existe como una realidad diaria en cada casa y cada calle.
Ya no es La Lagunilla, es parte de Tepito, los barrios se juntan por medio de las mafias y de los intereses comerciales y delincuenciales, así pareciera que no sucede nada, porque el silencio es lo que cuenta para sobrevivir, nadie puede protestar a menos que piense que pronto podría ser parte de los muertos diarios de la zona. Los comerciantes tienen que combinar sus actividades y además de vender lo robado o contrabandeado venden droga o brindan protección y así las luchas de poder se dan en todos los niveles y por ello ahora están encarcelando a las dirigencias tradicionales de los ambulantes porque al final de cuentas, además de dinero, brindan apoyo político y social y ahora pues o lo perdieron o lo canalizaron a otros grupos y tienen un alto costo que pagar.
Sin duda, Martí Batres es un político de enorme valor y experiencia, lo podrán acusar de muchas cosas, pero es parte de la formación de las calles y hoy en día, pues su valor es enorme y por ello su incorporación al equipo de la Jefa de Gobierno, contando con la aprobación del presidente y de los grupos políticos. René Bejarano y su poderoso grupo se dejarán sentir en la zona, tienen la capacidad de confrontar a cualquier otro grupo político y así, sin duda, las cosas cambiarán.
Y para comenzar la vendimia de la sucesión presidencial acaban de promocionar un combo de seis corcholatas para una sola botella y otro de seis almohadas, tipo nalguitas para una sola silla, todo con bajos precios porque de lo que se trata es de promocionar el tema y no politizarlo. Hace algunos años, un general me comentaba cuando el expliqué que el gobernador de ese estado tenía la firme convicción de ser nombrado Secretario de la Defensa Nacional, conociendo los antecedentes de corruptelas y malos manejos en sus desempeños anteriores, me dijo con toda convicción: Pues el asunto es que hay muchas nalguitas puestas, pero el asunto es que solamente hay una silla para sentarse… y no está “rifándose”.
La experiencia política del Presidente y de gran parte de su equipo provoca que las pasiones se desborden, no es que no existan “tapados” pues “tapados” son hasta que se “destapan” en la realidad, por ejemplo, Moya Palencia, era el “tapado”, pero de pronto las cosas cambiaron y dieron el giro que nombraron a López Portillo como el mero mero y así, por ejemplo, han sido muchos casos en el país y a lo mejor las cosas no han cambiado nada más que de nombre, pero no de fondo y el “tapadismo” es una realidad, o tenemos los casos extremos donde se eliminan o asesinan a los candidatos como en el caso de Colosio y se enredan de tal forma las cosas que se escoge a los que andan por ahí rondando y ya vemos lo que dejan en el cochinero de su mandato: pues salvan a bancos y banqueros dejando endeudados a los mexicanos… y venden los ferrocarriles para convertirse en asesores de las nuevas empresas y ahora, hay apetecibles, el Tren Maya y el Transístmico, que tiene muchos cachitos que deben dejar un gran nivel de ganancias.
Si observamos claramente este proceso de sucesión adelantada será de gran folclore y dará mucho para que salgan muchas parejas a bailar tratando de combinar las corcholatas en la misma botella. Cuando uno se da cuenta, las botellas tienen la misma medida en los cuellos y las corcholatas tapan igual las de cerveza que las de la “cacacola” o las de Mirinda y más o menos cuestan igual. Así, sin duda, Ricardo Monreal, será una figura, donde se buscará el que se acomode la corcholata quieran o no los dueños de la mesa. No vaya a salir como decía Díaz Ordaz, no me dejen el destapador porque soy muy malo destapando, ya ven como salen de malos los refrescos… El Presidente es un hombre que tiene claridad para realizar este proceso, los que no tienen claridad es su equipo y es donde se hace bolas el engrudo porque todos quieren meter mano a la cuchara.
Eso de que dice el “líder” de Morena que se sancionará al que no obedezca, nos huele a dictadura o “dictamensa”, pero no a un proceso democrático y libre. Si se tiene que amenazar a los cuates para que se comporten en la fiesta, pues estamos jodidos, porque así se generan las tragedias… y en la sucesión se trata de que no existan golpes ni gritos ni sangre, que la sucesión sea en paz depende mucho del control, y para ello, a lo mejor, lo que daría más resultado es brindar a todos con refrescos tipo “teporochitos”, total, los “pedotes”, siempre dicen la verdad… porque en México hay corcholatas y fichitas y las fichitas son de temer y las corcholatas son para levantarlas del piso, porque aunque sucias se pueden lavar.