La tarea de Morena
¬ Augusto Corro jueves 15, Jul 2021Punto por punto
Augusto Corro
El “destape” tempranero de candidatos presidenciales agitó las aguas en el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Las pugnas internas se agudizarán conforme se avance a las elecciones de 2024. El presidente López Obrador, líder moral del movimiento, no esperó a que el “destape” lo hiciera el partido. La política del “dedazo” se realizó como en tiempos del liberalismo. Una decisión desde el poder anula inquietudes de la base.
Ahora, a Morena le toca esperar, con paciencia, lo que marque el calendario electoral presidencial.
La tarea política tendrá que ser intensa en esa organización política con el fin de buscar la unidad en torno a un candidato. La lucha entre “puros” y “moderados” podría llevar al divisionismo partidista profundo, propio de los partidos llamados de izquierda.
Aunque se piensa llevar la elección presidencial lo menos conflictiva que se pueda y para eso aplicarán las encuestas. Esas consultas morenistas, que son pocos los que saben cómo se realizan, serán la tabla de salvación para evitar confrontaciones internas.
Con las encuestas resolvieron casos como el de la dirigencia nacional del partido que disputaban Mario Delgado y el controvertido político, Porfirio Muñoz Ledo. Ese estilo de decisión política se aplicó en Guerrero. Ganó Félix Salgado Macedonio, pero era más que imposible mantener su candidatura.
Finalmente, en un acto de nepotismo puro, la ganadora fue Evelyn Salgado Pineda, hija de Salgado Macedonio. ¿Eso ocurrirá con la elección del candidato morenista?
Parece que así ocurrirá. Además, será el aspirante designado por López Obrador el que participe como abanderado de su partido en la contienda electoral citada. En esas condiciones políticas hasta sobraría llevar a cabo las encuestas. Si la decisión surge desde las altas esferas del poder, no habrá manera de impugnarla.
Entonces, ¿cuál será el papel que jugará Morena en las elecciones presidenciales? ¿El de un partido pasivo? Ya pronto lo veremos.
No olvidar que en los últimos tres años, el partido guinda estuvo sumido en el anonimato. Tal fue el desdeño por la política que perdieron en la Ciudad de México, aunque digan que ganaron. En el partido morenista ya empezaron a manifestarse actos de rechazo a su líder, Mario Delgado.
Como señalamos en este espacio, durante la ceremonia de tres años de la victoria morenista, los asistentes al acto a gritos exigían la renuncia de Mario Delgado.
En esa misma reunión se coreaba también la palabra presidenta, en franco apoyo a la jefa de Gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum.
En el presente, son dos los precandidatos “destapados” que ya se nombraban antes de que los señalara López Obrador en la mañanera: Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard.
Las simpatías para esos personajes se determinaron durante la elección de la dirigencia nacional. Fueron una advertencia de lo que podría venir.
En esa contienda, se dijo que Mario Delgado era la avanzada de Marcelo Ebrard y que Muñoz Ledo era el representante de Claudia Sheinbaum.
El canciller ya se “destapó” oficialmente. La jefa de Gobierno dijo que hay que esperar. Ambos están relacionados con la tragedia en la Estación Olivos del Metro, en cuyo accidente perdieron la vida 26 personas.
Por otra parte, algunos de los aspirantes citados por el presidente López Obrador dijeron que no tienen interés en participar en el juego electoral.
No así, el líder del Senado, Ricardo Monreal, quien manifestó que estará en la boleta presidencial el 2024.
¿Usted qué opina amable lector?
La pesadilla continúa
La dirigente del Partido de la Revolución Democrática (PRD) capitalino, Nora Arias, convocó al gobierno de Claudia Sheinbaum a eficientizar, con prontitud, el proceso de vacunación de los jóvenes que actualmente siguen en alto riesgo de contagio por coronavirus.
También se pronunció porque las autoridades informen con veracidad el comportamiento de la pandemia.
Agregó que la jefa de Gobierno, a través de las secretarías de Salud y Movilidad, principalmente, tienen la responsabilidad de garantizar la protección a la salud ante la emergencia sanitaria, desde sus ámbitos de competencia, debido al crecimiento, de nueva cuenta, y aparición de variantes del virus.
La dirigente perredista recalcó lo siguiente:
“No queremos que suceda como al inicio de la pandemia y se decida cerrar todas las actividades cuando se puede prevenir el contagio masivo mediante la aplicación de medidas específicas, como aumentar el número de unidades de transporte para evitar aglomeraciones, garantizar el distanciamiento físico, el aforo a los espacios públicos y el uso del cubrebocas.
¿Usted qué opina amable lector?