Se fue Florencia Serranía… ¿y?
Luis Muñoz miércoles 30, Jun 2021Segunda vuelta
Luis Muñoz
A nivel de “chismógrafo” fue reducida la conferencia mañanera que ofrece el presidente Andrés Manuel López Obrador desde Palacio Nacional, de lunes a viernes, como lo estipula la semana inglesa, aunque en realidad es una invención de los sindicatos estadounidenses que defendieron la jornada laboral de 48 horas y 40 a la semana (5 días).
Pero esa es otra historia.
El caso es que desde ese emblemático sitio se hace escuchar el jefe del Ejecutivo federal, quien ahora ha decidido ser el único que dé información sobre la Línea-12 del Metro. Y nadie más.
Así relevó de esa responsabilidad a la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, quien, por fin, destituyó a Florencia Serranía Soto como directora del Metro. Nunca estuvo a la altura de su responsabilidad.
Bien. Serranía se fue… ¿y?
No hay, hasta este día, ni un responsable. Ni habrá, aventuran algunos. Ahora, para quitarle presión a la jefa de Gobierno, su candidata preferida para 2024, el Presidente se autodesignó “vocero” para el tema de la L-12, hecho que Sheinbaum admitió sin chistar.
Sobre esto, el Grupo Parlamentario del PAN en el Congreso capitalino alzó la voz para reprobar que el presidente López Obrador sea el “vocero” de la “Línea Dorada”.
Al diputado panista, Diego Garrido, no lo convenció y dijo que las mañaneras de López Obrador se transformaron en una especie de “chismografo político”, que sirve para tener a su audiencia distraída y divertida.
Garrido, vicecoordinador del PAN en el Congreso de la CDMX, no acepta que AMLO sea el “vocero” y “salvavidas” de la jefa de Gobierno en medio de la crisis política por la “Línea Dorada”.
Es evidente que “les cuesta trabajo ubicar culpables; no hay claridad en las investigaciones y le dan la vuelta a los medios de comunicación con demagogia que ahora la encabezará el mismísimo presidente desde Palacio Nacional”, agregó.
El diputado Garrido, a la sazón secretario de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia, afirmó que los diputados del PAN “esperan más de la fiscal Ernestina Godoy, aunque le piden que sea firme en juzgar e identificar a los culpables por el desplome y no vea los expedientes con “ojo político” a favor de Sheinbaum, Ebrard o de Mario Delgado.
El legislador cuestionó la actitud “machista” de López Obrador al no permitirle a Claudia Sheinbaum hablar o expresarse ante la opinión pública sobre este trágico hecho de la Línea 12 del STC-Metro.
“Sí el presidente AMLO quiere asumir la responsabilidad completa, que empiece por señalar culpables, los denuncie y se mantenga al margen de los costos políticos para su persona”.
Insistió en que pasan los días y pareciera que el gobierno busca acomodar las cosas para evitar “la menor salpicada posible” a Morena o a sus punteros presidenciales, pero es claro que Ebrard, Sheinbaum y Delgado tienen responsabilidad directa, dijo.
El también panista, Christian Von Roehrich, celebró la salida de Florencia Serranía, pero al mismo tiempo demandó abrir una investigación firme en su contra por negligencia y omisiones durante su gestión.
La situación no puede quedar sólo en una renuncia y ya, a sabiendas de que Morena y el gobierno buscan ocultar la verdad y proteger a la ahora ex directora, por el desaseo en el Metro.
Resalta, además, que la separación fue tardía y se perdió tiempo para que la directora no sea cuestionada ni citada a comparecer. Ahora no podrá ser juez y parte en las investigaciones en su contra por la tragedia de la Línea 12.
Von Roehrich, quien es coordinador del GPPAN, insistió en que Serranía no puede irse por la “puerta trasera” y el gobierno apostar al olvido de la tragedia en el Metro por falta de mantenimiento y rehabilitación de la red de transporte.
Aunque ya se ha dicho en reiteradas ocasiones, es importante insistir que en tan sólo 2 años, con Serranía al frente de la dirección del Metro, hubo choque de trenes (uno de ellos en Tlalpan), incendios (como el del PCC), explosiones (en transformadores) y vagones que se desplomaron (como ocurrió en la L-12), amén de frecuentes fallas, retrasos y un caos absoluto en las líneas de mayor afluencia.
¿Quién puso remedio? ¡Nadie!
Ahora, dice Von Roehrich, tiene que comparecer (¿Por fin: tiene, debe y puede o no?) ante el Congreso (local) y la Fiscalía por su probable responsabilidad administrativa y penal”.
Hechos que marcaron el expediente negro para Serranía, está la muerte de una mujer en la estación Tacubaya hace 2 años, a la que se le atribuyó negligencia por parte del jefe de Estación. El incendio en la subestación de Delicias, y seis líneas del Sistema detenidas bajo el argumento de que se trató de un corto circuito”.
Otro caso es el choque de trenes en Tacubaya, donde falleció una persona y hubo por lo menos 50 heridos tras un supuesto “error humano”.
Lo más trágico fue el accidente en la L-12, donde fallecieron 26 personas y hubo más de 70 heridos. Eso hace necesario que se investigue y sancione a quien o quienes resulten responsables.
Sostiene también que tanto Morena como el gobierno se niegan sistemáticamente a crear una Comisión Investigadora para que los funcionarios del Metro responsables del desplome comparezcan, actitud que fomenta la corrupción y se oculta la verdad alrededor de lo sucedido en Tláhuac”.