PRI, De la Madrid podría ser
¬ Arturo Ríos Ruiz miércoles 23, Jun 2021Centro..!
Arturo Ríos Ruiz
- “Amlito” no garantiza fidelidad
- Enrique es ortodoxo y preparado
El Presidente es muy predecible, con frecuencia, su estado anímico lo conduce a adelantar sus planes como el reciente resultado en las elecciones “más grandes de la historia”; no le mantuvieron la apabullante ventaja que gozaba. Perdió la emblemática CDMX y el Congreso local. En votos parejeros con la alianza.
La primera actitud que asumió fue tender la mano al PRI, el único partido que le garantizaría un Congreso calificado para sus fines de cambiar la Constitución, requiere 54 diputados más para ese fin, el tricolor cuenta con 69.
Y aunque Alejandro Moreno, líder del PRI, primero dio una respuesta ambigua, Dulce María Sauria con mayor credibilidad, fue contundente al negar alianza alguna con un argumento irrebatible: “No le fallaremos a los electores, seremos un contrapeso”. Luego Alito cambió y también se fue por la negativa.
Entonces el mandatario, arremetió desestimando a sus invitados y fiel a su costumbre arremetió por el rechazo, pero ante las circunstancias y ansias de tener la mayoría indicada para sus fines, otra vez insistió en su invitación.
Por fortuna en el priismo aún hay elementos responsables que se pronuncian por recuperar prestigio perdido desde la debacle que representó el gobierno de Enrique Peña Nieto que lo entregó a la corrupción y causó por ello el desprecio de sus seguidores que votaron por Morena.
Ante el blandengue comportamiento del líder priista que está abatido por su emporio inmobiliario en Campeche y que seguramente ya tienen su expediente para echarle encima a la UIF y la Fiscalía de Gertz Manero, nada difícil es doblarle las manos y caería vencido para manejarlo a su antojo para traicionar al órgano político a cambio de su tranquilidad. Otro enigma es Rubén Moreira, líder priista en el Congreso, con cercanías al mandatario.
Hay que sumarle que Alito, hasta perdió Campeche donde se supone que debería tener su arsenal político, pero desde que puso como candidato tricolor a un familiar, sus bonos se fueron al precipicio, amén que su partido se fue al tercer lugar. Toda una derrota y mancha negra para su gestión. Debe irse. Por ello, ha comenzado a manejarse el nombre de Enrique de la Madrid, un político que ha madurado, ha mostrado capacidad intelectual y ortodoxia para dirigir al PRI y sí representaría la confianza para una total renovación y separar a tanto nocivo en sus filas que lo han acaparado para mal.
Lo recuerdo como estudiante asistiendo a eventos políticos como observador, discreto y sólo sentado cuando su padre era el Presidente, los “guaruras”, seguro estaban muy cerca, pero él se manejaba con cautela y daba buena impresión. Ya es juicioso y podría ser la carta acertada en el partido.
AL CIERRE: Miguel Ángel Osorio Chong ya se apuntó, pero no es el adecuado, pesan muchos pecados, desde fue gobernador en Hidalgo y en Gobernación. Es de los malos del PRI.