Afores, en la mira de AMLO
Alberto Vieyra G. lunes 17, May 2021De pe a pa
Alberto Vieyra G.
El gris y lacayo diputado morenista, Edelmiro Santiago Santos Díaz, de quien se afirma que apenas medio sabe leer y escribir, ganaría notoriedad esta semana, revelando en un mamotreto, que propondrá una reforma fiscal para nacionalizar las Afores que concentran la nada despreciable suma de cuatro billones, cuatro millones de pesos para consolidar las obras sexenales de López Obrador como el Tren Maya, el Aeropuerto de Santa Lucía, la refinería de Dos Bocas y proseguir con los programas sociales que benefician con dádivas de clientelismo electoral ultrajando la dignidad de los mexicanos a casi 23 millones de compatriotas.
¿Nacionalizar, como lo hizo el general Lázaro Cárdenas? ¿AMLO sería capaz de jalarle en este momento los bigotes al tigre derrochando los ahorros de 30 millones de trabajadores y sus familias en México?
Porque conozco por dentro y por fuera al Poder Legislativo de México, el diputado Santiago Santos Díaz sería incapaz de contar con las luces de inteligencia para formular de motu proprio una propuesta de tal naturaleza.
No mire usted. Al señor legislador lo usaron de Palacio Nacional o de la Secretaría de Gobernación para presentar ese documento que provocó un torbellino en México y el extranjero, a grado tal de que, por la noche se diría en los altos círculos del poder político que se trataba de un documento falso. Sólo querían medirle el agua a los camotes, pero en Palacio Nacional vieron que una iniciativa de tal naturaleza seria como despertar al México bronco provocando hasta una guerra civil, como actualmente ocurre en Colombia donde la gente se rebeló contra el autoritario gobierno de Iván Duque Márquez, quien pretendía bolsear a los colombianos más fregados con una reforma fiscal impopular. El pueblo se le echó encima con una cara factura de sangre.
Real o falso, el documento en cuestión, revela la voracidad de AMLO para seguir otorgando dádivas electorales a sus adictos y pareciera que el Presidente no tiene llenadera porque se apoderó de los fideicomisos con más de 100 mil millones de pesos y de muchos otros millonarios guardaditos al más puro estilo del venezolano Hugo Chávez, quien regalaba las dádivas del petróleo y cuando los precios se desplomaron y se acabó el excremento del diablo, entonces usó todo su poder dictatorial para someter a los venezolanos que hoy ya no sienten lo duro, sino lo tupido, ante el desastre que vive esa nación sudamericana.
El propio AMLO anunció hace unos 3 meses que propondrá una reforma fiscal que seguiría los pasos de su homólogo colombiano, sin embargo, cuando algunos levantadedos en la Cámara de Diputados han hablado del tema, inmediatamente les han llovido los coscorrones, pues la idea de AMLO es que una vez transcurridas las elecciones federales del 6 de junio, sálvese quien pueda, porque AMLO ira por su reforma fiscal para sacar dinero hasta de por debajo de las piedras.
Después de una criminal mortandad por el coronavirus a razón de la negligencia gubernamental, la tragedia de la Línea 12 del Metro, el desastre económico que se refleja en una galopante inflación que ya rasguña el 7 por ciento, lo que ha motivado que todo esté hasta por las nubes y que los hambreadores nacionales e internacionales estén haciendo de las suyas sin que haya gobierno que les ponga un alto, pues sostienen que el alza de los combustibles encareció todo. ¿Pues no que no habría gasolinazos, don Peje?
Y como todo esto no basta, pues AMLO busca apoderarse llueva, truene o relampaguee de la millonada de 4 billones de millones de pesos que hay de ahorros de los trabajadores en las Afores.
Me pregunto: ¿Esta vez AMLO tendrá la prudencia para no hacer que estalle el México bronco?