La nueva realidad política mexicana
¬ Luis Ángel García viernes 14, May 2021Por la Derecha..!
Luis Ángel García
“Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba ahí”. ¿Con qué realidad amaneceremos el 7 de junio? ¿Los mexicanos habremos dado un paso adelante y frenado el proyecto político del Presidente o veremos, como en el cuento de Augusto Monterroso, a la 4T todavía ahí con sus ocurrentes propuestas populistas y totalitarias?
El Dinosaurio, el cuento más corto del mundo, es una buena metáfora de lo que puede pasar en las próximas elecciones. El gobierno y su partido no pueden negar su génesis, son la peor herencia del priismo del siglo pasado, a cuyos dirigentes y a muchos de sus militantes se les conocía como los dinosaurios de la política.
Está en su ADN el ser como los ex presidentes Luis Echeverría y José López Portillo, a cuyos sexenios se le conocía como “La docena trágica” por las graves consecuencias económicas y sociales que dejaron para el país. Las propuestas populistas y la promesa de acabar con la corrupción de los dinosaurios engatusaron a 30 millones de mexicanos que vieron, como en su eslogan de campaña, un rayo de esperanza para acabar con la pobreza. A más de dos años de gobierno nada se ha hecho realidad, ahora hay más familias pobres y en pobreza extrema, hay más desempleo, no se reduce la inflación y suben los precios de la canasta básica.
Dependemos de las exportaciones y del petróleo, energético que está en extinción y se aferran a salvar una paraestatal en quiebra y depender de energías sucias y caras. Peor aún, presumen las remesas récord como si fueran ingresos públicos, cuando debiera darles vergüenza que nacionales que dejaron su país por falta de oportunidades, tengan que mandar dinero a sus familiares para salir de la miseria. Se enemista con los empresarios y los acosa, sin darse cuenta de que son los únicos generadores de empleo y riqueza.
El verdadero proyecto político del régimen es perpetuarse en el poder, ser como su ancestro, un sistema hegemónico con un presidencialismo absolutista sin oposición en los partidos y sin división de poderes, con legisladores y ministros dóciles que están dispuestos a quebrantar el orden constitucional o hacer y aplicar leyes a modo.
A diferencia del PRI, Morena ni siquiera es un verdadero partido, es un movimiento que, por la injerencia presidencial permanente, las pugnas internas y su constante divisionismo no han podido madurar como organización política. Con el tricolor al presidente se le llamaba el primer priista del país, ahora el tlatoani guinda hereda ese papel e impone candidatos legitimados por espurias o inexistentes encuestas.
El nuevo populismo busca el poder por el poder mismo, no le interesa el desarrollo nacional, por eso solo ve la supervivencia de los viejitos, los ninis y las madres solteras para mantener su base electoral con programas clientelares. Los presupuestos, los ingresos nacionales se destinan a esos 30 millones de mexicanos que están acostumbrados, como antaño, a recibir sin producir.
No extrañamos a los dinosaurios priistas, son más de lo mismo, sólo reloaded.
En los próximos comicios, los más grandes en la historia de este país, donde están en juego más de 21 mil cargos de elección popular, debemos razonar muy bien el voto para evitar caer en el engaño nuevamente y no despertar para que el dinosaurio siga ahí. La personalidad de este régimen es muy parecida a la novela de ficción gótica, horror y misterio de Robert L. Stevenson, El extraño caso del Dr. Jekyll y el Sr. Hyde.
