#Linea12, “no fue accidente, fue negligencia”
Guillermina Gómora Ordóñez martes 11, May 2021Caleidoscopio
Guillermina Gómora Ordóñez
“Cuando la corrupción existe, la memoria resiste”
Familiar víctima accidente L-12
Se cumplió una semana del colapso de un tramo de la Línea 12 del Metro y todos los involucrados en esta historia de corrupción y tragedia siguen en sus cargos. Otra vez, la impunidad del poder. 26 hogares de luto y 78 heridos con un solo clamor: Justicia.
El pueblo sabio está enojado, está harto de los abusos y la indolencia del poder. Para muestra dos perlas negras de nuestros gobernantes:
El presidente Andrés Manuel López Obrador, que pregona una y otra vez “primero los pobres”, al ser cuestionado por qué no visitó los hospitales y a las familias afectadas por el accidente de la estación Olivos de la Línea 12 del Metro, aseguró que no es su estilo ir a tomarse fotos, y manifestó que “eso ya también al carajo, ese estilo, esa hipocresía”.
Por su parte, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, lo calificó así: “Digo incidente porque no considero que se le pueda llamar accidente, por eso utilizo la palabra incidente, trágico incidente, pero no creo que se pueda llamar accidente, en algún momento podremos hablar de ello”.
¿Incidente? ¿Al carajo? ¡Murieron 26 personas! Hay heridos que tendrán lesiones de por vida. El dolor los acompañará por siempre al igual que a sus familiares, quienes salieron a las calles de la Ciudad de México a recordarlos, a exigir justicia, a denunciar que “no fue accidente, fue negligencia”, que “Cuando la corrupción existe, la memoria resiste”.
Uno de los padres que perdió a un hijo en la tragedia del Metro dijo: “ Pregúntenle a Claudia Sheinbaum cuánto cuesta la vida de uno de sus hijos y lo que cueste, que me lo dé”.
Sí, la vida no tiene precio, pero a la administración de la #4T no le importa. “No es su estilo”.
Para muestra, la permanencia de Florencia Serranía como directora del Metro, pese a los tres accidentes de convoyes y el incendio en la torre de control del Sistema de Transporte Colectivo, en lo que va de la actual administración. ¿Por qué la protegen?
La historia de tragedia y corrupción en la Línea 12 data desde su creación en 2008. La construcción tardó cuatro años, fue inaugurada en 2012, 10 meses después de la fecha contractual pactada. El presupuesto era de 17,000 millones de pesos y terminó costando 47,000 millones de pesos.
El entonces secretario de Finanzas, Mario Delgado, avaló el sobrecosto de la Línea. Hoy es el presidente nacional de Morena. Fue tal el quebranto a las finanzas de la capital del país que Marcelo Ebrard se fue de México y se autoexilió en Francia. Hoy es el Secretario de Relaciones Exteriores.
Desde el inicio de operaciones, la “Línea Dorada”, la obra magna del sexenio de Ebrard en la CDMX, registró problemas debido a un mal diseño en el trazo de la ruta, una errónea elección en el tipo de trenes cuyas ruedas y peso ocasionan un desgaste constante en las vías, así como malos materiales.
Las anomalías llevaron al cierre de la mitad de la línea de 2014 a 2016. Las estaciones de Tláhuac a Atlalilco, justo el tramo elevado, registraron un desgaste ondulatorio de las vías, lo que ponía en riesgo la seguridad de los pasajeros. La situación afectó a más de 450,000 personas.
En 2017, el sismo del 19 de septiembre, provocó daños en la estructura de la Línea 12. Vecinos, usuarios y personal del Metro alertaron de peligrosas grietas en algunas columnas del tramo elevado, por lo que fue necesario cerrar de nueva cuenta seis estaciones.
Tiempo después, las autoridades del Metro informaron que las afectaciones “fueron reparadas”. Sin embargo, vecinos y usuarios que viven cerca de la parte elevada de la Línea 12 denunciaron fallas y daños en la estructura con el riesgo de que pudiera colapsarse. Los temores y alertas se volvieron realidad la noche del 3 de mayo de 2021.
México está de luto. El colapso de la Línea 12 del Metro, exhibe la vileza de la política y de nuestras autoridades. ¿Es el país que queremos? ¿Nos quedamos así o cambiamos?
VERICUENTOS
Monreal, ¡Qué viene la reforma electoral!
Al más puro estilo de la fábula de Esopo, Pedro y el lobo, Ricardo Monreal, presidente de la Jucopo en el Senado, aprovecha todos los foros para amagar con que después del próximo 6 de junio, los legisladores de Morena impulsarán en el Congreso una reforma electoral con el propósito de someter al principio de legalidad a los órganos y a los tribunales, para que no cometan abusos, arbitrariedades, ni violaciones a los derechos humanos. Monreal calificó de alarmante que a 49 candidatos morenistas a puestos de elección popular, les hayan revocado su aspiración y derecho a ser votados. Al doctor en Derecho, le disgusta la aplicación de la ley por parte del INE y del TEPJF, busca crear sus propias reglas del juego electoral con miras al 2024. Monreal, ¿el sastre de AMLO?