Evolución del periodismo
¬ Mauro Benites G. jueves 22, Abr 2021Municiones
Mauro Benites G.
La libertad de prensa no es una actitud tolerante del Estado, que permite la publicación de las cosas claras y verdaderas. No es una concesión graciosa del gobernante en turno. Es algo mucho más profundo. Es una auténtica relación entre la teoría y la realidad cotidiana. Es la comunicación que permite enjuiciar las órdenes, las leyes y las conductas del Estado a partir de su incidencia práctica y racionalizar críticamente los compromisos permanentes. Amable lector, este comentarista reitera el respeto a la libertad de expresión como columna de todas las libertades y le recuerdo a este gobierno que nunca podrán coartarla por más amenazas y presiones que apliquen.
El periodismo mexicano nace con la relación del lamentable terremoto que aconteció en la ciudad de Guatemala, que se publicó en esa capital en el año de 1541. Pero, en realidad y con excepciones brillantes como las de Sigüenza y Góngora y el padre Alzate, fundador del periodismo científico- no hubo periodismo tal y como lo entendemos ahora, sino hasta que Carlos María de Bustamante fundó el primer diario del país, Diario de México, el 1 de octubre de 1805. Con mayor raigambre popular, Fernández de Lizardi, el inmortal autor de El Periquillo Sarniento, padeció un continuo martirio en su heroica defensa de la causa del pueblo
Naturalmente, las persecuciones a los periodistas identifican a los regímenes conservadores. En 1853, reinstalado en el poder Santa Anna, ministro de Justicia y Negocios Eclesiásticos, Teodosio Lares, a instancias, ¡quién lo creyera!, de un periodista, Lucas Alamán, a quien ya rondaba la muerte, dictó una circular estableciendo que los editores de periódicos, libros, folletos, etc., otorgarían, como prenda de buen comportamiento, una fianza de tres mil pesos, destinados a los fondos del gobierno si el acusado resultaba culpable. Los delitos punibles, según Lares, eran la negación de los dogmas católicos y la murmuración en contra de los funcionarios eclesiásticos, civiles y militares.
Santa Anna, Maximiliano y Porfirio Díaz fueron grandes verdugos de los periodistas libres. Durante el periodo revolucionario, la prensa mexicana después de asesinar a Madero la repugnante enemiga del porfiriano, volvió a los causes de la propaganda oficial subvencionada atravez de Félix F. Palavicini.
Fue en la administración del general Lázaro Cárdenas, en 1937, que regresó el gran periodista tabasqueño Regino Hernández Llergo de su destierro en los Estados Unidos y fundó la revista Hoy, que actualizó al mundo editorial mexicano, obligando a los diarios a modernizarse, a hacerse ágiles he hizo que los trabajaban en los periódicos pudiera vivir de su sueldo. A Hernández Llergo se le debe también la creación de las excelentes revistas Hoy, Mañana y Siempre, siendo éstas ejemplo del periodismo libre, valiente y transparente. El periodismo de hoy ha dado un giro con la aparición de las redes y el mundo cibernético.
Este giro no exenta que se deba de atacar a la libertad de expresión.