El outsourcing sobrevivió, se regulará
Humberto Mares N. jueves 8, Abr 2021Así las cosas…
Humberto Mares N.
En pleno auge y locura electoral de las campañas políticas, el gobierno, empresarios y representantes de trabajadores lograron un acuerdo sobre el outsourcing en nuestro país.
Sin duda, este tema causó polémica desde hace meses cuando llegó al Congreso el tema. El gobierno ha insistido en poner orden en la aplicación de esta modalidad, que en resumidas cuentas, era en contra de los trabajadores, dado que perdían sus derechos laborales y sindicales, dado que eran contratados por empresas para prestar sus servicios laborales a un tercero, que no se hacía cargo de los derecho laborales de los trabajadores, con los ahorros correspondientes del caso.
Con este esquema, las empresas y los empresarios se ahorran un dineral en este tema por concepto de cuotas sindicales, bonos o incentivos asentados en los contratos colectivos de trabajo, y en muchos casos los correspondientes impuestos, infonavit, cuotas de ahorros, SAT , etc. A la vista totalmente irregular este esquema.
Sin embargo, debemos de señalar que no siempre es así. Hay esquemas de outsourcing perfectamente legales y que operan bien, que es lo que busca este gobierno, poner en orden, lo cual está más que bien.
Este lunes se llevó a cabo una sorpresiva reunión en Palacio Nacional, encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador con líderes empresariales y los principales líderes obreros y se firmó un acuerdo para regular esta modalidad de outsourcing.
En realidad, la intención de la 4T era eliminarlo, pero gracias a las gestiones de los empresarios lograron salva esta modalidad, que le repito no es mala, pero se abusó de ella. Lograron permanecer con los servicios de outsourcing especializado, es decir empresas o despachos que den un servicio especializado diferente al giro comercial o actividad de la empresa que lo va a contratar.
El texto especifica que se prohíbe la subcontratación de personal, se regula la prestación de servicios especializados y se aumenta el reparto de utilidades de los trabajadores, que era una de las artimañas, más socorridas y que es donde los trabajadores salieron muy bien con un aumento de 156%.
El acuerdo el gobierno da un plazo tres meses para que las empresas arreglen sus contratos y que los empleados que tengan bajo el régimen de subcontratación o en un esquema de outsourcing, pasen a la nómina de las empresas, como debe de ser.
Como ejemplo la simpleza de que una empresa realizara una ampliación en una planta pues tendrá que contratar a una constructora para tal, así de simple y existen miles de ejemplos. La cuestión es proteger a los empleados, que fue donde los sindicalistas pusieron la mira para ayudar a sus trabajadores representados.
AMLO anunció felizmente que llegó a un acuerdo con el sector privado para prohibir la subcontratación, salvo para trabajos especializados, servicios compartidos, que prestan las empresas de un mismo grupo y servicios legales.
Sin embargo, la parte empresarial con plana mayor de las centrales pidieron seis meses para la transición, pero al final después de largas reuniones y argumentos mutuos, lo que lograron es que sean tres meses a partir de que la Secretaría del Trabajo publique los lineamientos para el registro de empresas de prestación de servicios especializados, que sería de un mes, lo cual convertiría el plazo en cuatro meses dijo Lorenzo Roel, presidente de la Comisión Laboral del CCE, quien anunció que será el 1 de mayo cuando se publiquen los lineamientos y en septiembre aplicarán las nuevas reglas.
Estuvieron las principales centrales, los más duros en la negociación, Pedro Haces Barba de CATEM, que defendió la propuesta laboral con mayores planteamientos, Francisco Hernández Juárez, del Sindicato de Telefonistas; Isaías González de laCROC; Rodolfo González de la CROM y Fernando Salgado, de la CTM, entre otros.
El sector privado también llevó buena alineación, estuvo el Consejo Coordinador Empresarial, con Carlos Salazar; Francisco Cervantes, de Concamin y José Manuel López Campos, de Concanaco, que hicieron equipo con la patronal Coparmex, con José Medina Mora y el Consejo Mexicano de Negocios, con Antonio del Valle. La propuesta se enviará al Poder Legislativo, para su discusión y en su caso aprobación.
La vacunación sigue siendo el tema prioritario en nuestro país. La vacunación no avanza como deberíamos hacerlo. Las vacunas llegan, tal vez no como quisiéramos, pero nos falta información sobre el destino de la misma, porque no está totalmente claro. Todos los días prácticamente sabemos que llegan vacunas, pero no queda claro qué se hace con ellas. Ni siquiera las deberían de embodegar, del aeropuerto a sus destinos y al día siguiente aplicarlas. Aquí es donde López-Gatell y sus muchachos no saben qué hacer.
Además existe otra circunstancia que muchas personas toman en cuenta para decidir si se vacuna o no. Es la confiabilidad de las vacunas. El caso de AstraZeneca y la suspensión de su aplicación en países de Europa y que en México se ha aplicado y no sólo eso, se está envasando en México en una coalición entre el laboratorio sueco AstraZeneca, la Universidad de Oxford, la Fundación Slim, el gobierno de Argentina para que se envase en Querétaro en las instalaciones de Laboratorio Liomont, pero por falta de frascos se detuvo la producción.
Esto está totalmente fuera de las manos del gobierno quien puso el mayor interés en este proyecto al adquirir 77 millones de dosis, lo cual contribuyó para dar tranquilidad de la 4T y los ciudadanos, por lo cual ahora se buscan más oposiciones por el mundo para traer más dosis a nuestro país, en espera de la información confiable sobre el estudio realizado a la vacuna de AstraZeneca, que en breve dará a conocer la Organización Mundial de la Salud. Así las Cosas, hasta pronto.