México, el país más letal del mundo
¬ Luis Ángel García viernes 2, Abr 2021Por la Derecha..!
Luis Ángel García
En Bruselas se anunció que nuestro país es el más letal del mundo porque en ninguna otra parte hay tantos actos violentos directamente dirigidos contra civiles y con tantos muertos. Según el reporte de la organización ACLED, en 2020 hubo 5 mil 963 ataques contra ciudadanos con 6 mil 859 muertos.
La Armed Conflict Location & Event Data Project (ACLED) resaltó en su informe que estamos por encima de Brasil, que registró 2 mil 570 fallecimientos violentos, Siria con mil 957 ciudadanos asesinados, Yemen con mil 268 homicidios de civiles y la India que sólo registró 465 decesos. Cabe mencionar que Siria y Yemen enfrentan conflictos internos y guerras con otros países. Esas víctimas no se contabilizaron en el reporte. Es curioso que la India, con mil millones de habitantes -diez veces más que la población de México- tenga tan baja estadística de ataques contra civiles. En este ranking, ocupamos el primer lugar en violencia contra ciudadanos.
El informe europeo precisó que, de los atentados cometidos contra mexicanos, el 94 por ciento de los casos se atribuyó a grupos anónimos no identificados, aunque nosotros sabemos que es el crimen organizado. La relatoría señaló que el estado con más ataques es Zacatecas, el cual registró un incremento del 172 por ciento respecto de 2019, seguido de Guanajuato.
En consecuencia, para ACLED, México es el más violento del mundo, entre los países que no se encuentran en Guerra. Para el organismo internacional, en nuestra nación la violencia es un desafío no solo para la seguridad pública, sino para el Estado mismo.
También figuramos en el Top de los países con más violencia política junto con Siria, Yemen, Ucrania y Afganistán. Las masacres y ajusticiamientos que realizan los sicarios del narcotráfico, que sumaron el año pasado siete mil 253 eventos, nos hacen ver más peligrosos que los enfrentamientos entre afganos y talibanes.
La violencia que se registra en nuestro país es la más alta de las dos últimas décadas. Han crecido, a pesar de las cifras oficiales, los homicidios dolosos, las masacres, las ejecuciones, las desapariciones, los feminicidios, los secuestros y los atentados contra servidores públicos, policías, políticos, aspirantes a cargos de elección popular, jueces, magistrados y ex funcionarios. Recordemos que hace algunos días, el mismo Pentágono advirtió que la tercera parte del territorio nacional estaba controlado por el crimen organizado.
Para que un Estado de Derecho funcione se requiere de estabilidad política y un aparato de seguridad y justicia eficientes. La estabilidad se pondrá a prueba el próximo 6 de junio, pero la prevención y combate al delito, la procuración e impartición de justicia tendrán que reinventarse, porque tenemos un índice de impunidad del 96 por ciento. La violencia sigue siendo una asignatura pendiente del gobierno mexicano, el cual parece no cuentar con las políticas públicas necesarias para enfrentar al crimen organizado y a la delincuencia común.
A esta administración no le gustan las observaciones de organismos extranjeros y siempre tiene otros datos, pero no se puede defender lo indefendible. Lo mismo sucede con el informe sobre violaciones a los derechos humanos que presentó el Departamento de Estado norteamericano, cuya elaboración le correspondió hacer a los funcionarios de Donald Trump y siguen cuestionando a las autoridades mexicanas de incumplimientos sistemáticos, no proteger a los defensores de esas garantías y amenazar a periodistas, donde su función es la más peligrosa del mundo.
Ojalá pronto salgamos de ese nada honroso primer lugar del Top de países más letales.