C-5, oportunidad de una revisión a fondo
Jorge Luis Galicia Palacios lunes 22, Mar 2021Como veo, doy
Jorge Luis Galicia Palacios
- Las fallas son una advertencia a tiempo
Si bien es cierto que la noche del viernes y el sábado por la mañana la población capitalina se vio inmersa en situaciones de crisis, pánico y angustia, tanto por el temblor nocturno y luego por fallas en los altavoces del sistema C5, también es cierto que en materia de prevención de riesgos los fenómenos naturales son inciertos, en cuanto a tiempo, lugar e intensidad de impacto, y en estos casos bien que se puede aplicar aquel dicho popular que sentencia “más vale prevenir que lamentar”.
Que hubo error y con ello también susto, es cierto, pero afortunadamente en ningún caso se registraron situaciones de desastre o de muerte y siempre es preferible que en materia de protección civil y prevención de riesgos sea un error técnico lo que nos advierta que algo está fallando para de inmediato corregir y antes de que sea demasiado tarde, porque pensar que el C-5 está funcionando correctamente y luego un temblor, una fuerte lluvia, un incendio, fuertes vientos o cualquier otra situación de riesgo nos diga lo contrario sería de consecuencias más que terribles y no quedaría en un simple susto.
No hay duda, en la Ciudad de México la cultura de la prevención ha avanzado entre la ciudadanía y hoy en día los protocolos que se aplican para prevenir situaciones de crisis mayores son una realidad y lo mismo son medidas que se aplican como parte de las políticas públicas como también en esquemas particulares de la empresa privada y de la vida civil en general.
Ante el susto y el pánico generado por las fallas en las alertas del C-5, el gobierno que encabeza Claudia Sheinbaum ya ofreció disculpas y creo que hasta generó la baja de los responsables de esos errores, pero más allá de estas acciones correctivas o control de daños, es importante saber que la Jefa de Gobierno de la CDMX ha instruido a su equipo de trabajo una revisión exhaustiva de todo lo que significa la operación del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano, y que de manera abreviada la población conoce como C-5.
Entonces, error técnico o humano, lo que sucedió el fin de semana, donde los reportes hablan de fallas en las alertas de casi mil postes, es algo que da la oportunidad de corregir sí, pero también de revisar las estrategias en lo que a cultura de prevención de riesgos se refiere, de revisar y actualizar los sistemas operativos de todos estos postes de alerta que hasta ahora nos han brindado más satisfacciones que problemas.
Y en esta revisión del C-5, no estaría por demás que, como seguramente se hace, sus operadores retomaran la filosofía FODA, que en general se utiliza para hacer planeación estratégica, tanto en los sectores de la administración pública como en la privada y ese modelo no es otra cosa más que visualizar fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas, y en estos casos hay que tener muy presentes lo que un manual de prevención de riesgos recomienda; “las crisis también son oportunidad”.
Ojalá que los errores en el C-5 deriven en una mejor operación y funcionamiento, y si eso sucede es un hecho que el susto del fin de semana se convertirá en agradecimientos permanentes por parte de la población en general.
LAS CARTAS HABLAN.– Ya que estamos con el C-5, no está por demás señalar que allá por el rumbo del sur de la ciudad de México, la alcaldía que encabeza Patricia Aceves Pastrana, a través de su Dirección General de Participación Ciudadana, en estrecha colaboración con las autoridades del gobierno capitalino, ya realizan un monitoreo para detectar posibles fallas en los servicios que se otorgan desde esos postes en materia de seguridad y vigilancia, protección civil, urgencias médicas, medio ambiente, movilidad y servicios a la comunidad.
Los reportes incluyen ubicación, así como funcionamiento de: botón de pánico; interfón; video y alerta sísmica. Para ello el personal que realiza esta supervisión nos comenta que además de manipular los botones para esperar la respuesta de los operadores del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano, también recogen la opinión de la ciudadanía y verifican con mayor precisión el buen funcionamiento de este sistema.
Enhorabuena, sin duda un buen ejemplo de coordinación entre los diferentes niveles de gobierno cuando de atender la demanda ciudadana se trata.
VA MI RESTO.- A propósito de control de daños, no existen antecedentes exactos de cuándo surgen los planes de contención o control de daños en situaciones de crisis, pero por lo general los estudios que hacen referencia a este tipo de eventos aluden a casos relacionados con desastres naturales.
En este tipo de estrategias en materia de comunicación no se puede soslayar el funcionamiento de aquella oficina que, hace algunos años, en Nueva York, EU, cuando Rudolph William Louis Giuliani era alcalde, se hizo famosa ya que desde ese espacio se atendían problemas reales y posibles y en ella se diseñaban o planteaban posibles soluciones a cada caso. Dicho espacio de reunión llevó por nombre una frase que, sin duda, el objetivo era la prevención, “Por si acaso” se llamaba y se implementó casi todo el periodo de la administración Giuliani (1994-2001).
En materia de prevención, no estaría mal que en los tres niveles de gobierno tuvieran su oficina “por si acaso” con la idea principal de encontrar respuestas eficientes y oportunas ante cualquier situación de crisis, y hasta ahí porque como veo doy.