Feminicidio
¬ Augusto Corro martes 9, Mar 2021Punto por punto
Augusto Corro
El movimiento feminista no se detendrá en México. Las mujeres están hartas de violencia y no dejarán de protestar.
Mientras las autoridades no les brinden justicia y protección ellas continuarán con sus protestas e inconformidades.
Según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) en 2020 hubo 3 mil 730 mujeres asesinadas.
De ese total 939 fueron víctimas de feminicidio y los demás casos se investigan como homicidio doloso.
De enero a diciembre de 2020 el delito de acoso sexual pasó de 4 mil 204 casos en 2019 a 5 mil 597 el año pasado.
En 2020 fueron miles las llamadas de emergencia al 911 por incidentes de violencia contra la mujer.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reveló que 66.1% de las 46.5 millones de mujeres mayores de 15 años enfrentó violencia de cualquier tipo alguna vez en su vida.
Las cifras muestran la realidad que tiene como eje la violencia contra las mujeres ante la pasividad de las autoridades.
Por esa razón el movimiento feminista aprovecha el Día Internacional de la Mujer para exhibir su enojo, ira y molestia ante el constante aumento de la violencia contra las mujeres.
Su reclamo principal es que se garantice el derecho de todas las mujeres, niñas y adolescentes a una vida libre de violencias.
La acción de las autoridades
En el movimiento feminista no ven que las autoridades se empeñen con el esfuerzo y entusiasmo en la lucha contra la violencia que padecen las mujeres.
Concretamente, ellas señalaron que falta coordinación, políticas públicas, servicios y acciones para frenar el aumento de agresiones.
Seguramente se cuenta con medidas preventivas para evitar las acciones criminales, pero no funcionan.
Y los casos de feminicidio crecen al mismo tiempo que las exigencias de justicia de los feministas y sus marchas de protesta.
La inconformidad de las feministas terminará cuando se empiecen a notar que funcionan correctamente las medidas preventivas contra las agresiones a mujeres.
Cuando los feminicidas sean perseguidos, detenidos y presentados ante el juez. De otra manera las manifestaciones para exigir justicia continuarán.
Las autoridades también deben comprometerse a tratar el tema del feminicidio con mayor atención.
No deben asumir esa condición de menosprecio a las demandas feministas. Vivimos tiempos difíciles en que las actitudes de desdén son criticadas.
El propio presidente Andrés Manuel López Obrador se encuentra en medio de una tormenta de críticas por su insensibilidad para tratar a las feministas.
Como si no fuera suficiente lo anterior, el mandatario tabasqueño sigue empeñado en apoyar la candidatura de un controvertido político a la gubernatura de Guerrero.
Ese aspirante al gobierno guerrerense es el senador con licencia, Félix Salgado Macedonio, quien es acusado de violación sexual por cinco mujeres. Pero el presidente López Obrador poco o nada hace para bajar de la candidatura a ese agresor de mujeres.
Ni ven ni oyen
Lo mismo ocurre en el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) que decidió, tras una serie de maromas políticas burdas, apoyar al impresentable Salgado Macedonio.
Por cierto, en el colmo del cinismo, el citado aspirante difundió en redes el domingo el mensaje: “Que vivan las mujeres”, por el Día de la Familia.
Claro, surgieron infinidad de protestas, incluidas del surgidas del movimiento feminista, que se evitará la candidatura de Salgado Macedonio.
A la hora de escribir estas líneas seguía firme el citado senador como abanderado de Morena en la contienda electoral de Guerrero.
Las inconformidades de propios y extraños con la candidatura no fueron suficientes para que el mandatario dejara de apoyar a Salgado Macedonio.
¿Cuál será el futuro de las víctimas que acusaron al senador de violador? Una de ellas ya dijo que tendrá que abandonar el país.
